Capítulo 3

2.2K 145 39
                                    

Entro en la cocina y saludo a mi tía Agatha. Está cocinando sopa.

Agatha: ¿Qué tal te fue en el instituto?

Sucrette: Muy bien.

Agatha: Ya lo veo, ya... con el bombón con el que has regresado...

Me sonrojo un poco.

Sucrette: Se llama Castiel, hemos quedado a las cinco para jugar a baloncesto.

Agatha: Me alegro de que hayas hecho amigos nuevos. ¿Qué le hecho a la sopa: estrellitas o letras?

Sucrette: Letras, obvio.

Adoraba las letras en la sopa.

Comimos y estuvimos hablando un rato.

Como todavía quedaba una hora para que Castiel viniera a recogerme, fui a mi cuarto para jugar un rato con Armin.

Le mandé un mensaje para avisarle.

Inicié sesión, y comencé a prepararme para empezar la batalla junto a él.

Armin vía móvil: Ahora me conecto, princesa.

A los veinte segundos de leer el mensaje, ArminDragon15 aparece en mi lista de amigos conectados.

Iniciar batalla.

Yo había elegido un dragón de hielo, mientras que el lo había elegido de tierra.

Encendimos los micrófonos para poder oirnos.

Armin vía chat: ¡Hola, Sucrette!

Sucrette vía chat: ¡Hola, Armin!

Armin vía chat: Que ganas tenía de escuchar tu voz...

Sucrette vía chat: No exageres que harás que me ponga roja...

Armin vía chat: Me encantaría ver eso.

Sucrette vía chat: Venga valiente, combate conmigo.

Empezamos a usar nuestras mejores armas mientras que nos reíamos de los errores que cometimos.

Me encantaba estar así con Armin.

Armin vía chat: ¿Hacemos una apuesta?

Sucrette vía chat: ¿Qué quieres apostar?

Armin vía chat: Un beso.

Me quedo boquiabierta ante la pantalla.

Sucrette vía chat: Pero... Armin, nosotros estamos lejos.

Armin vía chat: Lo he estado hablando con mis padres, y me dan permiso para ir a verte. Pero tengo miedo.

Sucrette vía chat: Yo... Armin, todo esto es muy lioso para mí. No puedo ahora mismo, lo siento.

Y cierro el ordenador y apago el micrófono. No quiero ilusionar a nadie, yo no sé lo que siento ahora, mi corazón está partido en tres partes: Ken, Castiel y Armin.

No estaba lista todavía para elegir la parte adecuada.

Decido irme a cambiarme de ropa por una deportiva. Me visto unos pantalones de chandal blancos con una camiseta roja. Como hacía un poco de frío, cogí una chaqueta.

Me calcé unas deportivas rojas y esperé a que Castiel llamara a mi puerta.

Timbre: Ring

Salgo disparada de mi cuarto para abrir la puerta.

Castiel está mirándome fijamente con una sonrisa en los labios, y qué ojos...

Lleva una pelota de baloncesto en su mano, nos quedamos así hasta que mi tía estropea el momento.

Corazón de Melón: A tu lado, por siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora