Amor equivocado [Puppica]

CAPITULO 33

-... No quiero que te vayas... Yo quiero estar contigo... Con nuestro bebe...- dijo la rubia con un hilo de voz.

-... Calma mi amor... Calma- esta empezó a correr.

-... Quedate...- susurro la menor cerrando los ojos.

-Solo... Descansa- Dijo la albina.

La rubia se quedo mirando a la albina con la vista borrosa, señal de que su cuerpo iba a caer rendido en cualquier momento, y así fue, simplemente la rubia cayo inconsciente.

La albina seguía corriendo, esta debía llegar a un hospital, esta paro en seco, ahora tenia la duda, ir al hospital o ir al instituto.

-mierda... Si voy al hospital podrian descubrir a mi hijo... Pero no se si el instituto este dispuesto...-

La albina miro a todos lados nerviosa, necesitaba llegar a un lugar de inmediato.

Decidida corrió en dirección contraria al hospital, se estaba arriesgando a ir al instituto pero debía correr ese riesgo.

La albina corría con toda la velocidad que tenia, esta no iba a dejar que su bebe y su amada pasaran a peores.

-¡Tranquila!- grito mientras corría.

La albina solo tenía en mente llegar al instituto, tenia miedo de que le pase algo a la persona que mas amaba en este mundo. Sus piernas dolían de correr demasiado pero lo soportaba.

Esta se alivio un poco al ver el instituto cerca, estaba a punto de llegar.

La albina acelero el paso, con todas sus fuerzas logro llegar al instituto, esta entro de golpe, todo estaba abandonado y ceirtamente destrozado.

-...Justo...como la dejamos...- susurro la albina para luego dirigirse a la enfermeria. -¡Debo llegar!- grito esta mientras corria.

-Puppet...- La rubia susurro el nombre de esta haciendo que la mirara preocupada.

-Aguanta... Ya casi llegamos- Dijo la albina con su respiración agitada

La rubia solamente permanecia quieta, la pequeña rubia no tenia fuerza alguna, ni siquiera para respirar.

-Tranquila...- susurro la albina la cual ya habia llegado a la enfermeria. -¡Necesito ayuda!- grito entrando de golpe, esta dejo a la rubia en la camilla.

-¿Puppet?- se oyo una voz.

-¡Usagi!- grito la albina acercandose, esta la tomo de los hombros y la sacudio. -¡Ayudala por favor!- grito esta

-Tranquila Tranquila- Dijo la peliazul extrañada.

-¡No puedo estar tranquila!- Grito preocupada.

-Sueltame y dime que pasa-

-Esta mal- Dijo para luego jalarla de un brazo y llevarla junto a la rubia.

-¡Puppet!- la peliazul se solto, pues la albina la habia lastimado.

-Lo siento... ¡Pero ayudame!- grito esta desesperada.

-¿Que sucede exactamente? Dime la situacion y los riesgos- dijo la ojiverde mirandola.

-Bien, mi novia esta herida, tiene una cria en su vientre y ella esta grave, ahora... ¡Ayudala!- grito

-¿Cría? ¿Como fue posible eso?-

-No es hora para que preguntes ¡Ayudala por favor!-

-De acuerdo, no te exaltes- La peliazul se acerco a la rubia y comenzó a revisarla mientras la albina observaba preocupada