Hermanastros (Luke Hemmings & Tu)

Capitulo 04.

Abrí los ojos irritada al escuchar el despertador. Solo un día ¿no podría ser feliz?

Apagué el despertador y me senté en forma de indio en mí cama. En realidad había dormido como un bebe, pero me hacia falta más.

Salí de la cama y me dirigí al armario, abrí sus puertas de par en par y saque el conjunto qué me pondría en la cama.

Había amanecido de buen humor, «raro» pensé.

Me despoje toda la ropa y me metí lentamente a la ducha. Me deje relajar por la lluvia artificial y así una vez ya que termine salí de la ducha.

Me empecé a cambiar era una blusa blanca olgada, un chort negro y por supuesto las infaltables vans negras.

Me coloque rímel en el contorno de mis ojos marrones y brillo labial.

Ya una vez lista salí de mí habitación. Pero o gran sorpresa que me encontré. Luke salio en el justo momento que yo también.

Le eche una mirada rápida y sin dirigirle la palabra baje las gradas rápidamente hasta salir de casa.

Caminaba con pasos lentos hasta el instituto, mis manos estaban en los bolsillos de el chort a causa de el viento helado, eso solo era en las mañana luego seria un calor como si fuera el infierno.

Ya que vi el instituto enfrente de mí unas ganas de correr de allí se apoderaron de mí, unas tremendas ganas de no entrar a clases aparecieron en mi cabeza. No seria tan malo.

—Parker, entra— ordeno el entrenador viéndome. Uh, bien sabia el entrenador que quería irme de allí.

Bufé y entre con pasos más lentos qué de una tortuga. Las miradas se posaron en mí, como siempre, los detestaba.

Seria por qué, ¿seria la hermananastra de el chico mimado de todo el instituto? ¿Seria por que yo era diferente a el? Bueno, eso siempre decían, pero a mí me valía una mierda.

Llegue a mí correspondiente clase y como era de esperarse ya estaban sentadas las chicas estúpidas de la clase incluyendo a Sarah. Me dio igual, sí se metía conmigo le diría a cada persona de aquí que la encontré follando con Luke.

Divisé un taburete desocupado en la parte trasera de el salón y sin más me deje caer en el. Saque mi iPhone y empecé a jugar a Flappy Bird en realidad ese juego era una mierda, me sacaba de mis casillas pero me encantaba.

—Hola ____— chillo una voz a mí lado. Apreté la mandíbula y apague el iPhone.

—Hola Sarah— chille igual que ella. Ella solo bufo.

—Te tenia una pregunta— sonrió. ¿Y yo qué? ¿Te aviento un grammy? Pensé.

—Rápido no tengo tiempo para tus estupideces— masculle molesta por su presencia.

—¿Te gusto el espectáculo de ayer?— preguntó maliciosa. Unas risitas cuchicheras de escucharon a sus espaldas. A claro sus amigas las perras.

Que asco, ¿quien cuenta sus experiencias sexuales a sus amigas? Ah si la perra de Sarah. Por dios.

—En realidad, no. Pero ¿como lo tomarias sí todo el instituto se entera?— interrogue ahogándome una risita que no tardo en salir. Voltee a verla y oh por dios, muy buena foto seria para tenerla colgada en mí pieza y reírme todo el día.

—Eres una per...

—Chicas, a sus asientos ya— mandó el profesor que acababa de llegar.

Sonreí. Era demasiado infantil que me peleara a cada momento con Sarah pero como ya había dicho la odiaba. Eso no podía cambiar.

La clase se completo toda, unos retrasados y otros que ya se encontraban allí desde hace rato como yo. Eso no significaba que era nerd, o eso nunca.