Capítulo 4: El gran día. Parte |||

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Maya y Caly nos acompañaron a elegir el ‘club’, lo llamaremos así, íbamos por un pasillo en el patio donde mostraban algunas cosas que hacían en los clubes, íbamos todos juntos así uno al lado del otro, hasta que yo me quedo parada mirando sorprendida y fascinada una demostración de baile, los demás no se dan ni cuenta y siguen para adelante, yo tampoco le di importancia ya que me quede embobada mirando como bailaba. Cuando termina de bailar, algunos se alistan al igual que yo, cuando me alisto me dicen que a las cinco aquí para ver quién va a ser mi tutor de baile.

P.O.V Benjamín

Cuando voy a decirle algo a Tania no la encuentro, ¿dónde se ha metido?, miro para todos los lados y no la veo, se lo pregunto a las demás y se quedan igual que yo, entonces me acordé de que tenía su número y la llamé, lo puse en altavoz.

*Llamada telefónica*

Tany: Tania al habla – dice ella atreves del móvil.

Yo: Soy Benjamín, estás en altavoz y los demás te están oyendo. Oye, ¿dónde estás?

Tany: Oh, en el club de breakdance, ¿Maya o Caly saben cúal digo? – miré a Maya, estaba sorprendida, pero, ¿por qué?

Maya: Sí, ya vamos para allá, hasta ahora.

Tany: Hasta ahora – y colgó al igual que yo.

*Fin de la llamada telefónica*

P.O.V Tania

¡Hala, pero si me había olvidado de ellos!, mientras esperaba a que vinieran, me senté en unas escaleras que había cerca de allí y registré el número de Benjamín en contactos y llegaron.

Benjamín: ¿Por qué no avisas de qué te vas? – dijo preocupado mientras se sentaba.

Yo: No me fui, me quedé atrás, lo que pasa es que estabais todos concentrados en sus asuntos, ni uno se dio cuenta de que me quede atrás – dije cruzándome de brazos cómicamente.

Hana: Yo tengo excusa, estaba perdida y estaba concentrada siguiendo a Caly – dijo mientras  ella, Maya y Cali se sentaban.

Yo: ¿Ya le pusiste nombre a la ‘Nintendo’? – dije de broma y reí igual que los demás – Es broma, no estoy enfadada ni nada. Por cierto, Benjamín, tu nombre es muy largo, ¿cómo prefieres que te llame, Benja o Benji?

Benjamín: Como tu quieras – dijo sonriéndome.

Yo: Ok, Benji – reí –, suena como si fueses un niño pequeño – y seguí riéndome a carcajadas.

Benji: ¡Oye, entonces llámame Benja! – dijo a lo que yo seguí riéndome.

Yo: No, haber contestado bien la pregunta – dije riéndome – ¡Hala, Benji y Hana, que tenéis que elegir club! – dije, ya que pronto serían las cinco.

Benji/Hana: ¡Es verdad! – salieron corriendo por el pasillo hasta que desaparecieron entre la multitud.

Caly: Voy al servicio un momento, ahora vuelvo – dijo mientras se levantaba.

Yo/Maya: Ok.

Maya: Oye, ¿por qué decidiste entrar en el club de breakdance? – dijo ella curiosa.

Yo: Oh, bueno, es que me encanta bailar, y el que hizo la demostración me sorprendió y fascino tanto, que decidí alistarme, aunque no sea muy buena en piruetas intentaré hacer lo que pueda – dije sonriendo y mirando para el cielo, estaba mirando el cielo de L.A, nunca pensé que me vendría a vivir aquí, y menos aún por la razón por la que me mudé.

Maya: ¿Y cómo es él que hacía la demostración? – dijo más curiosa, esto parecía un interrogatorio.

Yo: Ni idea, tenía una capucha y una gorra, y casi no se le ve la cara – dije algo decepcionada, lo único que se le veía era la sonrisa, de la nariz para arriba casi no se le ve nada, ¿por qué se tapará la cara? – ¿Por qué, te gusta uno que está en el club? – dije mientras le daba suavemente con el codo.

Maya: ¿Qué?, ¡no!, además, mi hermano no me dejaría tener novi… – se interrumpió ella misma.

Yo: ¿Tienes un hermano, aquí? – dije emocionada, nunca había tenido una amiga con un hermano y no sé lo que es ir a casa de una amiga y a la vez de un amigo.

Maya: ¡Shhh!, después te contaré, por ahora no digas nada sobre el asunto, ¿ok? – dijo un poco preocupada.

Yo: Ok, tranquila, no le diré a nadie – dije con una sonrisa, en eso llega Benji corriendo.

Benji: ¡Gané, toma esa! – dijo mirando para atrás, ¿a quién se lo decía?, después llegó Hana también corriendo.

Hana: Por suerte – dijo cruzándose de brazos.

Benji: ¡Ja!, ¿y no tengo premio? – dijo con una sonrisa arrogante.

Yo: Tu premio es que te llame pequeño Benji en vez de Benji el resto del día – dije yo riéndome a carcajadas por la cara que puso.

Benji: – Empieza a hacerme cosquillas – Retira lo dicho – dijo riendo.

Yo: ¡Nunca! – dije riéndome mientras intentaba agarrarle para que no me hiciera más.

En eso suena la campana del reloj que está en la punta de arriba del internado, la verdad es que el reloj es muy bonito. Dejó de hacerme cosquillas y nos dirigimos cada uno a nuestros respectivos clubes, se me olvidó preguntarle a los demás en qué club estaban… Después se los preguntaré.

The boarding school (Cameron Boyce) [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora