Capítulo 22. Tú no eres bueno para ella

5.2K 281 53
                                    

Domingo 8 de diciembre de 2013
[Punto de Vista Julia]
Me estiré todo lo larga que era en la cama y bostecé un par de veces. Qué bien sentaba despertarse sin despertador de por medio; es más, qué bien sentaba despertarse según los horarios españoles. Miré el reloj y sonreí: la una y media del mediodía, a esa hora ya debería estar comiendo. Pero estaba en mi casa y los horarios en cuanto a comidas los ponía yo; mi estómago, fundamentalmente. Después de cuarto de hora vagueando en la cama, cotilleando lo habido y por haber en Twitter, decidí darme un ducha larga de agua caliente. Me sentaría bien. Saber que no tenía que hacer nada en todo el día era una sensación maravillosa.
Puse a cocer agua para hacerme unos macarrones y fui directa al sofá, a sentarme de nuevo. Cuando cogí el móvil, Louis me había escrito.
“Si sigues siendo así de vaga, terminaré por dejarte. Lo digo muy en serio ;)”.
Reí. No lo decía en serio.
Era curioso cómo empleaba frases de ese estilo, “terminaré por dejarte”. ¿Dejar el qué? En ningún momento habíamos hablado de estar juntos; es decir, oficialmente juntos. Nunca habíamos hablado de cuánta seriedad había en todo aquello y, de hecho, yo misma había calificado lo que teníamos de no-relación más de una vez. Porque era así, nunca nos habíamos planteado nada en ese sentido. Sin embargo, en muchas ocasiones nos comportábamos como si el otro fuera realmente nuestra pareja. No sólo él, también yo.
Suspiré y eché la cabeza hacia atrás. Louis no sólo me gustaba, era algo más. Había algo en él que hacía que me sintiera de una manera diferente a cómo me había sentido hasta entonces con los chicos. Nunca me había detenido a pensar qué buscaba exactamente en ellos; y ahora, sin quererlo, sin buscarlo, había encontrado lo que quería. Louis era lo que quería.
El mismo pensamiento que hacía dos noches invadía mi cabeza aterrizó de nuevo: ni en mis mejores sueños me había imaginado algo así.
El burbujeo constante de agua llegó hasta mis oídos y di un salto en el sofá. Caminé hasta la cocina con rapidez y en menos de diez segundos los macarrones ya estaban cociendo en la cazuela. Me detuve frente a la encimera y apoyé una mano en ésta, con la vista fija en la nada.
Una semana sin Louis. Era demasiado tiempo.

Miércoles 11 de diciembre de 2013
[Punto de Vista Louis]
España era preciosa, y eso lo sabía incluso aunque en esa ocasión no nos dejaran dar un paso sin treinta guardias de seguridad rodeando a cada uno. Siempre nos había disgustado eso pero teníamos claro que era una batalla perdida; por mucho que protestáramos no íbamos a cambiar nada.
Me asomé por la ventana del hotel, en el centro de Madrid, y sonreí. ¿Me llevaría, algún día, Juls a conocer la ciudad? Saqué el móvil del bolsillo y comencé a teclear.
“Madrid sería mucho más bonito si tuviera a una española a mi lado... :P”.
Llevaba desde el sábado sin verla y se me estaba haciendo eterno. Cuando estaba con los chicos era diferente, no había una mayor distracción, ni una mayor diversión, en todo el planeta tierra. Pero cuando me quedaba solo, y me paraba a pensar... ¿Cómo podía echarle tanto de menos si apenas habíamos pasado tiempo juntos?
La vibración del móvil me sacó de mis pensamientos.
“Te prohíbo taxativamente ligar, eh? Es broma, tonto, disfruta :)”.
Sonreí. ¿Ligar? No quería hacer eso. Ya tenía lo que quería.
“No necesito que me lo prohíbas, no quiero hacerlo :) Tengo ganas de verte.”
Ya quedaba menos. Sólo tres días.

Sábado 14 de diciembre de 2013
[Punto de Vista Sam]
No había visto a Julia en toda la semana. Es verdad que yo no había puesto nada de mi parte para que eso fuera de otra manera, pero quería comprobar cómo se comportaría ella ante mi aparente indiferencia. El resultado dolió tanto como esperaba que doliera. Mi aparente indiferencia se quedaba en nada con su espeluznante impasibilidad. Le daba igual. Simplemente eso.
Sabía que Louis había llegado hacía un par de horas a Londres y probablemente estaría en su casa, descansando. Era una paliza viajar a tres países diferentes en apenas una semana y nunca dejaría de sorprenderme la capacidad de los cinco para afrontar eso. En cualquier caso, en esos momentos no estaba para alabar las virtudes de mi amigo. Lo único que quería era, de una vez por todas, dejar las cosas claras con él.
Esa noche había fiesta, en casa de Zayn, según había contado Louis por el grupo que compartíamos con Emily, Judi y Julia. Como de costumbre, estábamos todos invitados y ninguno dio una negativa. Pero antes de esa fiesta, él y yo nos veríamos.
Arranqué el coche, decidido, y conduje hasta su casa. Si estaba dormido no le quedaba otro remedio que despertarse. No iba a quedarme de brazos cruzados viendo cómo se llevaba a la chica que quería; hasta ahí había llegado mi paciencia. No podía más. Ahora le tocaba a él demostrar si me consideraba un amigo de verdad o si no le importaba lo que pudiera pasar conmigo.
- Hey -me abrió la puerta pasando una de sus manos por su cara, con una evidente cara de cansancio.
- ¿Cómo ha ido? -Pregunté, con seriedad.
- Muy bien, han sido unos días estupendos. Pero claro, ahora no hay quien me mueva del sofá -caminó hasta él, haciendo reales sus palabras, y se tumbó-. No te esperaba -comentó.
- Ya imagino, pero quiero hablar contigo.
No se inmutó. Siguió tumbado, con sus manos por encima de su cabeza y las piernas flexionadas.
- Qué serio estás.
- Es que es un tema serio. Louis, por favor, levántate y vamos a hablar.
Giro la cabeza, aún tumbado, y me miró con el ceño fruncido. Hizo lo que le pedí, se sentó al borde del sofá, colocó los brazos sobre sus rodillas y se inclinó ligeramente hacia alante, mirándome fijamente.
- Tú dirás.

