||El alcohol será nuestra excusa|| - Yaoi Fonnie (Editandose)

6

Lápiz en mano y ojos sobre la hoja frente a Brian. El tiempo corría y el carbón de la punta no tocaba le superficie blanca. ¿Respuestas? Ninguna, pero el pelimorado seguía hundido en sus pensamientos desde el día de ayer. Franz, su confesado amor y la carencia de ideas para poder enamorarlo.

Mas su inconciente pensar fue abruptamente interrumpido por Mike, su profesor de esta clase, quien con un lápiz y con cierta rudeza toco el hombro del menor.

—No es momento de estar fantaseando,

"¡Diablos!" susurró para él mismo al notar que aún no habia respondido ni una sola pregunta.

No era tiempo para pensar en su amor platónico imposible, debia concentrarse en su prueba.

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Por fin fuera de aquella tortura mental se dispuso a regresar a casa. Sus amigos, o ya habian dado sus exámenes de hoy y se habian ido, o los darían mas tarde y no estaban en la universidad. De una u otra forma, estaba muy ocupado mentalmente como para entablar una conversación con alguien.

Una vez llegó abrió la puerta, tirando suavemente de la perilla. Sabía que Amy ya había llegado, por lo que seguro estaría durmiendo en el sofá de la sala, asi que no quería despertarla.

Entró y cerró con el mismo cuidado.

Por fin en casa.

Pasó al lado del sofá, encontrando a su mejor amiga ahí, recostada, con la tv encendida. Una pequeña sonrisa se formó en su delicado rostro al verla. La cubrió con una manta y apagó el televisor.

Fue a su cocina encontrándose con el almuerzo sobre la mesa. Cubierto con un plato encima y una nota. "Hoy es un nuevo día. ¡Organiza tus ideas y verás como todo irá mejor!".

El pelimorado arqueó una ceja. Seguro lo habia sacado de alguna revista o del horóscopo del día de hoy. Dejó a un lado el papel y calentó su comida.

Ya en su habitación con un agradable plato de comida, se recostó en su cama y comenzó a pensar.

"¿Que podría hacer? ¿Que podria hacer?"

Se preguntaba constantemente. Debía ser algo grande, pero sútil. Que no lo espante y que penetre en su corazón.

"¿Quizá podríamos ir algun bar? A él le gusta beber, sobre todo con amigos"

Aquella ocurrencia llegó como anillo al dedo. Aprovecharía su posible estado de ebriedad para confesarle su amor. La respuesta del mayor sería sincera, y mañana no recordaría nada de lo sucedido.

"¡El plan perfecto!"

Ahora sólo debía llevarlo a cabo. ¿Como? A finales de los examenes tendrían una reunión. Podría incitarlos a llevar algo de alcohol y listo.

La piel de Brian se ponía cual gallina. Estaba en un estado entre ansiedad y nerviosismo. Sea cual sea el resultado, Franz no recordaría nada, ¿Qué es lo peor que podría pasar?

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—Y entonces podríamos llevar... Ya sabes.. Quizás unas latas de cerveza, vino, no lo sé.

Comentaba Amy, hablando por su celular con Odette, mientras que Brian le indicaba a la chica qué decir.

—¿Estas segura? Tendría que preguntarle a los otros chicos si están de acuerdo.

Rápidamente el omega junto a ella nego con la cabeza y manos. Debía ser una sorpresa para todos, asi no podrían negarse ya estando ahí. Pero necesitaban la ayuda de Odette para conseguir el alcohol.

—¡No no! Tranquilo, ya sabes como son ellos, seguro estarán mas que fascinados por tomar, pero que sea una sorpresa.

Por la otra linea se hizo presente un silencio de duda por unos agonizantes segundos para los dos amigos.

—Bien.

Sentenció el mayor.

—Yo te ayudaré. ¡Pero más vale que me pagues de alguna u otra forma por esto!

La mujer dejó escapar una carcajada y asintió para luego colgar. Ya estaba la reunión lista, solo faltaba que el omega se prepare para su momento.

Iban todos a juntarse mañana, luego del ultimo examen de Brian, en la noche, afuera de la U, y de ahí irían a la casa de Odette, donde este tendría preparada toda la reunión.

Entre tanto planear y preparar ya se habia hecho de noche. Amy y Brian prepararon un pequeña cena para comerla mientras veían una película. Luego de esto cada quien fue a su cuarto. Era hora de dormir, mañana sería un largo día para todos.

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—¿Tienes todo listo?

Preguntó Amy, reteniendo al pelimorado en la puerta de su casa.

—Que sí, ya te lo dije.

—¿Qué hay del plan de esta noche?

—Es bastante simple—Refutó cruzando sus brazos y rodando sus ojos. Estaba por hacerse tarde para llegar a su exámen.—Solo debo decírselo cuando esté trastocado y ya.

—¿Y sí te dice que no?

La omega estaba notoriamente preocupada por su menor amigo. No queria que pasé por otra decepción que lo quiebre por dentro.

—Pues, no recordará nada mañana.

Se excusó el más bajo.

—¿Pero tú como estarás?

Brian hizo un pequeño silencio, bajando la mirada.

—Yo.. No lo sé, quizá este bien, quizá no. Pero necesito quitarme este pesar de mi pecho.—Esbozó una calida sonrisa y elevó la mirada, dedicandosela a su amiga.

Ella entendió el mensaje y se hizó a un lado, no sin antes abrazarlo con fuerza, acariciando su espalda.

Cualquiera que viera esa escena creería que el chico se estaba yendo a la guerra y que no volvería en meses. El cariño que se tenian entre ambos era bastante fuerte, y no se molestaban en ocultarlo, preocupándose y cuidándose mutuamente.

Después de todo, ambos sufrieron lo mismo.