Inesperado (Sebastián Yatra)

Capitulo 4 - Verdadera Identidad

Al siguiente día estaba con mi mamá viendo televisión, ella, por qué yo estaba quedándome dormida

-hija - dijo mi mamá

-mmm- respondí entre mis sueños

-¿ese no es tu novio?- preguntó

-mamá ya te dije que terminé con julian- dije aún con los ojos cerrados

-no hija, Sebastian, está en televisión -

abrí de golpe los ojos, si era él,Sebastian ¿yatra? Me mintió, me dijo que se llamaba Sebastián Obando y que estudiaba economía en una universidad de Bogotá, me llené de furia y le escribí por whatsapp, era famoso.

-hola ¿yatra?- le escribí

-lo siento, yo no quería que supieras -

-¿Obando o yatra? -respondí

-los dos, déjame explicarte-

-¿que vas a explicarme? Sebastian yo estaba comenzando a sentir cosas por alguien que no existe, yo no puedo estar con otro mujeriego y encima famoso, no quiero nada que tenga que ver con ese mundo, no es lo mío - fué lo ultimo que escribí y lo bloqueé en whatsapp

-¿por qué lloras mi amor?- me abrazó mi mamá

-Sebastian me dijo que era una persona totalmente diferente a lo que es, tú lo viste, es cantante, me dijo que estudiaba economía en Los Andes- respondí

-pero hija, Sebastián me parece un niño muy lindo, no sólo físicamente claro, un hombre como él no lo encuentras en cualquier lado, buen hijo, buen hermano, buen amigo, porque no hablas con él y dejas que te explique, mira que él accedió a cuidarte cuando estabas sola-

-mamá, ¿que me va a explicar? Yo no quiero nada que tenga que ver con ese mundo, debe ser igual que todos los cantantes jóvenes, tipo maluma, mujeriego como él solo, yo no quiero eso para mí vida, ya tuve un idiota con quién lidiar, ya no quiero más - dije llorando

-ay mi amor - me abrazó - entre tú y julian no había amor, no todos los hombres son como él,entiendo que estas dolida y tienes miedo, pero no conoces a Sebastián -

-mamá no quiero nada que tenga que ver con ese mundo y por favor ya no hables del tema, voy a dormirme, me puse de pié y fuí a mi habitación.

Puse mi celular en la mesa de noche y cuando me estaba quedando dormida comenzó a vibrar, conteste sin ver quien era pensando en que todo esto era un sueño.

-no cuelgues por favor, solo escúchame- hice todo lo contrario, apague el celular y me fui a dormir otra vez.

Al siguiente día me desperté con mucho dolor de cabeza y sentí que alguien se sentaba a el lado mío.

-hija! Mi vida despiértate que ya es tarde -susurró mi mamá

-¿ que hora es? -

-las 11:30- respondió

-ay mamá estoy en vacaciones, déjame dormir más -

-levántate y báñate rápido que necesito que me lleves a comprar unas cosas-

-yo no se por qué no aprendiste a manejar- dije poniéndome de pie, me bañé y me puse lo primero que encontré.

-ponte algo lindo hija, pareces un zombie así como tú dices-

-ay mamá solo te voy a llevar y me devuelvo no tengo ganas de hacer nada hoy -

-después no te quejes - bajamos en el ascensor y estaba Sebastián de espaldas, era él.