-Recuerdos de un amor.-

24.

•Dylan•
Nos quedaba una semana y media en Atlanta a Jens, Luke y a mi madre antes de partir a Chicago. Hablamos con nuestras familias y mi madre se ofreció a venir con nosotros mientras encontrábamos a alguien que cuidara de Luke. Andy, ahora esposa del padre de Jens igual se ofreció a venir con nosotros, pero su boda estaba reciente y ellos ya tenían planeado el viaje que harían, la dichosa "luna de miel" de todo casado y era algo que no queríamos arruinarles.

Una noche antes de que regresáramos a Chicago, el hospital en el que trabajaba Jens organizó una cena de despedida para los que habían sido transferidos.
Por la tarde pasamos a dejar a Luke con mis padres ya que no podríamos llevarlo al evento y por la tarde del día siguiente pasaríamos por el y mi madre ya que todo estaba listo para irnos esa misma noche. Jens se puso un lindo traje que recién había comprado y yo me puse un vestido azul marino el cual combinaba con su corbata.
Estaba un poco nerviosa por lo que nos esperaba en Chicago, sería comenzar de nuevo.

Salimos del apartamento para ir al salón en el cual nos citaron, cuando llegamos al ver la decoración sentí como si hubiese estado ahí antes, era una sensación extraña a pesar de que anteriormente no había pisado este lugar.
Nos indicaron la mesa en la que estaríamos y fuimos a ella, estaban 2 compañeros de trabajo de Jens, cada uno con su esposa al lado.
Todo iba bien, dieron un pequeño discurso de despedida y de buena suerte para los que se irían, después sirvieron el primer platillo de la cena, eran casi las 11 de la noche y comencé a sentirme mal, me dolía la cabeza, era un dolor punzante acompañado de un leve mareo lo cual era extraño porque hace un par de horas estaba en perfecto estado y solo de repente comencé con todo esto pero no quería arruinarle su cena a Jens, así que solo me quedé en mi lugar y preferí tomar un poco de agua en lugar del vino que nos habían servido.
Terminando el tercer platillo de la cena, pusieron un poco de música y varios se levantaron a bailar mientras que los meseros pasaban a recoger los platos y a servir los postres.
Jens se levantó de su asiento para ir a las mesas situadas en el otro extremo con sus demás compañeros que le habían hablado mientras que Lilia y Rebeca, las esposas de los médicos que nos hacían compañía en nuestra mesa también se retiraron para ir al tocador.

El dolor comenzó a ser más intenso y sentí como un gran frío en mi interior se expandía por todo mi cuerpo dejándome con un ligero temblor de piernas, brazos y manos, casi como si estuviera ansiosa o algo parecido.
Llevaron los postres a la mesa y mientras me dejaban el mío, escuché de fondo una canción bastante relajante, era como si estuviera teniendo un dejavú pero bastante extraño. Inmediatamente fue como si todos mis sentidos se hubiesen apagado dejándome únicamente con el auditivo...la tonada de aquella canción me pareció conocida y cuando comenzó la letra...efectivamente, esa era la misma canción que había estado rondando por mi cabeza las últimas noches, lo cual no había comentado nada con nadie porque no le tomé importancia a todo eso.
El ruido de los meseros chocando los platos con mesas y charolas, la gente hablando, el ruido de el desliz que hacían los zapatos y zapatillas de las personas al bailar...todo ello fue disminuyendo conforme iba a escuchando más y más esa canción, le preste tanta atención que mi mirada solo quedó perdida sobre mis manos que sostenían parte de la tela de mi vestido, la tonada con la letra de la canción invadieron mi mente y pensamientos trayendo consigo una imagen de...alguien, un chico...era alto, de cabello rizado, un poco delgado y...él, él estaba tomándome de la cintura de una forma tan delicada que hizo que sintiera como mi piel se erizaba al toque. A nuestro al rededor se encontraban más personas bailando en un salón con una decoración similar a la de este. De la nada todo se fue tornándose obscuro y pase a una imagen en donde aquel chico pasaba una de sus manos por debajo de mi cabello, acariciando mi cuello y con la otra me tomó de la cintura haciendo que me pegara a él...el escalofrío que recorría mi cuerpo desapareció dejándome con la sensación del calor corporal que me brindaba el cuerpo de él. Mi imagen eran solo siluetas borrosas en ese momento. Él me tomo de la mejilla dándome una caricia y llevándome directamente hacia sus labios...en un parpadear de ojos los suyos envolvían los míos con delicadeza y de repente fui alejándome de él, observándolo al mismo tiempo que lo hacía y lentamente su cara comenzó a dejar de ser solo una simple silueta, lo primero que pude ver de frente fue su mirada, sus ojos color café tenían cierto brillo que los hacía lucir hermosos...instantáneamente cerré y abrí mis ojos, lo primero que vi fue una serie de "fotos" que me invadieron por completo...y...y ahí estaba él...él apareció en cada uno de esos momentos, él estuvo junto a mi en cada uno de ellos. Todo esto me estaba dejando aún más aturdida, por ultimo, apareció claramente él, una imagen de pies a cabeza apareció, era nuestra foto de graduación, la noche en que bailamos está canción y me entregué completamente por primera vez a alguien, fue nuestra noche...la noche que pase a lado de aquel chico...Wes, Wes Hoechlin.