¡Lo Mejor Que Encontré!

¡Fionna!

Fionna Po'v

Despierto pero no siento mi cuerpo, mis ojos siguen cerrados pero es extrañó el que sienta todo y pueda ver y oír.
Me alejo y me veo a mi misma, en una camilla conectada a tubos que me alimentan y dan oxígenos, me quedó en shock.
–Que pasa?... – digo pero solo me puedo oír a mi misma.

Veo como una silueta atraviesa la puerta dejando atrás el umbral, veo a marshall fijamente y el toma asiento al lado de mi cuerpo lo observo.

–Conejita... –Suelta un suspiro y veo como baja una lágrima por sus ojos, luego otra... Hasta convertir sus ojos como un río.– Perdona por no haber llegado a tiempo!, te ves terrible... Me hace recordar como cuando eras pequeñas– limpia sus mejillas pero las lagrimas no paran– de verdad... Lo siento ¡FIONNA!

Se postra al lado de mi cuerpo agarrando mi mano mientras suelta sollozos y gritos de dolor.

–Marshall... ¡Marshall!–Suelto sollozos pero retumban en mi oído solo yo podía oirlo – ¡porque no puedo tocarlo!, quiero abrazarlo... Sentirlo!!

Me siento al lado de el... Llorando solo se que el no me ve, no puede sentir lo que yo estoy viendo.

–Es mi culpa que estés en coma...– abro mis ojos y me levantó tapando mi boca – debí haberte encontrado antes... Te Hirieron, quiero saber... ¡Quien fue para matarlo con mis propias manos!

Recuerdo aquella cabellera, sus ojos, y su relato....

Dolor, una punzada en mi corazón.

–No se...– suspira y se inclina un poco– No se si debería hacerlo, sería algo que quizá no te gustaría. – se acerca mas a mi rostro.

Abro mis ojos, sintiendo un sonrojo y este aparece en mi cuerpo. Marshall lo nota

–Fi?..– dice con esperanzas pero no le contesto, sigo inmóvil –Escuchas... Y puedes sentir... Pero aun no reaccionas – dice y se acerca mas a mi cuerpo.

Y sin decir nada mas une sus labios con los mios, siento en mi, en mi espíritu una fuerte corriente, caigo al suelo aun observando la escena, sin controlarlo mas cierro mis ojos y así estuviera sola, sin que viera mi espíritu, sentía sus labios en los míos, los muevo al compás.

El beso dura un poco... Y se separa para mencionar las últimas palabras antes de salir de la habitación –Me... Has correspondido? – dice en susurro saliendo.

Me quedo observando mi cuerpo nuevamente, una luz aparece en el otro extremo de la habitacion, la miro con asombro y esta me atrae camino hacia ella, y veo como el panel de mis signos vitales se alborota, en el umbral aparecen enfermeras y doctoras, junto con Marshall y Maria

–Cargame adrenalina!– dice el doctor para luego inyectarla por medio sub cutáneo – preparen carga al 20% ¡Ahora!

Siento un piquete en mi pecho, otro mas luego otro... La luz se hace mas débil

–Fionna... No, no... NO TE VAYAS!! – grita de  manera desesperada Marshall

–No vayas a la luz fionna, no vayas... – dice en susurra el doctor mientras da la descarga

Al sentir el ultimo piquete, me aleja totalmente de la luz y perdió el conocimiento de mi persona.