Chapitre six

743 68 14
                                    

Pov. Luke
Ha pasado una semana desde la última vez que estuve con mi caperucito...la situación no era muy buena a mi favor ya que desde ese beso él me evitaba... El dejó de ir solo a la casa de su abuela... Ahora lo acompaña ese remedo de herrero ¡agh! ¡Odio a ese bastardo! Siempre acercandose más de lo necesario a mi caperucito, siempre sacando preciosas sonrisas de sus delicados labios carmesí.. Aquellos deliciosos labios con sabor a cereza que tanto me fascinaban.. Voy a deshacerme de ese idiota que intenta robarme a la futura madre de mis cachorros; Aunque siendo sincero ese mocoso no se compara a mi.. No es más que un adolescente precoz, en cambio yo, ya soy todo un hombre, mi caperucito seria tonto si elige a ese niño en vez de a mi... Yo me asegurare de que tome la decisión correcta..

Pov. Kenlin
Es raro como todo cambia... Hace una semana que no he visto al lobo feroz... Tampoco es como si quisiera verlo, de hecho lo he estado evitando... De tal manera que le pedí a Noah que me acompañara con mi abuela.. Sin embargo siento un extraño vacío en el pecho, esto es demasiado extraño... En ocasiones he despertado a la media noche por las pesadillas que tengo, todas tienen al lobo como protagonista, siempre lo veo con una expresión llena de cólera... Pero lo más extraño es que en cada sueño yo llevo un pequeño bulto en mis brazos... Cuando le quito la pequeña cobija descubro a un hermoso bebé de cabello negro...demasiado para mi gusto... Pero lo mas extraño es que cuando abre los ojos llego a la conclusión de que ese pequeño bulto es mio ya que tiene mis ojos azules... Ese sueño me persigue dia y noche... Pero volviendo al asunto del depredador... Tomé la decisión de hablar con el y arreglar las cosas de una vez por todas así que tome mi canasta y mis botas para la lluvia para después salir de mi hogar y correr al bosque, no paso mucho tiempo para que aquel apuesto chico apareciera.

- ¿¡Ahora no viene contigo tu amiguito el herrero!? -Dice el pelinegro con el seño fruncido mientras se cruzaba de brazos mirandome como si fuera un traidor -

-Tenemos que hablar... Las cosas no pueden seguir así... Dime tus intenciones conmigo.. -Digo sin rodeos mientras me acerco al chico a paso firme -

- ¿Mis intenciones?...suenas como una chica -dice con sorna mientras tomaba con firmeza mi brazo, lastimandome en el acto - mis intenciones contigo son matarte..herir tu mente de la peor forma posible... Esa horrible forma que te hace perder la cabeza... Esa maldita forma que hace que los humanos pierdan el sentido de la autonomía.... Esa jodida forma que los de tu especie llaman amor -no pude evitarlo.. Me sonroje de manera violenta en cuanto el término de hablar, minutos después senti cómo tomaba mi otro brazo con la misma fuerza que al anterior -

-¡D-detente! Me lastimas..-dije entrecerrando un ojo por el dolor que sentía, él sin embargo seguia mirandome, pero de una forma diferente... Esta vez se veía con una mirada sombría, aquella mirada de amenaza que pone un león al proteger a su hembra, comenzaba a asustarme -

-Escucha bien caperucito.. Tu eres mio así que ve terminando lo que sea que tengas con ese remedo de herrero.. Hmm te lo dire de una mejor manera para que lo entiendas.. Ahora eres mi esposa, genial ¿no?, pero para que todos los demas se enteren.. -Observe su sonrisa ladina con desconfianza para después sentir como rompía mi playera por la parte del cuello, lo último que sentí fue un agudo dolor en el cuello... Él... Me estaba mordiendo..podía sentir aquel líquido carmesi salir de mi nueva herida, dolia a horrores -

- Alguien.. Ayuda -susurre con voz suave mientras cerraba los ojos dejándome hacer por mi depredador -....

Le Petit Chaperon rouge (Gay) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora