Cartas para ti...

Día 3 y 4

04-08-2017

Ayer estaba demasiado cansando por eso no te escribí algo ayer, sabes la razón por la que estaba cansado, pero bueno, eso ahora no importa.

No te pensé demasiado, pues no habías estado presente en mensajes o que hubiera alguna razón para hacerlo, pero solo era cuestión de tiempo para que volviera a la montaña rusa de la que estaba saliendo.

Después de que llegué a mi casa, quise escribirte porque tenía que hacerlo, responderte que tipo de pendejada podría hacer mientras estaba con mis amigos, bueno, todo terminó mal.

Esas mismas pendejadas que quise evitar ayer, las hice hoy, estando "normal", ayer me confundiste mucho, muchos de tus estados parecía que estabas bien con él, decías que lo amabas, decías que su voz era la mejor (o algo así, no recuerdo que fue lo que dijiste) pero la confusión de todo esto, es que llegas en la noche a decirme que me quieres, que me extrañas demasiado, que mi voz te mata, que te importo demasiado, yo daba por hecho que ya nada de eso era cierto, puesto que se lo decías a él.

Me reclamaste que  por qué hablaba con la chica que te conté en la carta anterior, ¿y sabes qué? Ya no seré tu pendejo, me cansé de estarte rogando que estés conmigo que mandes al carajo todo ya no más, me cansé de esperarte, me cansé de todo.

Pienso seguir hablando con ella, no por tu "visita" me dejaré caer un día más, pues hoy todo el día me la pasé acostado en mi cama, unos ratos pensando en ti, otros llorando, otros buscando una explicación a todo esto, unos otros durmiendo, unos otros odiándote.

Posiblemente vengas a vivir a Irapuato, que irónico, más cerca de mí, pero si te vienes o te quedas, será algo que me dará igual, pues ahora lo menos que quiero es conocerte o verte por primera vez frente a frente.

Me pides que seamos amigos, me pides lo imposible. Sabes todo lo que siento por ti y aun así me pides que seamos amigos, bueno ya te lo dije, no lo podemos ser ahora, ni mañana ni en una semana necesito arrancarte de mi vida y ver si una amistad es lo más conveniente o ya de plano dejarte de hablar y que seas una persona más de los 7 mil millones y cacho que hay.

Ya estoy decidido a sacarte de mi vida y dame la oportunidad con alguien más. No sé que persona será, eso es lo que menos importa que persona sea, mientras esa persona me quiera en verdad, sin rodeos, me demuestre con hechos lo que siente por mí, es con esa persona con la que me daré mi oportunidad.

Adiós, cada día te quiero menos...