[Punto de Vista Louis]
Sabía qué venía a continuación. Trataba de aparentar normalidad, y calma, pero era consciente de que se avecinaba una tempestad y mi fuero interno estaba prácticamente temblando. Odiaba discutir con cualquiera, máxime Sam, pero tenía claro que si tocaba ciertos temas de la manera en que, sabía, tenía pensado tocarlos, no podría callarme.
- ¿Qué tienes con Julia? -Preguntó, con rudeza.
- Nada -contesté, al instante.
Tragué saliva. Detestaba mentir.
Dejó escapar una risa de incredulidad.
- Exactamente eso es lo que quiero que tengas con ella. Te lo pedí, Louis. Hace ya un mes te pedí que te alejaras de ella, que no pensaras en ella en ese sentido. Me hace gracia lo mucho que me has ignorado.
Sí, él me pidió eso. ¿Qué pasaba con lo que yo podía pedirle a él?
- No te he ignorado, pero no voy a comportarme como un cabrón maleducado y desagradable con ella, que sé que es lo que esperas, sólo porque a ti se te antoje.
Respiré hondo. Eso no llevaba a buen puerto.
- No te pedí eso. Sólo que mantuvieras las distancias. Quiero a Julia, desde que la conocí.
- ¿Y de qué te sirve eso si no eres capaz de decirle nada? ¿Vas a prohibir al mundo entero que esté con ella sólo porque tú la quieres, aunque ni siquiera entre en tus planes intentar algo con ella?
Me recliné contra el sofá, con malos humos. Era un sinsentido todo eso.
- Ese es mi problema. Yo a ti te he pedido otra cosa, y no la estás cumpliendo. ¿Sabes qué? Ya no te lo pido, porque se ve que eso no funciona contigo. Ahora te lo exijo. Te lo prohíbo, Louis. Aléjate de ella.
Reí a carcajadas y me levanté echo una furia.
- ¿¡Me estás prohibiendo algo!? ¿¡Tú a mí!?
Él hizo lo propio.
- ¡Sí, yo a ti! Dices que no quieres ser un cabrón con ella, pero, ¿y qué pasa conmigo? ¿¡Qué pasa con tu amigo de toda la vida!? ¿Conmigo si puedes ser un maldito capullo? -Elevó su tono de voz y bufé.
- ¿¡Te has parado siquiera a pensar si yo siento algo por ella!?
- ¡¡Me importa una mierda eso!!
- ¡¡Pues resulta que a mí no!!
Grité. Grité mucho. Quizá en exceso.
Permanecimos el uno frente al otro, mirándonos. Desafiándonos con la mirada. Habíamos discutido bastantes veces pero probablemente nunca con la tensión con la que lo estábamos haciendo en esos momentos.
- Eres un egoísta, Louis. Un completo egoísta -dijo, más calmado.
- ¿Y tú qué eres, entonces? ¿El hombre más altruista del mundo? -Reí. ¿Me llamaba egoísta a mí? ¿¡Él, que me estaba prohibiendo tener algo con alguien me que importaba? Parecía una broma-. Me dices que no me preocupo por ti, ¿lo haces tú por mí? ¿Te ha importado en algún momento lo que yo pueda sentir por ella?
- Ya te he dicho que no. No me importa en absoluto, porque ella debería estar conmigo.
- ¿¡Y eso quién lo dice!?
Estaba a punto de perder los nervios de nuevo.
- ¡¡Lo digo yo!! Así que ya estás tirando a la basura lo que sea que sientes por ella.
Cerré los ojos. ¿Qué pasaría si le daba un puñetazo y le hacía callar?
¿De verdad era capaz de sostener la teoría de que el más egoísta de los dos era yo?
- ¿Y si ella siente algo por mí?
No pude contener esa frase más tiempo dentro de mí. ¿También la obligaría a ella a deshacerse de sus sentimientos sólo para que el señorito estuviera contento?
Se extendieron unos segundos eternos sin nada más que el silencio a nuestro alrededor. Por primera vez, desde que todo eso había empezado, habíamos hablado con algo de claridad. Dándonos voces, sí, pero poniendo las cartas sobre la mesa.
Avanzó hasta mí con tranquilidad y se detuvo a un par de pasos de donde estaba.
- Aléjate de ella, Louis. Tú no eres bueno para ella.
Fue todo lo que dijo antes de salir de mi casa.
Me quedé clavado en el suelo, con sus palabras resonando en mi cabeza.
¿No era bueno para ella?

__________________________

¡Hola, hola!

¡¡Se corta la tensión!! ¿Qué os parece? Me ha costado bastante escribirlo y no sé si estoy muy contenta con el resultado, pero puede valer.

¿Intrigadas con el próximo capítulo? :P Prometo escribir pronto, mañana como muy tarde. Depende como se de el día, puede incluso que hoy mismo.

Quiero que sepáis que... Hace unos días tuve un sueño algo extraño, con Louis. Y de ahí puede que haya surgido una idea para otra historia... Completamente diferente a esta, eso sí. Es probable que me anime a escribirla cuando tenga tiempo, aunque me da vértigo JAJAJA

¡Nada más! Todo bien, ¿no? :)

Muchos besos para todas preciosas ♥♥♥

@LookAfterYou28

ALIVE | Fan-fic de Louis TomlinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora