El Ritual: El Renacer de la Bestia.

Capítulo 8.- Ataque en el Zoológico

Al siguiente día, Laura y Ximena planearon salir de compras.

-Recordé que debía darle esta carpeta a Mike.-dijo Laura mientras sacaba una pequella carpeta negra de su bolso.

-Vamos donde Mike primero y luego nos dedicamos a las compras.-respondió Ximena con una sonrisa.

Ambas caminaron rápidamente hacia el departamento de Policía.

Una vez dentro, caminaron por un angosto pasillo hasta llegar a una pequeña oficina, situada al final de aquel pasillo.

Allí estaba Mike, el cual sostenía una rosquilla en su mano izquierda y su mano derecha sobre el teclado de su ordenador.

Ximena, golpeó suavemente la puerta. Mike al verlas, dejó la rosquilla sobre un platillo y se levantó a abrirles la puerta.

-Bueno, al parecer, los ángeles también tienen problemas en este mundo.-dijo Mike, tomando asiento frente a su ordenador, sin despegar su vista, de Ximena.

-¡Oh porfavor! Mike, solo vine a entregarte esta carpeta, mi tía dijo que la necesitarías.-respondió Laura con seriedad.

-No lo decía por tí, pero muchas gracias, me has salvado primita.-respondió Mike.

-Bueno Lau, creo que debemos irnos.-susurró Ximena.

-No tan rápido angelito, hay algo que quiero hablar contigo.-Mike hizo una pausa para mirar a Laura.-a solas.-finalizó.

Laura observó fríamente a su primo, el cual le devolvió la mirada.

-¡Está bien!, pero no tarden.-dijo Laura saliendo de la oficina.

Ximena realizó un recorrido por la oficina con su mirada, realizó un suspiro y finalmente se dispuso a hablar.

-Bien, ¿sobre qué quieres hablar conmigo?.

-Primero, toma asiento.

-Así estoy bien, además, no tengo intención de tardar.

-Bueno, en ese caso, iré al grano...¿saldrías conmigo?-dijo poniendo los ojos de cachorrito.

Ximena miró fijamente a Mike.

-¿Es una broma, verdad?

-Para nada, se que fuí muy directo y esto debe seguir un orden, pero...

-Acepto. En dos horas, nos vemos en el zoológico.

Ximena, salió de la oficina y Mike  continuó realizando su trabajo, al mismo tiempo que realizaba varios planes para su cita.

****************
Mike llegó al zoológico y vió a Ximena, parada junto a un grupo de turistas extranjeros.

-Hola Ximena, luces de maravilla.-dijo Mike acercándose hacia Ximena.

-Gracias Mike, ¿por dónde empezamos?.-preguntó la joven.

-Sigamos al guía de los turistas, así no nos perderemos.-respondió Mike con tono burlesco.

La joven asintió y ambos siguieron al guía y al grupo de turistas, pasaron por varias secciones y en cada una, realizaban una pausa para tomarse algunas selfies con los animales.

Después de media hora de caminata, Ximena tomó la mano de Mike y lo alejó del grupo.

-Ven, te mostraré mi sección favorita.-susurró la joven.

Mike asintió y se dejó llevar, caminaron por pocos minutos, hasta llegar a la sección de reptiles.

-Después de esta sección, está la de aves, mi sección favorita, pero descansemos un poco aquí.-dijo Ximena, mientras se llevaba una botella de agua a la boca.

Se sentaron por unos minutos, mientras veían a los lagartos entrar y salir del agua.

-Mike, estamos completamente solos en ese lugar.-Ximena hizo una pausa para acercarse al oído del joven.- Quítate la ropa.- susurró.

El joven se sobresaltó y miró fijamente a los ojos de Ximena, en ese momento, Mike entró en una especie de transe y empezó a desvestirse rápidamente.

Ximena se alejó unos cuantos centímetro y empezó su macabra transformación.

Mike, volvió en sí y notó que en lugar de Ximena, ahora tenía en frente a aquella bestia infernal, de dos metros.

La bestia lanzó un fuerte bramido y empezó una ágil carrera hacia Mike.

Todo se movía en cámara lenta para el joven, todos los recuerdos le llegaron de golpe, haciendo cortocircuito en su cabeza. Él quizo correr o gritar, pero le fue imposible.

La bestia clavó sus garras en el pecho de Mike, derramando gran cantidad de sangre en el piso.

Una vez muerto, la bestia, empezó a devorarlo con gran agilidad y rapidez, como si no hubiese comido hace varios años atrás.