Aquella tormenta de nieve lo trastornó todo. O no necesariamente lo hizo el fenómeno atmosférico, sino las elecciones de los protagonistas de nuestra historia. Quizá si Susana no decidía echar a Terry del hospital, lo hubiese condenado a él, a Candy y a ella misma a una vida miserable y falta de amor. Si el castaño salía inmediatamente detrás de la rubia pecosa, lo más probable ésta lo hubiese rechazado sin contemplaciones, dada su obstinación. Y de no ser por haber enfermado habría salido del hotel para tomar el tren de regreso a Chicago. ¡Ahhh! Pero las condiciones climáticas se lo iban a impedir. Todo ocurrió en el momento preciso y las piezas del rompecabezas encajaron en su lugar.
Susana y su madre volvieron a California con el resto de su familia. Se dedicó en cuerpo y alma a su rehabilitación. Aprendió a usar una prótesis y gracias a esto pudo llevar una vida normal. No volvió a los escenarios, pero se hizo de una brillante carrera como dramaturga. Años después escribió varios guiones para la naciente industria cinematográfica con mucho éxito, donde también conoció el verdadero amor de su vida, aunque siempre guardó un cariño especial por Terry.
Semanas después de la mudanza de Candy, Albert viajó a Nueva York para revelarle su identidad y que había recuperado su memoria, antes de que se presentara públicamente como cabeza de los Andley. La rubia se desconcertó un poco, pero siguió atando cabos sueltos y comprendió muchas cosas. Fue por órdenes suyas que George habló con el Dr. Lenard para que la dejara ir antes de tiempo. Más que padre adoptivo e hija, tuvieron una relación de hermanos.
La Nochebuena del año siguiente, Candy y Terry celebraron su boda en la mansión de Lakewood en una emotiva ceremonia, rodeados de sus familiares y amigos.
Actualmente la rubia trabaja como enfermera quirúrgica en el Hospital Monte Sinaí de Nueva York. Terry continúa cosechando triunfos como actor, convirtiéndose en uno de los más aclamados de Broadway. Dejó Stratford para fundar otra compañía junto a su madre. Graham & Baker ha puesto en escena tanto obras clásicas como contemporáneas de diversos géneros, que van desde tragedias hasta comedias, con mucho éxito en cada temporada. También pudo mantener una relación cordial con el Duque, pese a que abdicó a su título. Esa vida no era idónea para nuestro eterno rebelde, quien prefirió las tablas a un puesto en la Cámara de los Lores.
El amor de Candy y Terry aumenta con el paso del tiempo. Y recuerdan con cariño y nostalgia aquella agridulce noche de tormenta de nieve, donde hubo lágrimas y separación, pero también vio la esperanza de un nuevo amanecer. El amor todo lo puede y ellos son la prueba viviente de ello.
Fin...
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Gracias por leerme. Espero que les haya gustado este minific. Lo escribí únicamente con fines de entretenimiento. Candy Candy y sus personajes pertenecen a Kyoko Mizuki.Att.
lisari84
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Tormenta de nieve (Minific)
FanfictionTras haberse separado en aquellas escaleras del hospital, Candy decide volver a Chicago. ¿Podrán una serie de eventos y decisiones cambiar el destino de ella y Terry?