Bandido [DongHwi]

Capítulo VIII

Capítulo VIII

-El profesor debe estar esperándonos... -Susurró DaeHwi.

-Que espere entonces...

Las caderas de DongHo embestían el cuerpo de DaeHwi con fuerza. Estaba a punto de llegar al orgasmo y sabía que el chico también lo estaba, no iba a detenerse en ese momento por un profesor que sabía ni se habría percatado de su larga ausencia.

Los habían mandado a guardar y ordenar las cosas de la clase de deportes a la bodega, pero ambos sabían que lo que menos harían sería ordenar el lugar.

En el recreo anterior tuvieron que esforzarse para separarse el uno del otro después de que DaeHwi se subiera ahorcajadas sobre el cuerpo de DongHo en la biblioteca, así que esta no se la perdonó.

Terminaron haciéndolo a medio vestir contra una de las estanterías de la bodega.

-Me voy a correr, DongHo- ah... -Advirtió DaeHwi.

Una de las manos de DongHo pellizcaba su pezón derecho mientras la otra sostenía sus caderas con fuerza, quizás quedarían marcadas sus manos en aquella zona, pero no era algo que le molestara a DaeHwi.

-Vamos, quiero ver si puedes hacerlo solo conmigo dentro... -Susurró el mayor con esa voz ronca sobre su oído que lo volvía loco. Se había enamorado aún más de ese lado pervertido del mayor que lo dejaba sin palabras.

Las embestidas se tornaron más fuertes y sí... DaeHwi pudo correrse solo con el miembro de DongHo dentro. Su semen manchó aquella estantería y parte sus piernas mientras sentía al mayor correrse dentro de él.

-Vaya... En serio no lo creí posible. -Dijo DongHo con diversión mientras mordía un poco la oreja de su novio, aún estaba agitado por el orgasmo que recién había tenido.

-Tampoco pensé que pasaría... -Dijo DaeHwi completamente avergonzado por lo que había sucedido. -Pero es tu culpa... ¿Cómo puedes decirme eso así? -Preguntó en un infantil reclamo.

-Me encanta que sea mi culpa y me encanta que seas tan sensible, DaeHwi... -Susurró antes de besar un poco más sobre su delicado cuello.- Te amo... -Agregó justo antes de salir de él y permitirle que se volteara.

-Te amo también... -Respondió DaeHwi sonriendo antes de unir sus labios con los ajenos.

Les tomó un par de minutos limpiarse, vestirse y ordenar un poco las cosas antes de poder salir de la bodega e ir a entregar las llaves.

-Se tardaron mucho... ¿Estaba muy desordenado? Hace tiempo que no ordenan ahí. -Comentó el profesor mientras recibía las llaves algo despreocupado.

-No estaba tan desordenado, pero DaeHwi votó unas cosas y tuvimos que ordenar todo. -Dijo DongHo, recibiendo una mirada de odio de DaeHwi quien no pudo hacer otra cosa que aceptar la mentira de su novio antes de que se retiraran a las duchas.

-¿Estás demente o qué? Malvado. -Reclamó antes de golpearle varias veces el brazo del mayor luego de haberse alejado lo suficiente del profesor como para saber que él ya no los escuchaba.

DongHo solo fue capaz de reír.

-Lo siento, lo siento... Debiste ver tu cara, fue tan gracioso...

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Esa misma tarde DongHo llegó a su casa bastante cansado, tener clase deportiva más entrenamiento de basket no era fácil, incluso para alguien tan deportista como él.