El Ritual: El Renacer de la Bestia.

Capítulo 5.- Denuncia.

Camino a casa, nadie mencionaba una sola palabra, el padre solo se limitaba ver a su hija por el espejo retrovisor.

Ximena por su lado, se encontraba absorta en sus pensamientos, su mirada estaba vacía y su rostro demostraba una expresión lúgubre.

"¿Cariño, estás bien?"
Fué lo único que mencionó el hombre, pero no recibió respuesta alguna.

Una vez en casa, la joven se dirigió mecánicamente a su habitación y se encerró dentro.
Apagó todos los artefactos electrónicos y se metió debajo de las sábanas intentando olvidar todo lo ocurrido.

Una vez más los rayos del sol iluminaban el dormitorio de Ximena, la joven se levantó de la cama y empezó a arreglarse para ir a la Universidad.

Ésta vez, Laura la estaba esperando fuera de casa para ir juntas caminando.

-Pensé que habías muerto, ni una llamada, un mensaje, ¡nada! -Exclamó Lau.

-Lo siento, me sentía totalmente mal ayer.-respondió Ximena con desánimo.

-Bueno, te lo dejaré pasar esta vez, cuéntame cómo te fue en la cita.

-Al principio todo parecía ir bien, pero al final él resultó ser todo un patán, de modo que lo dejé ahí y me fuí a casa, es todo.

-Que tipo para más..., bueno ya conocerás a alguien mejor.
Ambas siguieron caminando y en pocos minutos llegaron a la Universidad y notaron varios coches de policía fuera de la facultad en la que recibían clases y varios oficiales fuera de la oficina del decano.

-Mira Xime ¿Qué habrá pasado?-dijo Lau desconcertada.

-No lo sé, vayamos a ver.-respondió Ximena.

Ambas se dirigieron a la oficina del decano, pero como era de esperarse no las dejaron pasar. Sin embargo Laura logró observar que cerca del bar estaba su primo Mike, el cual era un joven de veinte años, estatura alta, cabello corto color castaño, ojos color café oscuro y nariz gruesa, su cuerpo no poseía una musculatura muy bien definida y trabajaba en la policía.

Lau agarró de la mano a su mejor amiga y la llevó con ella hacia Mike.

-Hola Mike-dijo Lau con una sonrisa.

-¡Hola!-respondió Mike mientras acomodaba el cuello de su camisa-tiempo sin verte.

-Casi tres meses-respondió Lau-pero bueno, me puedes decir por qué están aquí-preguntó.

-Me gustaría quedarme a charlar-hizo una pausa-pero debo irme, mi jefe me necesita, pero te dejo mi número-dijo mientras le extendía una tarjeta pequeña a su prima-nos comunicamos después.

Lau hizo una cara de disgusto, se despidió de su primo, luego ella y Ximena se dirigieron a la salida, puesto que habían recibido la noticia de que se suspendieron las clases.

-Lau, ya regreso, iré al bar a comprar algo -dijo Ximena.

Laura asintió con la cabeza y observó como su amiga se alejaba lentamente de ella, mientras que a lo lejos una silueta se le iba acercando rápidamente, por lo cual la joven afinó su vista para poder ver de quién se trataba y notó que era Frank.

-Buenos días-el joven hizo una pausa para tomar aire-espero no incomodarte, pero me gustaría preguntarte algo.

-Claro, pero primero recupérate-respondió Laura.

-Bueno, en primer lugar, mi nombre es Frank Lopez, me gustaría saber si sabes algo de mi amigo Carlos Carrión.

-¿Del nerd?, no se nada sobre él.