Escritos.

Por : Yanibel López.

Y con el tiempo te darás cuenta que habrán malos entendidos, problemas, situaciones, y que si el orgullo de uno de los dos no se doblega, ninguno tendrá fruto, y eso jamás tendrá futuro porque para avanzar uno no debe achicar el camino, solo dejar que siga su curso.
Si nos detuviéramos a no seguir solo porque existe algo que te lo impide jamás llegarás a tu destino.
En una relación, en un matrimonio,
Si por cada percance, por cada situación, cada problema que se le atravesará en su camino, decidieran no seguir, ¿Dónde quedaría su destino?
Seamos como el tren no la estación, el tren sigue su curso, cada estación es una parada, quita tu piedra y anda.
Si eres el  único/a que puede sacarla a flote, hazlo.  Porque si ni uno de los dos se doblega, el orgullo los consumirá, el amor podrá ser una fuerza mayor, pero el orgullo es otra y mucho mayor, tiene el poder de destruir y no tiene que tomarse mucho tiempo, ni hacer mucho esfuerzo.

Uno de los dos tiene que ceder, uno de los dos tiene que doblegarse, dejar la defensiva y bajarse, para que así pueda crecer.

Porque si tú tienes una discusión con alguien ¿crees que gritándole más conseguirás arreglar las cosas?
Mientras que si eres sumiso, te doblegas y no dejas que tu orgullo actúe por ti, saldrá mejor todo.
Y la otra persona se dará cuenta de que hizo mal, y que a pesar de que lo hizo mal, tú no quisiste pagarle igual, porque eras diferente, no eras como ella.

El callar y solo escuchar, ver y analizar, te ayudarán a crecer como persona, entenderás que así se dan mejor las cosas, y no dañas, no te dañas, vives bien, y nada puede afectarte.

#YMLC.