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Un hombre tan atractivo que pocas mujeres eran capaz de sostener la vista en la mirada de este y el secreto no era su cabello amarillo o el tono de su piel ni siquiera lo musculoso que era su cuerpo, su secreto eran sus ojos esos maldito ojos azules que no cualquiera era capaz de poseer los de tener la dicha de mirar a través de ellos. Podrian ser hermosos y azules, pero eran los ojos del mismísimo diablo, eran su camuflaje, era la carnada para atraer a la presa y que esta muriera entera y completamente feliz, tal vez Hasta llegando a pensar que moría haciendo lo que le gustaba.

-Ya tuvo su primera menstruación creo que ya es el momento justo de que este con ella-  pronunció en un tono suave Susan-

-¿Tan pronto? ¿Cuantos años tiene?- Pregunto en un leve bostezo mientras veía aquel lugar nocturno que a penas estaba preparándose para la noche-

-12 años y debo aclarar se va a follar a una niña y a parte de todo a una virgen- Se cruzó de brazos para inhalar nuevamente el humo de aquel cigarrillo- Su precio debe ser muy bueno a pagar Señor Bond, debo decir que tengo otros clientes dispues...-

-¿Me esta amenazando o me pone condiciones? Debo recordar le que pago todos los gastos de esa niña y a parte de todo este lugar es de primera clase en Francia ¿Por mi dinero?- Un mirar serio se apoderó de el mientras su vista se dirigió a la otra con una pequeña sonrisa de lado- Recuerde algo Madame Susan, usted no me conoce- Hablo en un tono pausado mientras ponía encima de la mesa su Tauro- Puedo hacerla desaparecer aún punto tal que nadie de este asqueroso y miserable lugar recuerde ni siquiera su nombre ¿Me entiende?-

-Claro señor Bond- Se limitó a responder-

De cierta forma nadie sabía quién era este hombre, de donde procedía ni siquiera de quien era familia, lo único que tenían seguro era su gran poder, el dinero que poseía y lo que era capaz de hacer.

La niña fue preparada para aquel hombre al igual que la habitación. Y allí lo esperaba esta completamente desnuda en unas sábanas de seda de color blanco, Bond quería que la huella de su inocencia quedará fijada en aquella sábana que fuera a testificar de lo que sucedería aquella noche. Bond salió del baño como Dios lo trajo al mundo y con su amigo haciendo presencia en aquel lugar, Isabelle a ver aquello sintió miedo podía saber Muchas cosas y haber visto otras cuantas pero en ninguna de esas situación ella era involucrada.

-Supongo que ya sabes lo que viene a continuación- Mencionó mientras se sentaba en un extremo de la cama- Ven siéntate aquí- Palmeo su regazo esperando a que la menor acatara la orden-

La niña se paró de la cama y se sentó en el regazo de este mientras veía su cuerpo desnudo frente al espejo y aquel hombre que ahora era como su sillón. Bond separo sus piernas y dirigió aquellos ásperos dedos a la vagina de la menor mientras con la otra mano amasaba aquel creciente y suave pecho, sus labios succionaban la  delicada piel de su cuello dejando aquellas violetas marcas encima de su piel que daban a indicar que aquella jovencita era solo suya. Sus dedos se empezaban a húmedecer con el néctar vaginal que producía la menor, mientras aquellos delicados jadeos sinvergüenzas rebotaban en las cuatros paredes llenando la habitación de una hermosa y lasciva melodía. Introdujo el primer dedo en la estrechez de aquel lugar nunca antes poblado.

-¿Te molesta?- Pregunto mientras le devoraba la oreja de una forma cautivadora- Mírate en el espejo, eres una perra más de la que viven aquí- Pronunció mientras introducía el otro dedo y veía en el reflejo del espejo como aquella sacaba la lengua- Tienes un rostro tan erótico pequeña puta-

Tomó de los muslos de esta para rozar su erección contra aquella humedad tentadora para luego de una sola estocada poca delicada entrar completamente en su interior. Aquel grito aterrador le hizo reír a carcajadas pero ver su falo llenarse de aquella sangre clara le hizo suspirar relajado.

Luego de unos minutos de horribles gritos y mojadas lágrimas por fin la tenia encima de él cabalgando lo Cómo toda una experta, tal parece y aquella era la ventaja de estar con las niñas, estas aprenden rápido.

Madame ObsessionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora