Al día siguiente llegue a la sala junto con Rebecca. -No es mala idea llegar temprano -dije mientras caminábamos hasta llegar a nuestros bancos. -No. Dejamos la mochila en nuestros bancos y al mirar la pizarra vi escrito en letras rojas "Cuida al retrasado de tu hermano, dale las pastillas". Quede mirando esa oración y sentí aguarse mis ojos, Rebecca me quedó mirando. -¿Quién hizo eso? -dije sin sacar los ojos de la pizarra. -No importa Andrea -dijo Rebecca borrando la pizarra. -¿Cómo que no importa? Ahora todos se van a enterar que tengo un hermano enfermo -dije mientras comenzaba a sollozar. Rebecca comenzó a borrar la pizarra mientras yo no dejaba de mirar las palabras que iban quedando, me di la media vuelta y salí de la sala lo más rápido que pude, tenía mucha rabia ¿Cómo se habían enterado? -Andrea -Me llamó la profesora Sherly. La quedé mirando y me levanté de mi asiento y fui hacia ella. -¿Qué pasa profesora? -dije mirándola. -Andrea hacia un tiempo que quería hablar contigo, estas bajando mucho tus notas ¿Qué pasa? -Tengo problemas -dije bajando la mirada. -¿Qué problemas? La quede mirando y suspire -yo traigo mis cosas, hago mis tareas, pero al momento de presentarlas no están, me las sacan, no sé dónde quedan. -¿Así por arte de magia? -No. -Mira Andrea aquí lo que más me preocupa es que tú tienes una beca y esa beca tienes que conservarla, la alumna que no tiene buenas notas pierde la beca. -Sí. -Entonces tú vas a tener que solucionar el problema, mira las notas que tienes -dijo apuntando el libro de clases- haz bajado demasiado, ya así que ojo con eso y a ponerse las pilas a tratar de solucionar eso, todo se puede conversar pero tú eres la principal involucrada en esto y tienes que subir las notas si o si ¿Estamos? -Sí -dije asintiendo y volviendo a mi mesa.
Iba saliendo del liceo y vi a Miranda y Ginger apoyadas en una pared, iba pasando por allí. -Mándale un saludo a tu hermano "galla" -dijo Miranda. -Retrasado -dijo Ginger mientras que las dos soltaban una risa sonora. -No le digan así -dije defendiéndolo. -¿Y por qué no si es enfermo? -dijo Ginger. -Porque no tienen derecho de tratar así a las personas. -Y tú tampoco deberías estar aquí ¡ósea! -Se rieron las dos- Éste no es como tú mundo. -Déjenlo tranquilo, si quieren moléstenme a mí pero no a el -dije elevando un poco más la voz. -Pero si podemos molestar a quien queramos, tenemos el poder sobre todo ¿O no? -No. -Más sobre ti -dijo Miranda haciendo que las dos se rieran nuevamente. -¡Ya déjenlo! ¡Dejen de molestarlo! -¿Nos vas a gritar a nosotras? ¿Nos vas a hablar así a nosotras? -Dijo Ginger acercándose a mí. -Sí -dije dudando mentalmente de lo que había dicho, un miedo me recorría. -Sabes muy bien que tenemos más fuerza que tú. -Dijo empujándome. -Ya, déjame. -Sabes muy bien que tenemos poder sobre ti. -¡Ya déjame! ¡Tengo que ir a ver a mi hermano! Ella seguía empujándome. -Ya, ve a ver al retrasado -dijo empujándome mucho más allá. Seguí caminando mientras escuche el último grito proveniente de Miranda y después sus risas burlescas -¡Pobretona! Escrito por: Pepa-shy.