Lᴏᴠᴇ Sᴛᴏʀʏ·ꜱ [Oɴᴇ Sʜᴏᴛꜱ] |H.S|

₀₁| ₀₂/₀₂• Lᴀ ᴀᴍᴏ

La amo porque no sé el momento exacto en que comencé a sentir algo más profundo por aquella chica de tez morena y ojos hermosos, la amo porque sólo con ella soy quien realmente soy; no debo fingir ser aquel hombre tonto que suelo ser con las personas que no conozco o simplemente no me simpatizan. La amo porque ha descubierto cada una de mis partes y aun así no se ha alejado de mí. La amo por lo que me hace sentir al estar cerca de ella y es que por más que trato de evitar perderme en sus ojos simplemente me es imposible ¿por qué? Porque al mirarla me doy cuenta de que soy el chico más afortunado del mundo al encontrarme a su lado, pues muy pocos han tenido el acceso a su corazón y con nadie se muestra tal cual es. La amo por la forma en la que ríe abiertamente, sin importarle mostrar su sonrisa aunque confieso que está trata de ocultarla siempre que puede. La amo porque me hace sentir de una manera indescriptible siempre que se encuentra cerca, aunque se encuentre en silencio tiene la habilidad de cambiar mi estado de ánimo con tan solo estar junto a mí. La amo porque es todo lo que pedí sin darme cuenta y sin que esta lo sospechara llegó a ser tan esencial en mi vida que simplemente no la puedo olvidar tan fácil como quisiera.
La amo porque apareció cuando no la buscaba, sólo pensaba en la posibilidad que tenia de estar cerca de ella porque llegué a amarla sin esperarlo pero dicen que así es el amor, es tan extraño que te hace dudar de ti mismo; metiéndote en la cabeza que quizá no eres lo suficientemente bueno para ella y que esta jamás te verá de la misma manera en la que tú lo vez. La amo por tantas razones más, pero también soy un tonto que dejó de luchar por ella cuando vio que las cosas no pintaban a un buen final, soy tan tonto al hacerla a un lado porque temía perderla como amiga y termine perdiéndola de igual forma. Soy un tonto que dejó de ser lo que ella podría estar buscando para convertirme en eso de lo que huye. Soy un tonto que olvidé que el secreto de enamorar a una chica es mostrando que eres fiel a tus sentimientos y mis sentimientos por ella eran más fuertes de lo que jamás me imaginé. Soy el más tonto al buscar a alguien más que me permitiera olvidarme de ella cuando sabia que nadie podría compararse a ella porque simplemente es imposible intentar reemplazar a la mujer que te ha robado el corazón con alguien que no le llega a los talones. Mi error fue fingir que ya no me importaba, que ya no le pensaba y que seria fácil sacarla de mi corazón cuando esta había hecho lo posible para no hacerlo sin darse cuenta de ello. Fui un tonto al pretender que amaba a otra chica que no fuese ella por el temor de pensar que no sentía lo mismo por mi sin pensar en que lo más posible y probable era que tú sintieras lo mismo por mi, fui lo bastante tonto para no escucharte aquella vez en la que casi me suplicabas que no me alejara de ti, haciendo de lado esto y olvidándome por completo de ti; sin saber que al hacerlo me estaba negando a mi mismo y a lo que era gracias a ti.

-¿Olvidaras todo lo que hemos pasado sólo por ella?- cuestionaste aquella vez en la que peleábamos como ya se había hecho una costumbre
-No es necesario que la metas en esto cuando no tiene nada que ver- la defendí y es que aprendí a fingir tan bien que la amaba que la preferí antes que a ti
-¡No la estoy culpando de nada Styles!- exclamaste con molestia, dejándome perplejo ante aquella faceta tuya. -Creo que tienes razón y lo mejor es dejar todo por la paz, no hablar y hacer de cuenta que jamás fuimos amigos- añadiste antes de marcharte del lugar; dejándome ver que te había perdido para siempre, cuando lo que menos deseaba era aquello.
Fui un tonto al no luchar más por ti y comportarme menos como el idiota que era, soy un tonto al comprender que me amabas demasiado tarde, fui un tonto al temer dejar de lado a Samantha porque a pesar de que no la amase, sabia que ninguna mujer merecía sufrir por un chico infantil que sólo había fingido amarle para intentar sacarse del corazón a alguien como tú.
Al final logré terminar con la farsa pero ya era demasiado tarde, tu habías aprendido a vivir sin mi, o al menos a intentarlo y yo aun no me resignaba a perderte del todo porque una mujer como tu no se puede superar. Y, aquello fue lo que olvidé por completo.
-Por más tonto que seas ella te extraña- soltó mi hermana al verme tan mal
-No merezco que lo haga- respondí sabiendo de antemano que aquello era más que cierto
-Creo que no por eso ella dejara de hacerlo- reprochó - Deben hablar ¿por qué no te animas a venir con nosotros? - me ánimo, logrando su objetivo y es que aunque no quisiera me encontraba justo en la casa que había decidido abandonar con mi absurda y tonta elección.
Quise decirte todo lo que sentía pero en su lugar me puse a llorar cual niño pequeño al que se le ha quitado el juguete que tanto quiere, no eres mi juguete pues eres esa parte esencial en mi vida que por un tiempo quise olvidar y ahora que estaba frente a ti no pude decir nada, simplemente te dejé ir y puedo asegurar que cause lastima a aquellas personas que nos observaron, incluyendo mi propia madre.
-Te ayudaré a que hables con ella- soltó la mujer que se hacia llamar mi madre y es que en momentos como este no hacia más que causarme miedo.
-No tienes que hacer...
-Eres mi hijo y por más tonto que hayas sido, sé que merecen darse una oportunidad- intervino dejandome perplejo y es que aquella mujer sin duda alguna fue mi salvación, pues gracias a ella y a tu madre pude hablar de nuevo contigo.
Sin embargo no todo fue bueno, decidí alejarme por un tiempo de ti y a pesar de decir que serviría para ayudarnos a darnos cuenta si lo nuestro era verdadero, no sirvió mas que para comprender que sabia la respuesta incluso antes de marcharme y es que no se necesita la distancia para saber cuando amas a alguien.
Fui un tonto al alejarme de la ciudad, pero no fui el tonto que siempre fui cuando tome la decisión de regresar por ti porque ahora se que fuiste diseñada perfecta y especialmente para mí.
Así que no tengo nada más que decir a parte de pedirte que seas mía.
Porque estoy tan enamorado de ti, no como el primer día porque aquello no es nada comparado al amor que siento ahora mismo.