—¡Mueve tu inmundo trasero y deja de amenazarme! —gritó Alexandra para hacerse oír sobre el viento y el ruido del helicóptero.
—¡Ya verás! —Fueron las palabras que salieron de Tim Oberto antes de aterrizar.
Una nueva misión, una nueva vida; ese era el lema de Alexandra.
Habían recibido llamadas sobre cosas extrañas que ocurrían en una casa de campo. Todos los vecinos estaban alerta por los extraños ruidos.
El equipo bajó y empezó la verdadera misión: salvar la vida de la mujer regalo que se encontraba en aquel lugar.
La casa tenía el aspecto de una casa de campo normal, donde podría vivir tu abuela pero sólo cuando entraron pudieron encontrar toda la porquería que había dentro. Múltiples cabezas de animales momificadas sobre las paredes, animales disecados y pelaje por todo lado. El hombre era un aficionado a la caza de animales. La misión fue exitosa; una mujer regalo fue encontrada. Era felina.
Al ver a la humana la felina se sintió menos frágil. Un metro sesenta y uno, los 57 kilos de peso, el cabello negro con rulos hasta la cintura, acompañados de los ojos cafés claros llenos de esperanza, la hicieron confiar. "Eres hermosa" esas habían sido las primeras palabras que habían salido de sus labios e iban dirigidas hacia Alexandra.
—¿Cuál es tu nombre? —Alexandra le preguntó, la felina miró a su alrededor con miedo de los hombres.
La mujer no tardó en darse cuenta que aquellos hombres en el helicóptero la estaban aterrorizando, aunque no tenía el sentido del olfato como las Especies, pudo oler el miedo que se regaba por todo el lugar.
—No tengas miedo, yo te protegeré. Ningún hombre te va a tocar si tú no quieres, porque yo misma me encargaré de cortarles las bolas si lo piensan hacer. —Alexandra acunó la cara de la felina y vio sus ojos azules brillantes por las lágrimas que amenazaban con salir—. Creo que eso no importa, te llamaré Azul, ¿Te gusta? —La mujer asintió sin decir nada y Alexandra la abrazó.
Todos los hombres en el helicóptero miraba la escena como si de una película se tratara. Después de unos minutos de vuelo, la mujer humana y la felina bajaron del helicóptero para los chequeos.
~*~
Cuatro meses después...
La alarma del despertador sonó por toda la habitación del departamento mientras Alexandra trataba de apagarla sin abrir los ojos.
—¡Por Dios! ¡Ya! —gritó hasta que la encontró.
La noche anterior fue una pesadilla. Fueron a rescatar a una mujer regalo y los habían emboscado. Cuando pudieron llegar hasta donde estaba la mujer, se dieron cuenta que la mujer no estaba sola; también había un sujeto experimental, eran compañeros y fue difícil lidiar con los dos. Al parecer la pareja de ancianos ricos los utilizaban como canal de porno en vivo, ya que ellos no podían ni mover un músculo sin sentir fatiga.
El hombre casi atacó a Alexandra porque tocó a su compañera, pero ella lo había calmado. "Como en una historia de amor, dominando a la bestia con un simple toque." había dicho Alexandra a Tim que le lanzó un gruñido, ya que el hombre sí había atacado a Tim y a Trey.
—Cada día te pareces más a ellos. —Le dijo por el gruñido.
Volviendo al presente, ya se encontraba en la sala de entrenamientos, era la cuidadora de las mujeres regalo en La Reserva y también una de los integrantes del equipo de rescate de Tim Oberto, ya que los anteriores miembros no habían resultado muy aptos para el trabajo.
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Huffy. Nuevas Especies #1
FanfictionAlexandra es casi considerada una Nueva Especie más. Su forma de comportarse y la lucha, la hace parecer una de ellos. Pero su aspecto de 1,60 cm no le hace mucha justicia. Lo que más le da rabia, a ella, es que consideren a las mujeres humanas frág...