Caos Perfecto (#SDA2017)

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Mi vida perfecta, mi familia inigualable, mi nido de amor, se había visto destruido en un segundo, todo pasó demasiado rápido, bastó un día para que todo se derrumbara, tuve que ver como todo caía en mil pedazos, mi felicidad se esfumó cuando vi a los agentes de policía a la entrada de mi habitación, tenían a Evans y ahora iban por mi, por segunda vez en mi vida me pusieron unas esposas, pero esta vez era él quien iba a mi lado, cuando salimos de la habitación me di cuenta de que también tenían a Ryan y a Rosana, y que las niñas las tenía un Instituto de infancia y adolescencia, ¿en qué momento lograron encontrarnos? Todo parecía marchar tan bien, todo era simplemente hermoso, disfrutábamos cada día juntos, como una familia, ahora todos estaríamos detrás de unas rejas esperando mucho tiempo por un veredicto, mientras que las pequeñas estarían en un lugar de paso, sin sus padres, sin mi, en ese momento quise retroceder el tiempo, hubiera preferido mil veces estar yo en la prisión que ver como una familia tan sólida y hermosa se destruía por mi culpa, ahora no sólo sería una persona en prisión, serían cuatro personas, nunca debí de haberle hecho casi a Evans, debí quedarme en la cárcel, tal vez me hubieran dado algún beneficio por buena conducta, ahora todos deberíamos pagar.

El viaje fue inmensamente largo, cuando llegamos a la prisión, inmediatamente nos dividieron, Rossana y yo fuimos enviadas a una parte de la cárcel, mientras que Evans y Ryan se iban a otra, en ese momento me sentí tan débil, tan impotente, estaba viendo como alejaban a la persona que amaba, y no podía hacer absolutamente nada, mientras que Rossana no paraba de llorar, yo me hacía la fuerte, debía serlo por ella, debía apoyarla en esta separación temporal con Ryan, y consolarla para que el encierro no afectará su salud.

Aproximadamente una hora después de habernos instalado en las celdas, vinieron por nosotras, inmediatamente hoy se daría el veredicto, hoy castigarian mi conducta y la de las personas cómplices de ella, tome a Ross de la mano, aún con las esposas, le quise brindar mi apoyo, quise decirle que todo estaría bien, aunque en el fondo ni yo misma me creía esas palabras, lo único que quedaba era esperar.

Llegamos al tribunal, allí se daría el juicio final, allí sabría cuantos años me perdería de los beneficios de la vida, de la libertad, me perdería de lo bello que era tener una familia de verdad, de tener un motivo por el cual luchar cada día, de ver la luz del sol y saber que tienes a unas personas esperando con ansias que te levantes, eso es algo que en una cárcel no se puede vivir; se que Evans se culpará nuevamente por todo, pero no lo permitiré, el debía luchar por todos, él haría más que yo estando fuera, el podría salir adelante y ser feliz, mientras que yo sin él no encontraría un motivo por el cual levantarme cada día, me hundiría en una depresión profunda, no hallaria consuelo en nadie y me sumiría en mis propios pensamientos hasta terminar como muchas de las personas que traté durante mis años profesionales.

Allí estaban todos, pero no nos dejaron acercarnos a ellos, y las niñas ya no se encontraban hay, no podía dejar de pensar en ellas, pero se que ellos pronto saldrán y cuidaran de ella como siempre lo han hecho, en quince minutos empezaría el juicio, las manos me sudaban, las piernas me temblaban, sentía que me faltaba el aliento, debía ser fuerte, siempre lo he sido por los demás.