Marizza: Pasa que… papá y yo, tenemos que salir, va a ser solo un momento
Cindy: Dónde? Yo puedo ir?
Pablo: No princesita, te prometemos que volvemos luego, sí? – Cada uno le dio un beso en la mejilla, y luego de dejarla con la mamá de Manu se fueron –
Marizza: No puede ser…
Pablo: Yo creo que es cierto, o si no cómo nos envió el mensaje? De todas formas vamos averiguar
Marizza: Pablo tengo miedo, ese loco se escapó, anda suelto por ahí, te das cuenta?
Pablo: No voy a dejar que pase nada, de verdad, Javier no va a volver a hacernos daño, y por eso vamos a ir a la policía a ver si es cierto… - Marizza se aferró fuerte a Pablo mientras caminaban y en eso alguien los intercepta por atrás –
*******: Acá están – Ellos se giraron asustados, Marizza miró alrededor y desgraciadamente no había nadie más que ellos 3 en esa calle solitaria –
Pablo: Javier?
Marizza: QUÉ HACÉS ACÁ BASURAAAA?? – Se quiso ir sobre él pero Pablo la detuvo –
Pablo: Quedate tranquila, de este me encargo yo – Fue y lo agarró del cuello de la camisa –. QUÉ QUERÉS DE NOSOTROS? ESTA VEZ NO VOY A DEJAR QUE NOS VUELVAS A JODER LA VIDA, ME ENTENDISTE?? AHORA MISMO LLAMO A LA POLICÍA PARA DECIRLE QUE ENCONTRAMOS AL PROFUGO – Javier empezó a reírse –
Javier: Y cómo creés que me escapé Pablito? Solo no lo hice
Pablo: No puedo creerlo... – Lo miró con odio y empezó a pegarle fuertemente, Javier también le pegaba y Marizza no sabía cómo separarlos, si seguían así las cosas podían acabar muy mal –
Marizza: SOLTALO IDIOTA!! SOLTALO!! – Cuando Javier pudo zafar de los golpes de Pablo se metió la mano al bolsillo y sacó una pistola, apuntando a ambos, y en la primera oportunidad agarró a Marizza y se la apuntó en la cabeza –
Pablo: Qué pensás hacer? No hagás nada, a ella no – Se iba a acercar pero las palabras de Javier lo detuvieron en seco –
Javier: Un paso más y tu Marizza… era
Pablo: DEJALA A ELLA, ES A MÍ A QUIEN QUERÉS!!
Marizza: No Pablo, no hagas nada por favor, no quiero que te lastime
Javier: CALLATE!! – Abrió el gatillo –
Pablo: - No hiso caso a lo que dijo Marizza – NO HAGAS NADA!! LLEVAME A MI, HACÉ LO QUE SEA CONMIGO, PERO A ELLA DEJALA EN PAZ!!
Javier: NO!! Vos quedate quieto, si no querés presenciar su muerte – Empezó a caminar en otra dirección con la pistola en la mano apuntando a Marizza –. Yo me voy… adiós Pablo, y no se te ocurra seguirme ni llamar a nadie porque cuando me entere la fusilo
Marizza: Pablo hacé caso, cuidá de Cindy, yo veré como zafo – Javier se fue, Pablo se tiró al suelo desesperado, se sentía como una basura, no pudo hacer nada para evitar que se fuera con ella –
Pablo: NOOOOOOOOOOOO!! MARIZZA!! – Cuando reaccionó algo empezó a caminar hacia la dirección en donde se había ido Javier pero lo había perdido completamente de vista, era como si se lo hubiese tragado la tierra –
Pablo hiso lo posible por ubicarla en México durante días pero no la podía encontrar, pensó en avisarle a la policía, pero se arrepintió enseguida, tenía miedo que Javier se enterara y le hiciera algo, encima Cindy no paraba de preguntar por su mamá, y Pablo ya no sabía que excusas darle, en las noticias ya estaba empezando a salir la noticia de que la cantante Marizza Andrade había desaparecido. Pablo estaba arreglando todo para regresar a Buenos Aires, allá podía avisarle a la policía, no creía que Javier allá los tuviera comprados como los de acá, pero no se iba a rendir nunca hasta volverla a tener. Al regresar ya todos sabían que había desaparecido por las noticias, pero no sabían nada con detalles, en cuanto llegaron a lo de Sonia, Pablo le indicó a su hija – que cada día estaba más triste, no quería ni comer – que subiera, ella lo hiso, y Sonia con él se abrazaron –
Sonia: - Luego de un rato abrazados se soltaron y ella se secó las lágrimas – Qué pasó Pablito? Dónde está mi cielo? CÓMO QUE DESAPARECIÓ?
Pablo: - Lloraba más – Perdoname Sonia, perdoname, fue mi culpa, no pude hacer nada, ese imbécil se la llevó…
Sonia: Qué?
Pablo: Eso, que con Marizza nos llegó un mensaje de Javier, nos dijo que se había escapado de la cárcel, cuando íbamos averiguar se nos cruzó en el camino, por mala suerte era una calle solitaria, no había absolutamente nadie… y se llevó a Marizza, apuntándola con una arma, yo no pude hacer nada, NADA!! ES MI CULPA, YO LE DIJE QUE ME ACOMPAÑARA, YO NO LA CUIDE!!
Sonia: - Lloraba otra vez y lo abrazó – No es tu culpa Pablo, no es tu culpa, vos hiciste lo que pudiste… mi ciela… dónde estará mi ciela en este momento?
