La Misión

Heridas

CAPITULO 8

Dolía demasiado, el dolor era insoportable, podía sentir como escurría la sangre de sus brazos y piernas, sentía como lentamente se abrían sus heridas, sentía como se partían sus costillas, sentía como cada uno de los vidrios se enterraba en la profundidad de su carne. Las lágrimas caían a mares de sus ojos y antes de desmayarse su último pensamiento fue…

-"Sasuke…por favor sálvame"…- eso y la puerta abriéndose de un fuerte portazo fue lo último que pudo recordar, antes de caer completamente sumido en la inconsciencia.

[...]

Sasuke mientras adecuaba su casa, sentía que el mal presentimiento que tenía, se hacía más y más grande a cada segundo que pasaba, tenía una gran angustia porque sentía que alguien importante para el corría grave peligro. Con diligencia, se apresuró a ultimar los últimos detalles de las labores de su hogar y rápidamente procedió a ir al hospital.

Dicen que las malas noticias son las primeras en llegar, pues nada más al haber recorrido un corto trecho fuera de su residencia, un muy agitado Kakashi le pregunto.

–¿sabes algo de Naruto?– pregunto con una mueca de preocupación y angustia en su rostro.

–Como habría de saber algo de él cuándo se está recuperando en el hospital– contesto extrañado, ese mal presentimiento que tenía cuando estaba en su hogar aumento súbitamente al ser cuestionado sobre aquello.

–pues ese es el problema… nadie sabe dónde se encuentra Naruto– respondió con angustia e incertidumbre.

Solo esas palabras bastaron para que Sasuke iniciara a correr como un loco directo al hospital, esa noticia había sido como una cubeta de agua helada cayéndole encima. No… Naruto no podía atreverse a intentar cometer de nuevo la misma estupidez. Algo en el fondo de su corazón le decía que no podía haber sido Naruto, que había alguien más detrás de esto.

Kakashi, por su parte preocupado y angustiado, seguía a su alumno. Sabia de los sentimientos que este tenía por Naruto y temía que esta historia tuviera un trágico desenlace, pues conocía el pasado de Sasuke y sabía que si Naruto faltaba, quizás podría perder también a su otro alumno. También temía por Naruto, pero algo le decía que él había desaparecido por razones diferentes a las que todo el mundo suponía.

Después de recorrer todo el largo trecho que separaba a la residencia de Sasuke del hospital, tanto Kakashi como Sasuke pudieron presenciar la escena del delito, la cama destendida y llena de pequeñas gotas de sangre, las cuales también cubrían parte del piso, los restos de los yesos que estaban en sus piernas y una camino de pequeños hilos de sangre que conducía hasta la ventana y terminaba allí.

Sin perder el tiempo, Kakashi realizo unos sellos e invoco a su perro ninja, Pakkun, para que oliese el rastro y lo siguiese. Kakashi y Sasuke, sin esperar ni un momento, salieron detrás de Pakkun siguiendo su rastro. Sasuke a cada segundo que pasaba sentía la angustia crecer en su interior, algo le decía que si se tardaba más, sería algo que lamentaría profundamente.

Cuando ya habían recorrido un buen trecho, un cazador ANBU los intercepto, pidiendo hablar con Kakashi. Este con la mirada le indico que se adelantara mientras el escuchaba lo que sea que ese tipo tenía que informarle.

Sasuke, por su parte continuo con la ruta que la invocación de Kakashi le indicaba. Cuando estuvo cerca de la casa de Naruto dejo de seguirlo y adelantándose, se dirigió rápidamente al departamento de Naruto.

Al llegar, un grito desgarrador llego a sus oídos y con el alma en vilo, se apresuró a llegar al hogar de su amado. Cuando estuvo frente a la puerta, sin ningún miramiento le dio una patada y la mando a volar, encontrándose adentro una escena que jamás espero contemplar...