Capítulo 2

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Cuando por fin llego a la universidad, me encuentro con un campus enorme con muchas hojas de cerezo cayendo de los arboles casi susurrándome, ¡bienvenida! En ese momento respiré hondo y seguí caminando hasta la administración junto a otros estudiantes, que al parecer se encontraban en la misma situación que yo. Allí en administración pregunté quién podía hablar en español y un maestro con aspecto serio me respondió:

-Mmmmm... con que tú eres la alumna de extranjero que no sabe hablar inglés...- su voz era algo grave y al mismo tiempo burlona, aunque era claro que procedía al igual que yo de Latinoamérica por la forma tan particular de hablar el español.

-Pues te va a costar mucho poder adaptarte sin que uses el inglés y el japonés... ¿mmmmm?- me miró con una cara de duda algo aterradora y dijo con mucha alegría -¡Ya sé!- - Te voy a poner un tutor, uno de nuestros alumnos que habla español, inglés y japonés para que te enseñe todo lo que debes saber.

No me parecía mala idea, después de todo solo conocía muy pocas cosas de Japón así que acepté.

Luego de quince minutos de papeleo llegó de nuevo el maestro de aspecto serio pero divertido, a su manera, por una pue­rta de atrás trayendo a alguien consigo, aunque yo no veía claramente quién era pues el profesor tapaba por completo ese lado de la puerta. Entonces me dijo:

- Bueno él será tu tutor personal para todo, las clases, los apuntes, para enseñarte nuestras tradiciones, culturas y me imagino que no conoces la ciudad así que él te va a llevar. Conforme el chico iba apareciendo se me hacía más conocido y me llevé una gran sorpresa. Al instante que me di cuenta que era el chico arrogante del metro, con cara estupefacta le dije:

-¿Tú? ¿Qué haces aquí?-

-Estudio aquí chica distraída- dijo con tono irritante.

El maestro dijo: - Oh! Bueno como ya se conocen no será muy difícil que se lleven bien, entonces Haru la dejo en tus manos- y se alejó caminando hacia otro salón dejándonos solos.

-Bueno, como vamos a ser compañeros desde ahora sería mejor en presentarnos, soy Naomi- dije en tono amigable girándome hacia él. Cuando traté de darle la mano en forma de saludo, me vió con unos ojos grises profundos pero terroríficos, interrumpiéndome:

-bueno... antes que nada voy a poner unas reglas:

1. Nunca me interrumpas mientras te estoy hablando.

2. Si yo no te pregunto nada, no me hables.

3. No nos vamos a dirigir ni una palabra sobre otro tema que no sea con fines estudiantiles.

-Y por último, no somos amigos - luego con una mirada amenazante se fue caminando y se volteó de repente- ¡ah! Por cierto soy Haru- con un tono de sarcasmo y con cara seria.

Al momento le dí la espalda de igual forma y miré la hoja de clases que me había dado la secretaria, antes de que llegara el profesor:

"Clase de anatomía"

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