Conectada a ti (Harry Styles y tú)

Capitulo 37

Harry

Nos subimos al coche tras ser tentados varias veces a hacerlo contra aquel muro. Mi madre nos esperaba y no podíamos llegar más tarde de lo que ya llegábamos. Ella odiaba que llegase tarde a algún lugar, aunque fuese para ir a mi propia casa

Tras unos minutos conduciendo por Holmes Chapel, aparqué delante de la casa de mi infancia, la única en la que podía tener calma. Excepto hoy. Supe que mi familia ya había llegado porque había 3 coches más aparcados, a parte de 4 o 5 fans esperándome. Hoy iba a ser un día muy loco. Lo presentía

-Las tienes en todas partes, ¿eh?-dijo _______ refiriéndose a ellas

La verdad es que tenía razón. Allá donde fuese, había fans esperándome. ¿Cómo lo hacían?

-No puedo evitarlo. Me aman-bromeé

Nos bajamos del coche y las chicas se avalanzaron sobre mí para hacerse unas fotos conmigo. Aunque prestaba atención a mis fans, no perdí de vista a _________ que se apartó de ellas y se apoyó en la parte trasera del coche, fijando la vista en la correa de su bolso. ¿Por qué lo hacía? ¿Por qué se apartaba de ellas? Después, recordé lo que dijo:

"No quiero aprovecharme de tu fama por ser Harry Styles, de One Direction. No quiero que piensen que sólo estoy contigo porque eres un famoso cantante"

Pero ahora ella formaba parte de mi vida y era alguien muy importante así que no tenía por qué esconderse ni por qué pensar que se estaba aprovechando de mi fama

-Bueno, chicas, tengo que irme-estiré el brazo y ofrecí mi mano a _______ para que viniera conmigo. Ella la agarró con gusto-Hasta otra

-Adiós-________ también se despidió de ellas educadamente

Saqué las llaves del bolsillo y abrí la puerta con mi llave particular. Iba a llamar pero no quería que alguien de mi familia la agobiara nada más abrir la puerta. Cuando entramos, un gato regordete de color negro y blanco salió a nuestro encuentro

-Hola, Dusty-dije acariciando al gato detrás de las orejas. Éste no paraba de restregarse contra mis piernas mientras ronroneaba

-No sabía que tenías un gato-ella se mantuvo a raya. No sabía si era porque no le gustaban los gatos o por si les tenía miedo

-Lo tengo desde que puedo recordar. Se llama Dusty-lo cogí y lo acuné entre mis brazos-Si quieres acariciarlo, puedes hacerlo. No araña ni nada. Es muy tranquilo

Lo acarició tímidamente en el mismo lado que hice yo y el gato empezó a ronronear en señal de que le gustaba que le rascaran detrás de las orejas. Ella sonrió cuando el gato se estiró en mis brazos

-Tengo que admitir que es un gato muy bonito. Y eso que yo prefiero más los perros

-¿No te gustan los gatos?-lo solté y se fue corriendo hacia el salón

-Claro que me gustan, pero prefiero los perros. Son mucho más juguetones y activos

-En eso no te voy a quitar la razón. Dusty está gordito porque no se mueve apenas. Es un vago

-Como tú-dijo una voz familiar detrás de nosotros-Por eso dicen que las mascotas se parecen a los dueños

El hombre era alto, unos centímetros más alto que yo, de unos 60 años y su pelo y su barba eran de color grisáceo y llevaba unas gafas de pasta modernas de color azules. Era mi tío Ben

Al parecer, mi plan de no encontrarnos a nadie de mi familia hasta que ________ se relajara un poco, no funcionó

-Muy gracioso, tío Ben-nos dimos un fuerte y cariñoso abrazo. Estábamos muy unidos-¿Qué tal estás?