-Bien, bueno y si tengo a esa chica que tal vez me gusta justo enfrente en este preciso momento -me mira confundida.
-No lo sé, la besas y punto.
Creo que no entiende a lo que quiero llegar.
-¿A ti quién te gusta?
-No sé, me sigue doliendo lo de mi ex Donovan.
-Siempre me han caído mal los Donovan -vuelvo al tema- ¿Cómo podría ayudarte a superarlo?
-Veamos -piensa unos segundos- con helado y miles de frituras.
-No pides nada mujer -reímos.
Vuelvo a pensar en lo que haré y no se si hacerlo o no. Me paro y hace lo mismo que yo.
-Te voy a vendar los ojos -me pongo detrás de ella y saco un pañuelo que traigo en mi pantalón.
-¿Llegamos a la parte donde me secuestras y pides rescate por mi?
-Tal vez si y tal vez no -paso el pañuelo por sus ojos y lo amarro detrás de su nuca.
-¿Me llevarás a algún lugar desconocido?
-¿Porqué piensas que te secuestraré? -pregunto tomando sus manos.
-Veo muchas películas.
Me acerco a su oído y empiezo empiezo a susurrar.
-Confía en mi y verás que pronto te olvidarás de él.
Aparecen lo chicos del equipo de fútbol con los carteles que hice en la mañana con inscripciones:
Nos conocemos hace poco y sé que fue amor a primera vista.
¿Quieres ser mi novia?
Es una locura pero me vuelves loco.
Les hago señas para que se vayan, ella sigue dolida y no quiero que piense que la lastimaré o que se vea obligada a decir que si por obligación.
-Extiende tus manos -hace lo que le digo y me pongo frente a ella.
Pongo en sus manos un collar color oro en forma de círculo (foto).
-¿Qué es? -le quito la venda- un collar que tiene en medio mi inicial. Es hermoso -se lanza sobre mi y la rodeo con mis brazos.
-Cuando lo vi pensé en ti y lo compré -omito la parte del segundo collar, el que encaja con su pieza.
-Gracias, me encanta.
-Denada -hago una pausa para sonreirle.
Llega el momento en el que nadie dice nada y se vuelve algo incómodo el momento.
-Te ves... linda -se sonroja y baja la mirada a su collar.
-Gracias... tu igual -juguetea con la cadena.
-Yo siempre me veo linda -voltea a verme y comienza a reírse.
-Eres muy hermosa -me sigue el juego.
-¿A poco no?
-Obvio -responde como una chica superficial.
-No esa voz, la odio -vuelvo a mi tono de voz normal.
-¿De qué tono hablas? -y ese mismo tono.
-Sabes muy bien a que me refiero -me cruzo de brazos como un niño cuando hace pucheros.
-No lo sé Haydy.
Se pasó de la raya.
-Te estás cruzando la rayita, te advierto que es una rayita y te la estás cruzando, eh.
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Summer Love ( EN EDICIÓN )
Short StoryInicié a escribir viernes 21 Julio a las 12:42 am