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•Dylan•
A la semana de haber regresado a Chicago y una vez ya bien instalados en la casa de mis padres, un día por la tarde, Jensen se había ido a trabajar, así que le avise a mi madre que iría a hacer unas compras para la despensa de la casa, ella como siempre decidió acompañarme, pero por suerte llegó una vecina que se llevaba muy bien con ella y se pusieron a platicar, así que no le quedó de otra a mi madre que dejarme ir sola por las compras...llevé conmigo a Luke y antes de ir al supermercado, decidí pasar un rato al parque al que solía ir con Wes, quizás ni siquiera lo encontraría porque no sé si siga viviendo aquí, pero no perdía nada con intentarlo.

Llegamos al parque y todo estaba bastante cambiado, nuevos juegos, más espacios, más puestos de comida, todo lucía muy bien. Lleve a Luke al área de niños pequeños la cual tenía unas mini casitas con tubos conectados para que pudieran pasar gateando de una a otra. Mientras Luke estaba jugando rodeado de otros cuantos pequeños, eché un pequeño vistazo a mi alrededor,-"Ja' ilusa...como si fueras a encontrar a Wes".-pensé.

Después de estar una hora ahí, tomé a Luke para irnos, mi madre ha estado muy sobreprotectora y sospecharía que quizás fui a buscarlo por el hecho de ya haberme tardado una hora, haber que excusa creíble le invento. "Podría decirle que Luke se me perdió en el supermercado, después de todo siempre hay una primera vez en que se pierden los bebés ahí. No no Dylan, qué estúpida, eso ni siquiera está creíble".-iba hablando en mi mente conmigo misma sobre el pretexto que le diría a mi madre y más porque aún me faltaba pasar al super por unas cuántas cosas para no llegar con las manos vacías.

-Quizás podamos regresar de nuevo,¿qué te parece amor?.-le dije a Luke mientras íbamos de camino al auto y pasábamos entre varios pequeños que solo iban gritando y que a pesar de sus gritos Luke llevaba una gran sonrisa en la que apenas se lograba ver un pequeño punto blanco en su encía.

En el supermercado mientras Luke y yo estábamos en el área de lácteos y mientras pensaba en que llevar, alguien se acercó la cual hizo que pegara un brinco del susto.

-¡Dylan!...oh por dios, ¡SANTA MADRE REGRESASTE!,¿cómo has estado?...espera dime que te acuerdas de mí.-dijo una mujer con cabello ¿morado? y maquillaje de mariposa...su atuendo me daba un poco de risa pero no la reconocía detrás de todo ese maquillaje.

-Huuum, claro...eres...eeeh...-dije con cierta confusión, extrañada por la emoción con la que me saludó, esperando que dijera su nombre.

-¡Milly!, vamos Dylan,¿ya no te acuerdas de mí?.-dijo ella dándome un golpecito en el brazo.

Tenía bastante tiempo sin verla y me fue difícil reconocerla vestida así...Milly y yo platicamos casi 5 minutos porque llevaba el tiempo contado y tenía que irse, pero quedamos en que este sábado iríamos a tomar algún café cerca del parque.

•Wes•
Los últimos días me la había pasado pensando en que haría, si ir a verla o mejor no...ni siquiera sabía si vivía en la casa de antes, pero esperaba que si.
Tenía miedo que si la visitaba quizás me rechace de nuevo, aunque me gustaría verla para al menos platicar un rato o invitarle un café.

La tarde del sábado pase por Steve a su trabajo...habíamos quedado en ir al parque ya que esta semana se pondrían diferentes puestos y entre ellos vendría el que siempre trae "Funkos" de los que solemos coleccionar...así que saliendo de su trabajo, mientras íbamos platicando camino al parque, nos detuvimos frente a un café para cruzar la calle...al atravesarnos logré escuchar una risa proveniente de aquel café...pero me fue tan familiar que no pude evitar voltear, subí la mirada buscando a algún conocido y...-¡Dylan!.-dije en sorpresa al verla ahí tan perfecta con un lindo vestido como azul y su sonrisa de oreja a oreja.

-¡Imbécil!.-gritó Steve tomándome del brazo y jalándome hacia él de una forma brusca y rápida.-Dios, si que eres un imbécil, por eso nunca te saco pedazo de idiota, casi te aplasta la camioneta,¿qué te pasa viejo?,¿acaso quieres morir?.-decía mientras yo solo escuchaba su voz en un tono leve y veía en mi mente a Dylan, justo como estaba hace unos segundos.

-¡ERA ELLA!...Dylan estaba en el café, mira tienes que ver, mira hacia allá...-le dije, girando su cara de su mentón con mi mano.-¿la ves?...luce perfecta...ella está ahí...

-Pues yo no veo a nadie más que a un hombre alto y con traje...-respondió entrecerrando sus ojos y buscando con más detenimiento.

-Se que era ella...lo sé Steve...la vi.

-Alucinas...mejor después vas a casa de ella a comprobarlo, ahora tenemos que llegar antes de que se lleven mi Funko de Michonne y Carol.-Steve jaloneó mi brazo casi como un niño pequeño con todo y puchero.

Durante 3 horas estuvimos viendo que comprar, etc...después de eso, Steve se fue a su casa y yo a la mía. Él regresaría al hospital para cubrir una guardia que le habían pedido, así que fue poco el tiempo que pudimos tardarnos.

Estando en mi cama, acostado, mirando el techo, no pude dejar de ver la imagen de Dylan...había cortado su largo cabello y aún así se veía aún más hermosa.

Mi madre aún no llegaba a casa y mi hermana se había quedado con la mamá de Matt así que tome un baño y después de el mientras me secaba para vestirme la pijama, no pude dejar de pensar en que no sabía cuánto tiempo se quedaría Dylan...así que sin más, me puse algo cómodo, una sudadera color rojo y unos jeans un poco viejos junto con mis converse, tomé las llaves de mi carro y conduje hasta la casa en la que antes vivía ella con esperanza de que siguiese viviendo ahí o al menos pudieran darme información de ella.

Antes de partir tomé un sobre que tenía guardado hace mucho y lo metí en el bolsillo del pantalón.

Al llegar a casa de Dylan, me estacioné frente a su casa y me quede unos 5 minutos dentro de mi carro tratando de saber que haría o diría.

Tomé fuerza y aire y baje del carro...caminé y ahí me encontraba...frente a su puerta temblando de las manos como si de Parkinson se tratara.

Toqué el timbre y después de unos segundos me encontraba ante un hombre alto, fornido con cabello castaño.

-¿Si?.-preguntó él.

-mmm...se encuentra...¿Dylan?.-cruce los dedos esperando que dijera que ella aún vivía ahí.

-Ah, si...¿de parte de quién?,¿quieres pasar en lo que le llamo a mi esposa?.-hizo señas de que entrara ladeando su cabeza. Pero, después de lo que dijo sentí como un golpe interno, él dijo "esposa". Dylan ya es casada...necesitaba salir de ahí, no sabía si quedarme o salir corriendo. "VAMOS WES PIENSA, DECÍDETE YA IMBÉCIL, QUÉDATE O VETE".

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¡Holaaa!

Les quiero pedir una disculpa por este capítulo tan corto...les prometo que intentaré subir otro este fin de semana.

Estamos llegando al final y quiero darles lo mejor.

All the love, A.💗

-Recuerdos de un amor.-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora