Inesperado (Sebastián Yatra)

Capitulo 56- Bienvenido Mathias

SEBASTIÁN
Estaba en el estudio con Andrés y Mauricio ultimando detalles para lo que sería mi próximo single.

Habían pasado 3 meses desde que volví a ver a Mariana, las cosas con ella habían sido todo como me lo había dicho, yo vivía en un apartamento cerca de la casa de ella, yo recogía a mi hija en el jardín para almorzar y en la tarde ella se la llevaba, la acompañaba a los controles de Mathias pero manteníamos distancia, sabía que estaba conociendo a alguien, me partía el alma saberlo, amaba a esa mujer con locura.

A Mauricio le sonó el teléfono y salió del estudio a contestar, cuando volvió tenía la cara con expresión de tragedia.

-que pasó?- preguntó andres

-Hermano, no contestabas el celular, era Roberto, Mariana rompió fuente, ya la están llevando al hospital - mi corazón se paro, y comencé a temblar-

-Gracias por avisame,

-felicitaciones papá - dijo andres para abrazarme- cuéntanos cualquier cosa

-Vale- los abracé a los dos y salí apurado para el hospital.

Cuando llegue estaba una amiga de ella que conoció en el gimnasio tiempo después de mudarnos a Los Ángeles y Roberto.

-Donde está? Que ha dicho la doctora- dije desesperado

-cálmate - dijo Roberto, te están esperando- dijo, me guío a la sala donde estaba mariana retorciéndose del dolor, gritando, entré a una sala al lado y me pusieron un traje azul me lavé las manos y entré, la mirada asustada de Mariana se tranquilizó cuando me vio, le pusieron la epidural y comenzaron con el procedimiento.

pasaron algunos minutos y los ojos de mariana se cerraron y las enfermeras hablaban apuradas, unos ruidos se escucharon a mi alrededor.

- que pasa?- pregunté preocupado- por que cerró los ojos, Mariana, mi amor- le decía a ella

-Adriana, saca a él hombre- le dijo la doctora, ella fue hasta a mi y le comenzó a llevar a la puerta - que mierda pasa?- grité, mientras veía un movimiento extraño y rápido en la sala. llegaron dos enfermeras más y me lograron sacar, las lágrimas se apoderaban de mis ojos, tenía miedo y nervios, me senté frente la sala donde estaban Roberto y si amiga.

-que pasó?- pregunté

-no se- comencé a llorar, pasaban los minutos y nadie aparecía.

Cuando la doctora apareció creía que mi miedo más grande se hizo realidad.

-hicimos todo lo posible, Mariana sigue cedada, si quieres puedes ir a conocer a tu hijo- dijo, el alma me volvió al cuerpo

-que le pasó a Mariana?- pregunté

-se descompuso, los nervios, la ansiedad, la impresión, el perder sangre, todo eso pero es normal, se va a despertar en unos minutos- dijo

-Mathias, nació bien?- pregunté y ella asintió, abrí la puerta y vi a mi hijo en brazos de Mariana, amor, ay Dios mío que susto me pegaste- dije aliviado -estás bien? Sentí que te perdía - dije aún con lágrimas en los ojos

-me siento muy cansada, me siento dormida - dijo-Mira- vi a mi hijo y mi corazón comenzó a latir muy rápido- quieres alzarlo?- preguntó, yo asentí, lo tomé en brazos y era bastante inquieto.

-se mueve mucho - dije - Gracias- le sonreí a ella - yo amo a mi hija, pero este bebe va a ser mi compañía- suspiré- te amo tanto - le dije con lágrimas en los ojos.

-Sebastián hoy no - respondió, su respuesta me dolió, el que no me haya dicho "yo también " o algo así.

-hola campeón - le dije a mi bebe- bienvenido, soy tu papá - tenia los ojos llenos de lágrimas- no sabes el trabajo que tenemos, tenemos unas mujeres hermosas, y tú y yo vamos a ser los encargados de espantar a todo hombre diferente que se les acerque- él bebe se comenzó a mover - si amor, vas a ser cantante, como yo - le dije - donde está Sophia- le pregunté a Mariana, quienes estaba con los ojos llenos de lágrimas-