Lo primero qe sentí fue una punzada en el costado. Me llevé una mano allí donde provenía el dolor y noté una tela qe cubría esa zona. ¿Qué había pasado? o más bien ¿qué me había pasado? No entendía nada. Mis ojos se abrieron con dificultad. Tenía el cuerpo entumecido por culpa de la cama más dura en la que nunca había dormido. La habitación estaba poco iluminada, no tenia vantanas y solo entraba un rayo de luz lebe, probablemente de una vela, ya que temblaba un poco.
Intente incorporarme pero gemí enseguida por el dolor del costado, y tuve qe volver a tumbarme.
Oí voces de la sala contigua y por el rabillo del ojo vi como se abría la puerta. Luego fingí dormir.
-Aún no está despierta - decía alguien. Tenía la voz grave, demasiado grave para pertenecer a una mujer.
Oh dios, ¿dónde estaba? ¿Qué demonios era todo esto? Mis manos empezaron a sudar y mi corazón palpitaba cada vez más rápido y ese fue uno de los pocos momentos en que me puse nerviosa. Un escalofrío recortió mi columna.
-La oí moverse, tiene que estar despierta - decía otra voz igual de grave que la otra, aunque un poco más suave.
Las dos ¿qué? me estuvieron mirando durante un buen rato, aunque sinceramente creo que solo fueron segundos, aunque se hicieron eternos. Quería abrir los ojos pero a la vez no quería, ya que temía lo que podría ver si lo hiciese.
-¿Le miraste la herida? - preguntó el primero.
-Mierda, no -escuché el segundo.
Tocó mi costado con cuidado y un hormigueo se instaló en ese punto. No sabía de quien eran las manos, pero por lo que pude notar sus dedos eran largos y gruesos. Una mujer no tenía ese tipo de manos, entonces ¿a qué pertenecían? La curiosidad me mataba.
-Creo que ya no sale sangre, solo fue un rasguño - dijo el primero, supongo que eran de (¿ella?) las manos.
¿Rasguño? Por el amor de diós, ¿qué me había pasado? Se suponía que me iba a levantar en mi nueva cama, suave, cómoda... Esto no era la habitación donde tendría que haberme levantado, sin rasguños ni seres con voz grave y manos grades.
Me removí un poco en la cama. Lo siento, tenía curiosidad, ya no se trataba de miedo o nervios; quería saber, ¡quería respuestas!
Madre mía, esto no podía ser verdad. A lo mejor estaba soñado. Sí, eso mismo, estaba soñando. Cerré los ojos a un más fuerte e intente suspirar lo más silenciosamente posible. Seguro que dentro de unos minutos me levantaría en mi nueva residencia.
Las voces volvían otra vez.
-Pásame la botella idiota - gritaba alguien, su voz tampoco podía pertenecer a una chica. Entonces ¿a qué? Coño ¡¿a qué?!
-Tú eres el idiota, vas a despertarla - dijo alguien más - Toma la maldita botella, borracho.
¿Borracho? ¿Acaso ahora nos dejaban beber? Se suponía que las fiestas no estaban permitidas a no ser que fuesen de la residencia, y ni aún así nos dejaban beber. Nuestros cuerpos no podían ser dañados con cosas estúpidas como el alcohol, el tabaco, las drogas... Además, ¿quién conseguía acceso a todo eso? Las única drogas que nos daban eran unas pastillas diminutas cuando estábamos enfermas.
Volví a intentar incorporarme, estaba vez ya no me dolió tanto la herida que supuestamente me había echo. No me pregunteis cuando ni dónde porque ni yo misma lo sabía.
Me puse de pie lo más silenciosamente que pude, y con sigilio caminé hasta la puerta.
Lo que vi fue algo tan... ni siquiera supe describirlo, pero el echo es que provocó que me desmayara al instante.
¿Qué era?
Ni idea.
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Hola , hola! Aqui tienen el segundo capítulo!! WII
Lo escribi ayer por la noche para asi por la mañana subirlo jejeje Se que son un poco cortitos pero la historia no cambiará asi que.. xD
¿Les gusta?
Saludos a tod@s ♥
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The Foreign
Romance> 'Hablaban de machismo en épocas anteriores, era hora que las mujeres se pusieran al mando'