Capítulo 30

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Eleonor al ver el estado en el que se encontraba toda la espalda del pequeño príncipe quedó en shock.

-¿¡QUÉ ES LO QUE TIENE ELEONOR!?-Pregunto más que alterada Elizabeth. Estaba al punto de la desesperación, el ver a su hijo de ese manera y ella teniendo que dar más fuerza a su agarre para no soltarlo, era simplemente desgarrador para ella, y ver que Eleonor postrada con una horrible cara viendo la espalda, sólo la hizo pensar lo peor.-¡ Eleonor respóndeme!- Grito Elizabeth.

-Princesa necesito que se aparte y se quede en la puerta a una distancia prudente.-Dijo Eleonor de la manera más tranquila posible.

-¿Eleonor que pasa?-Pregunto Elizabeth con lágrimas en los ojos.

Se escucharon pasos fuertes correr hacia el cuarto, siguiente a eso se habrio la puerta del cuarto pero en toda la desesperación de Elizabeth y Eleonor no escucharon ni los pasos, ni la puerta abrirse.

-Princesa necesito que se aparte si quiere que lo salve.-Dijo con la mirada perdida.-Por favor.-Al decir eso, Elizabeth entendió que debía apartarse, Eleonor nunca le pedía algo a Elizabeth, era muy pero muy rara la vez que Eleonor le pedía algo a su princesa. Solo le había pedido una cosa en toda la vida que llevaban juntas. Y era que la dejara estar a su lado sin importar que. Y hasta hoy en día así era.

-Esta bien, pero debes prometerme que no saldrás herida. Sabes que nunca intercambiaría tu vida por otra. Y debes prometer que no será así.

-Siempre sabe lo que pasa por mi cabeza. Lo prometo.

Elizabeth sabía que cuando Eleonor prometía, ella  cumplía. Así que dió unos cuantos pasos atrás hasta toparse con la pared, estaría a la distancia prudente que le pedía Eleonor.

-Cierren los ojos.- Dijo en un susurro, y de inmediato Elizabeth volteo la cabeza para encontrarse con sus hermanos y a Danna en la puerta.

Elizabeth volteo hacia Eleonor, y al ver lo que le pasaba, no dudó en correr rápido hacía sus hermanos entendiendo el mensaje de su amiga. Cuando Eleonor usaba mucha fuerza para algún conjuro o hechizo, irradiaba una luz muy poderosa. Eleonor era una híbrida muy rara, la única en su existencia de sangre.

Los elfos de la tierra controlaban la magia oscura, mientras que las hadas la magia blanca. Y ella era una combinación de ambas, su existencia en sí, no debería ser posible, pues ya que es magia contraria se espera que la más fuerte consuma a la otra. Pero Eleonor es capaz de controlar las dos sin que una consuma la otra, algo que era extremadamente raro, pues para esto se debería tener años de entrenamiento y ella lo hacía desde que tiene memoria.

Cuando Eleonor debía usar mucha energía o magia, combinaba sus poderes y hacia un hechizo o encantamiento poderoso, pero para lograr esto debía consumir algo de su fuerza vital. Y entre más poderoso el hechizo, más fuerza vital consumía.

Lo que le alarmaba a Elizabeth de cuando hacía esto, era que consumiera mucha de su fuerza y que un día ella no sobreviviera. Pero otro de los casos en los que ella se preocupaba en ese momento, era que estaban dentro de la casa donde estaba la gente que le importaba. Cuando Eleonor usaba sus dos fuentes de magia, un lado oscuro tomaba control de ella, lo que hacía que para no tomar toda su fuerza vital, consumía la que estaba asía su alrededor, y esto lo hacía sacando las almas de las personas por medio de sus miedos. Solo alguien muy fuerte o alguien que ya había pasado por esto, sobreviviría. Cuando una persona miraba hacia la luz blanca que resplandecía desde dentro del cuerpo de Eleonor, quedaba en un trance donde tenía que combatir sus peores miedos para no morir o más bien para que su alma no abandonara su cuerpo.

Cuando Elizabeth corrió hacia sus hermanos, era para taparles los ojos. Se colocó enfrente de Danna quien estaba en medio bloqueando su vista, al mismo tiempo que tapaba los ojos de sus hermanos que estaban al lado de Danna.

-Hey Danna mírame a mi. Mira mis ojos. Solo mírame a mi.-Le dijo a Danna para que no Kirara detrás de ella.

-Elizabeth. ¿Qué pasa?-Pregunto Danna apunto de llorar de desesperación.

-Eso te lo diré después, pero ahora quiero que todos retrocedan dos pasos al mismo tiempo que yo, y Danna no dejes de ver mis ojos en ningún instante. Muy bien, a la cuenta de tres todos damos tres pasos hacia atrás. Uno. Dos. Tres.- Elizabeth con sus manos en los ojos e sus hermanos, les dió un pequeño empujón hasta que quedaron fuera del cuarto, después rápidamente, les dió otro mucho más fuerte para que cayeran a los lados detrás de las paredes que estaban al lado de la puerta. Quedando solo con Danna enfrenté de ella.

-¿Chicos están bien?- Pregunto Elizabeth.

-Sí estamos bien.-Contestaron al unison.

-Perfecto, ahora Danna, vamos a dar la vuelta en círculo hasta que tú quedes con la espalda a la puerta y yo con la espalda a la pared. ¿Bien? -Danna asintió con la cabeza.- En ningún momento quites tus ojos de los míos. ¿Entendido?

-Sí.

-Bien.- Dijo Elizabeth suspirando.

Elizabeth agarro a Danna por los hombros para empezar a dar la vuelta en círculo lentamente. Cuando lo lograron sin que Danna mirada a Eleonor, ella se dirigió a sus hermanos.

-Tyler, a la cuenta de tres, cuando tiré a Danna hacia ti, quiero que la agarres, y Josh cuando eso pase cierra rápidamente la puerta que está enfrente tuya de acuerdo. Por cierto no importa que pase, no vayan a abrir la puerta hasta que la luz de aya apagado por completo y no traten de entrar al cuarto si la luz todavía sigue. Eleonor cuando termine sabrá que hacer. Por favor no se vayan a alarmar demasiado, esto lo e echo un millón de veces.

- Elizabeth.-Empezo a hablar Josh-¿Qué demonios te traes en mente? Si algo te ocurriese no sabríam...

-Uno.- Empezó a contar Elizabeth.

-Elizabeth por favor piensa en lo que aras...-Dijo Tyler.

-Dos.

-Elizabeth no lo hagas...-Quiso hablar Danna, pero no pudo terminar.

-Tres.

En ese mismo instante, Tyler tenía en sus brazos a Danna y Josh estaba postrado en frente de la puerta con la cara a la misma, indicando que ya la había cerrado.Cuandio dió la vuelta en sí mismo y vio a su hermana. Y lo que miro lo dejo perplejo

-¡ELIZABETH!- Eso fue lo único que salió de su boca.

*RECHAZADA*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora