La última noche. (Final) (Parte 1)

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"... Y siendo absolutamente honesto he querido verte sufrir desde la primera noche que te vi... ¡Hasta me he hecho pajas de sólo pensarlo! ¿No te parece loco?"

...Dave lo recordaba, recordaba haber entrado por aquella puerta a la que había sido conducido junto con Red Mist, pues según tenía entendido y tal como habían quedado sus planes esta era la guarida donde se reunirían junto a Hit Girl y Big Daddy; La niña loca y su padre que parecía estar todavía más loco.

La escena que recordaba después de esto era todavía peor y más sangrienta, él estaba consciente de que nada bueno saldría de ponerse una máscara y fingir que era un súper héroe, él lo sabía por completo y sin embargo había sido capaz de continuar con eso... No sólo había estado arriesgando su vida... Sin saberlo también estaba arriesgando la vida de otras personas y no se había dado cuenta de esto hasta que ya era demasiado tarde y podía ver como acababan de moler a golpes a aquel que aparentemente era Big Daddy.... Eso y luego el pequeño cuerpo de aquella que no era más que una niña con una peluca y un antifaz arrojado con violencia contra una de las ventanas quebrando esta por el impacto de un par de balas o quizás algo más que esto... Hit Girl estaba muerta... Hit Girl acababa de ser asesinada frente a sus ojos... Se suponía que él era un héroe y no había podido hacer nada...

...Nada...

...No había podido hacer nada...

¿Por qué?

¡¿Por qué?!

.... Luego de eso sólo sintió un golpe en su cabeza y todo se volvió oscuridad, las penumbras apoderándose de él y junto al dolor provocándole que olvidara los labios de Red Mist, esos labios que anteriormente de alguna forma bizarra le habían ofrecido la calidad y el cariño de un beso, la protección y la seguridad... Lo mentirosa y manipuladora que podía llegar a ser una persona.

Y no podía recordar mucho más... Sus recuerdos dañados sólo le podían servir para algo... Y eso era sentir el dolor. Sentir el horrible dolor aferrándose a su piel como sanguijuela bebiendo de su sangre negándose a alejarse. Una y mil descargas eléctricas desde sus genitales por todo su cuerpo junto a cientos de palabras que sin permiso se deslizaban de sus labios confesando todo aquello que sabía o creía saber, cosas sumamente importantes o sin ninguna importancia en realidad, su nombre, su edad, su dirección, el nombre de la chica de sus sueños o incluso el tipo de auto que le hubiese gustado tener cuando adulto.... Y escuchando todo esto podía recordar a un destello rojo, un tipo vestido del color de la sangre en la esquina de la habitación que no podía hacer más que reír mientras los tipos que torturaban a Dave seguían con lo suyo, un estúpido hombre al que tiempo atrás Dave estaría orgulloso de llamar amigo.. Aquel que le había traicionado, aquel que se había apoderado de su saliva y casi de su cuerpo y al parecer no había dudado ni un segundo en apuntarle con aquella arma.

... Y después... Después de toda esa tortura, con su cuerpo lastimado y sus labios completamente secos podía recordar la sensación del aliento del recién descubierto como Christopher Genovese contra su cuello, aún atado a aquella silla en la que había sido torturado, sintiendo enseguida sus labios sobre los propios con la máscara ya destrozada, chupando con fuerza el labio inferior y rápidamente extrayendo la sangre, lamiendo y succionando esta como si no hubiera un mañana y con los cuidados mínimos. Las lágrimas se deslizaban por el rostro maltratado y golpeado de Dave incapaz de procesar del todo lo que ocurría, lágrimas que Chris se había encargado de limpiar con su lengua todavía con menos cuidado del que había tenido antes, disfrutando de todo eso como si de un festín se tratara, disfrutando de las reacciones que el que ya ni siquiera podía ser considerado como un súper héroe, esas muestras de dolor.

Con sus recuerdos dañados y su cabeza adolorida apenas podía recordar un poco de lo que había ocurrido después de eso. El ser despojado de su disfraz, los labios del de cabello castaño recorriendo todo su cuerpo con besos, lamidas, chupetones, mordidas y todo tipo de acciones similares, dejando una y mil marcas en el de por si lastimado cuerpo, marcas moradas, la forma de los dientes perfectamente alineados en rojo, sangre por aquí y sangre por allá.

Escalofríos que recorrían la espalda del muchacho rubio y tenues gemidos que se deslizaban de sus labios que apenas podían ser catalogados como tal. Ambas siendo cosas que no sabía si debía atribuir a las recientes descargas eléctricas que había recibido o al placer... ¿Placer? ¿Cómo alguien podía sentir placer con algo como tal?

Y dolía, dolía como nada había dolido, dolía incluso tomando en cuenta que había placas metálicas en su cuerpo que supuestamente le ayudaban a soportar el dolor. Aquellas terminaciones nerviosas que presuntamente debían ayudar a reducir el dolor pero... Honestamente no estaban haciendo bien su trabajo.

... Y entonces ya no dolía más...

... Y entonces su cuerpo era empujado con fuerza mientras su interior era desgarrado sin piedad, mientras un montón de escalofríos y espasmos recorrían sus piernas que temblando se doblaban como si las rodillas se quisieran tocar entre sí. Sentía el aliento de Chris contra su nuca, sentía esa manera en la que le sujetaban del abdomen y su nombre de súper héroe siendo pronunciado una y otra vez en suaves jadeos llenos de la lujuria y la lascivia.

"...Kick-Ass... Kick-Ass..."

...Y entonces ya nada dolía, ni su cuerpo, ni su mente, ni nada... Era justo en ese momento en el que Dave se preguntaba si había algo mal con él, que seguramente debían ser una y un millón de cosas, pues después de todo y aferrándose a un último suspiro de vida con sus manos todavía enguantadas apoyadas en la pared no había puesto ninguna resistencia a ese momento en que un acto tan impuro y tan inmoral estaba ocurriendo... 

Desde la primera nocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora