Soulmate Drawings

Dibujante y Bailarín

El silencio en el estudio de la universidad era más que extraño. Y ese día no era una excepción.

- Yooongiiiiiii.- Hoseok lo zarandeó por tercera vez.

- Yah, deja de moverme.- le apartó el brazo.

- Lo haría si me hicieses caso.- Hoseok hizo un puchero.

Yoongi suspiró y lo miró fingiendo una sonrisa.

- ¿Qué?

- La semana que viene es el concurso de talentos de la universidad. Necesito que me ayudes con la canción.

- Ya te dije que no.

- Pero Yoongiiiiiiiiii

- No. Te he dicho que no compongo.

- Pero yo solo no puedo.

- Pídeselo a alguien del departamento de música.

- Ya no me quieren ahí por ruidoso.- se cruzó de brazos y Yoongi susurró un "qué raro".- Por fiiiiiiiii

- No.

- Vengaaaa.

- NO.

- Haré que Jimin te convenza.- sonrió triunfador.

Yoongi se paralizó. Miró a su amigo que le devolvió una mirada de "sabes que soy capaz". Gruñó y maldijo que esos dos se llevaran tan bien.

-...Vale.

- Síiiiiiiiiíiiiiii.- se puso en pie y comenzó a bailar.- Lo conseguí. Ajá. Ajá. Ajá. Ajá.

Yoongi no pudo evitar reír. Los brazos de su amigo en el aire, sus marcas negras ya inexistentes. Miró le reloj y vio que ya era hora de irse.

- Bueno, debo irme.- dijo mientras guardaba sus cosas.

- Gracias, hyung. Te debo una.- le puso la mano en le hombro.

- Perdona, pero me debes varias.- lo miró acusadoramente.

Hoseok levantó las manos como si fuera inocente y se hizo hacia atrás. Yoongi sonrió y se colgó la mochila al hombro saliendo por la puerta.

- Adiós.- se despidió con la mano.

- ¡Corre con tu Jimin!- exclamó Hoseok.

Se escuchó la risa del mayor por el pasillo.

Cuando la puerta se abrió y vio el salón de su casa se sintió relajado. Cerró la puerta y dejó caer la mochila. Suspiró y se adentró en la estancia.

- ¿Jimin?- preguntó depositando las llaves sobre una mesita.

- ¡Aquí! - le contestó una voz desde la habitación.

Sonrió y se encaminó por el pasillo.

Jimin lo esperaba sentado al borde de la cama balanceando ligeramente sus piernas cual niño pequeño. Llevaba un jersey marrón claro que le venía grande, por lo que sólo se le veía la punta de los dedos en las mangas, los cuales tamborileaban en sus rodillas. Escuchó el sonido de la puerta y vio a Yoongi entrar. Sonrió de forma deslumbrante y le dio la bienvenida tiernamente.

- Bienvenido Yoongi~.- le saludó con la mano poniéndose en pie.

El otro sonrió y le cogió de la cintura para acercarlo más rápidamente. Jimin casi pierde el equilibrio y se estabilizó agarrándose de los hombros del mayor.

- Ya estoy en casa.- murmuró escondiendo su rostro en el cuello del más bajo.- Te he echado de menos.

Ante eso Jimin se sonrojó y trató de esconder su vergüenza con una risita.

- Yo también te he echado de menos. - comenzó a acariciar la nuca ajena.

Yoongi se relajó en las caricias del otro y apretó sus brazos. Jimin sonreía ampliamente, sólo con estar ahí le valía. Al cabo de un rato Yoongi comenzó a cansarse y empujó a Jimin arrastrándolo junto a él hacia la cama, sin separarse. Jimin abrió los ojos y trató de decir algo, pero la cama golpeó el interior de sus rodillas provocando que cayera de espaldas sobre la manta. Soltó un quejido y Yoongi se revolvió en sus brazos para acomodarse a los dos. Una vez se quedó satisfecho, suspiró contra el pecho del otro.

- Así mejor...- murmuró cansado.

Jimin rió y observó al otro con una sonrisa mientras le acariciaba la espalda. Yoongi lo miró de reojo e hicieron contacto visual. Jimin se ruborizó y Yoongi se quedó cautivado por la belleza del menor. En ese momento no podía evitar arrepentirse de no haberlo encontrado antes. No sabía cómo había podido vivir sin esas sonrisas. Sin esos brillantes ojos. Sin ese suave pelo. Sin esa adorable nariz. Sin esas pequeñas manos. Sin esas mejillas rosadas. Sin esas carcajadas contagiosas. Sin esa amabilidad. Sin...Jimin. Deseaba haberlo encontrado antes. Haberlo cuidado antes.

- Tenemos muchos años que recuperar.- dijo en voz alta mirándolo a los ojos.

- ¿Mhm?- ladeó levemente su cabeza confuso.

Yoongi sonrió y le dio un rápido beso. A Jimin le dio el tiempo justo para procesar y cerrar los ojos. Cuando se separó el mayor observó divertido cómo el otro abría los ojos aturdido.

- Que te quiero.- confesó y Jimin se espabiló al instante.- Y te quiero a mi lado. Con tus notas de olvidadizo en mis brazos.

Se escuchó la risa más melodiosa a oídos del mayor.

- Ahora tengo dos agendas, no se me puede olvidar.- elevó los brazos.

Yoongi hizo un puchero y escondió su rostro en el pecho del otro. Jimin sonrió enternecido.

- Yo también te quiero, Yoongi.- le dio un besito en la cabeza.

El nombrado miró hacia arriba y pudo ver el rostro sonrojado del menor, que se llevó ambas manos a este.

- Aahhh.- ahogó un grito en sus manos.

El mayor rió y apartó las manos del otro.

- Déjame besarte bien.- demandó capturando los labios del más pequeño en un largo y dulce beso.

Jimin tenía las manos capturadas y estaba impaciente por moverlas hasta la espalda del otro, que notó esto y se separó con semblante serio.

- Ah-ah, no vamos a llevarlo más lejos, necesito dormir.- amenazó subiendo las cejas.

Jimin se sonrojó por tercera vez y murmuró cosas como "no iba con esa intención" o "nunca hemos llegado tan lejos", pero Yoongi lo ignoró, optando por continuar besándolo.

Después de unos cuantos besos se separaron y respiraron con algo de dificultad. Se observaron en silencio hasta que comenzaron a reírse.Jimin hacía ese sonido característico suyo y Yoongi se paró a admirar su adorable expresión. Cuando el otro se calmó elevó la mano y puso un dedo en la nariz ajena.

- Te. Quie. Ro.- dijo tocando por cada sílaba la nariz de Jimin.

El susodicho soltó una risita.

- Yo también te quiero.

Y abrazados se durmieron. Sus brazos entrelazados tenían lo mismo escrito en ellos. Marcas con tinta y sentimientos invisibles pero permanentes.

Weno weno, llegamos al final de esta historia.
Me presentaré, soy la autora de este cursi fanfic, Kaicci. Solo quería decir que agradezco el interés puesto en esta obra y las estrellitas otorgadas a los capítulos. Esta historia la escribí hace tiempo, y me daba cosa compartirla. ¡Espero que os haya gustado!

Y quiero agradecer a una personita especial, mi omma e internet personal xD. Gracias por leer mi historia y apoyarme sin darte cuenta <3

¡Gracias por leer!