ÁNGEL - LARRY STYLINSON.

ⅩⅩⅢ

Trisha se encuentra acostada en la cama de su alcoba, Zayn sostiene una de sus manos y la observa con insistencia, deseando que pronto despierte para hablar con ella.

La mujer desmayó abruptamente luego de la discusión con su esposo y ésto causó mucho pánico en los residentes del castillo. 

El fisiólogo de confianza la asistió de forma rápida y pudo habló de algún posible trastorno gracias al estrés, del cual derivan fuertes migrañas, como de las que algunos sirvientes y Zayn han sido testigos. 

Eustace pasó un buen susto gracias a la consorte, pero aún con la preocupación a flor de piel, tuvo que dejar a la mujer para asistir al Kioadá, pues ese sentimiento de necesidad de ir allí, llegó de repente. 

Zayn empieza a sentir el peso sobre sus ojos, el sueño se comienza a adueñar de su cuerpo, más desea estar despierto para cuando su mamá recobre la conciencia. 

Milagrosamente, el cuerpo de la consorte empieza a removerse lentamente y pronto sus ojos se abren, para que luego su ceño se frunza y lleve su mano directamente a la cabeza, en señal de que el dolor ha vuelto. 

El príncipe da cuenta de esto y ayuda a su madre a sentarse, haciendo que ésta apoye la espalda en la parte trasera de la cama, para luego, servir un vaso y agregar tres gotas de la infusión que el fisiólogo había recomendado darle a beber. 

Zayn entrega el vaso y asiente hacia su madre. 

－Bebelo, te sentirás mejor.-Asegura con una pequeña sonrísa, para volver a sentarse a su lado. 

Trisha corresponde a su sonrisa y hace caso a su hijo.

－No debiste alterarte tanto al descutir con papá...-Habla el moreno con voz calmada. 

－Tu padre ya no es el mismo...quería que lo tuviera claro. Verdaderamente es testarudo.-Trisha habla en tono de voz apenas audible y vuelvo a beber del vaso. 

－De cualquier manera, debiste avisarnos de tu estado. Yo no te había preguntado ya que pensé que los dolores no eran recurrentes...-Zayn dice, sintiéndose culpable. 

－No te preocupes mucho. Deberías contarme qué tal todo con Liam.-Trisha sonríe, terminando de beber la infusión y poniendo toda su atención en el menor. 

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－¡ES MI CUMPLEAÑOS, ES MI CUMPLEAÑOS, ES MI CUMPLEAÑOS!-Lottie grita con entusiasmo mientras salta por todo el palacio, pronto llega a la habitación de Gemma y Karsten e irrumpe en el lugar. －¿SABÍAN? ¡HOY ES MI CUMPLEAÑOS!-Dice con euforia mientras da algunas vueltas. 

Gemma la mira y rueda los ojos mientras sonríe, Karsten corre hacia ella y jala su vestido un par de veces, la princesa posa atención en el niño. 

－¿Habrá uno de esos pasteles gigantes?-El pequeño pregunta con inocencia. 

－¡Claro que sí! habrá pasteles, dulces y muchos dibujos de animales. Tú, Niall, Gemma y Harry son mis invitados especiales.-La chica está completamente emocionada por su festejo, del cual está encargada su madre, obviamente. 

－¿Cuantos años cumplirás?-Pregunta Gemma. 

－Diecisiete.-Contesta.－Los veo luego.-Lottie se despide y entra sin permiso a la habitación de Harry, el ángel se encuentra sentado en un mueble pequeño mientras Felicité lo peina. 

－¡Holaaaaa! ¿adivinen quién está cumpliendo años!-Canturrea Lottie. 

Fizzy la mira con obviedad y pone los ojos en blanco.