Amor equivocado [Puppica]

CAPITULO 10

La albina había quedado "sola" en esa cueva, esta saco de su pantalon una especie de vara metalica.

-... Venga... Se q estas ahi- dijo chocando la vara con el piso.

De las sombras salio un enorme hocico, la albina trago grueso, pese a q decia no tener miedo, esta estaba helada del miedo, esa especie de lobos nunca las habia visto.

Un gruñido se oyó dentro de la cueva alertando a la albina.

-Sal de una vez- Dijo con voz temblorosa.

Por más que intentará que saliera de la cueva no podía, aquella vestía se negaba a salir.

-No hagas las cosas más difíciles de lo que ya son... Sal- Dijo nerviosa

La albina apretó aquella vara, esta estaba nerviosa, pero no podía demostrarlo.

-...sal sucia bestia... ¡acabare contigo!- grito la albina acercandose.

Se escucho un muy fuerte gruñido el cual avisaba q la bestia iba a atacar.

-¡VENGA!- grito la albina.

En un rapido movimiento esta fue estampada contra el piso por la cola de aquella bestia enorme, esta volteo a mirar y vio un gran ojo el cual era casi de su tamaño, la albina se lleno de impotencia a la vez q miedo, esa cosa era enorme

Con un poco de dolor se paró volviendo a su posición de ataque.

-¡Sal de una vez maldita sea!- Grito la albina.

Sus manos temblaban a la vez que frías, el temor la consumía pero trataba de no hacerlo notar ante la bestia la cual solo gruñía.

La bestia cerro su ojo, esta soltó un gruñido, la albina empuño sus manos, la bestia abrió sus ojos y de un manotazo saco a la albina de aquella cueva, la albina se estrello contra un árbol.

-ahg...- esta se toco la frente y noto la gran cantidad de sangre. -mierda...-

La bestia empezo a gruñir, esta saco una pata y se levanto rompiendo gran parte de aquella pequeña cueva, dejando ver su gran tamaño, la albina era un punto comparado con el tamaño de esa cosa

-Creo que era mejor que no salieras- Dijo la albina nerviosa.

La gran bestia con su gran pata quiso atacar a la albina pero esta con un movimiento rápido lo es esquivo.

-Eso estuvo cerca- Se dijo al ver un poco de su ropa rasgada.

La bestia volvió a gruñir, la albina se paró y comenzó a correr, necesitaba distraerlo para poder atacar.

La albina seguía corriendo, la bestia soltó un gran gruñido para después derribar todos los arboles de la zona.

-¡ahg!- la albina se estrello contra un arbol.

Todos los alumnos escucharon tal estruendo y se asustaron.

-¿Que esta pasando?- pregunto nervioso un castaño.

-... La bestia q el profesor enfrenta....- dijo el rubio mirando los arboles.

-Puppet...- la rubia estaba muy preocupada

-Mierda...- Dijo la albina al ver que su pie estaba atorado entre dos árboles derribados.

La bestia poco a poco se acerba a ella, alentándola más, necesitaba salir de ahí o seria su fin.

-Vamos...- Dijo haciendo fuerza pero por más que lo intentara era imposible.

La albina se quedo viendo a aquella bestia, esta debía hacer algo y rapido.