Se había confirmado que Javier había muerto… y estaban todos felices porque ahora podrían estar tranquilos, los días siguientes y los meses pasaron llenos de felicidad y amor para la familia Bustamante Andrade… no hacían más que disfrutar a cada momento, acompañaban a Marizza en sus giras, ya que estaba retomando su carrera. Al volver Pablo le tenía una sorpresa, que organizó junto con Cindy… estaban llegando a una casa, Marizza tenía los ojos vendados, y Benja en los brazos de Pablo
Marizza: Qué es esto Pablo? Puedo abrir los ojos?
Pablo: No… aún no – Caminaron un poco más –. Ahora sí – Marizza se quitó las vendas y se quedó mirando sorprendida la casa –
Marizza: Y esto?
Pablo: Te presento nuestra nueva casa. Te gusta?
Marizza: Me encanta – La recorrió completa, era inmensa –. Te amo – Beso –
Pablo: Lo sabía, por eso escogí precisamente esta… - Beso – la escogí con Cindy
Más tarde fueron a lo de Sonia, en donde estaban todos reunidos, Mia y Manuel con su beba, Pilar y Tomás con su hijo, Marcos y Luján, Guido y Laura…
Sonia: Ay ciela, dónde estaban? Estamos todos acá, y ustedes no llegaban nunca
Marizza: - Miró a Pablo feliz y con una sonrisa de enamorada – Estábamos conociendo nuestra nueva a casa…
Sonia: ENSERIO? – La abrazó fuertemente – Ay ciela, te voy a extrañar tanto…
Marizza: Bueno ma, no exageres, hablás como si me fuera a ir a China – Se soltó –
Sonia: - Miró a Pablo – Espero que la cuides, que los cuides, porque o sino…
Marizza: MAMÁ!! No te preocupes, Pablo no va hacer nada, y si es que llegara a hacer algo, no es necesario que te metas, sí? Yo misma me encargo de romperle la cara – Lo miró con una pequeña sonrisa y luego le dio un piquito –. Bueno ma… nosotros no sabíamos que estaban todos, nada más vinimos a encargarte un rato los nenes, nosotros tenemos que terminar de arreglar la casa… y con Benja que es un bebé es un poco incomodo, y Cindy…
Sonia: No importa ciela, yo los voy a cuidar muy bien, sí? Vayan tranquilos – Pablo y Marizza se despidieron de los chicos y luego se fueron a su nueva casa –
Pablo: Qué es eso de “terminar de arreglar la casa”? – Dijo tomándola de la cintura y acercándola mucho a él – Yo la veo perfectamente arreglada
Marizza: Bueno, era una pequeña mentirita… - Beso – no creo que le haga mal a nadie, no?
Pablo: Creo que no – Beso, y más besos, subieron a su cuarto e hicieron el amor. Al terminar Marizza estaba sobre el pecho de Pablo, pero algo seria, este se extrañó y le acarició el cabello –
Pablo: Pasa algo mi amor?
Marizza: No… nada, es solo que… no sé, nosotros estamos acá, nuestros hijos allá… con todo lo que perdimos con ellos… me siento un poco mal… me siento una mala madre –
Pablo: No digas eso, sos la mejor madre que hay, te lo aseguro… ahora, soy yo el que me siento mal con Benja…
Marizza: Por qué?
Pablo: Fue tu segundo embarazo, y tampoco pude ser testigo de él… Bueno aunque puede llegar el tercero…
Marizza: Ah, sí? – Se besaron y volvieron a hacer el amor. Más tarde fueron a buscar a sus hijos a lo de Sonia, estuvieron un rato y ahí y luego volvieron a su hogar, estaban felices, Cindy estaba feliz, y a ellos les encantaba y ese nuevo ambiente que se respiraba –
Al día siguiente, Marizza iba por la calle, cuando un montón de fans se le van encima, había firmado bastante autógrafos, pero luego de un rato se estaba cansando un poco, y alguien la tomó de la mano y la llevó hasta una calle más vacía
Marizza: Gracias… – hasta ese momento no le había visto la cara, pero cuando subió su rostro lo vio – Jesús, no pensé que eras vos… gracias otra vez
Jesús: De nada, y contame, qué tal? Hace mucho que no nos veíamos
Marizza: Sí, bastante, nada yo… - Él no la dejó terminar, ya que la calló con un beso, como la tomó desprevenida Marizza se quedó totalmente quieta, en eso Pablo, que recién venía de comprar los anillos para pedirle que se case con él, iba pasando por ahí y los vio, se le cayeron los anillos de la mano –
Pablo: MARIZZA!! – Ella empujó a Jesús inmediatamente y le pegó una cachetada –
Marizza: Mi amor… - Dijo acercándose a Pablo –
