Capítulo 3

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Recapitulemos desde el inicio todo para ir entendiendo las cosas, las cuales están pasando muy rápido en tan poco tiempo:

—Maia, Fátima, un placer— dice una voz grave tras nosotras, al voltear estaban dos chicos.

—Válgame Dios— susurré en español como de costumbre.

—No sé qué significa eso pero, soy Rick — extiende su mano un apuesto chico para nada latino.

Como me dice mi mamá ute no vino pa nueva yol a recoger dominicano, con su pai ya tenemo mucho.

Sonreí al recordar las palabras de mi mamá y acepte su mano embobada pero sentí un codazo en mi espalda.

—Guebo— grité y Maia me da una señal de ojo de que no sea tan fácil.

—¿Qué es guebu? — pregunta el otro chico, lo cual pronuncio mal la palabra.

Suspiré y me adentre a la cafetería por lo cual habíamos venido, conocer al enemigo, por obvio está, Maia y yo habíamos planificado todo como si de un libro se tratase, estábamos preparadas para ganar esos dos mil dólares, no es mucho dinero pero es más de lo que gano los fines de semana en el dunkin donuts entonces me vendría, bueno, nos vendría más que bien un poco de dinero extra.

Nos sentamos en una mesa, frente a frente mientras que un aura totalmente silenciosa–exceptuando las personas a nuestro alrededor– se hizo presente entre nosotros. Una señora nos trajo agua y nos tomó la orden.

Otro silencio se hizo presente después de eso, mierda, ¿Qué tan difícil es hablar? Tomé un poco de mi agua ya que la garganta la tenía vuelta un nudo.

— ¿En qué escuela están? — pregunta Maia.

— Cariño, terminé la escuela hace cuatro años atrás — dice quien vendría siendo Aarón el cual estaba muy bueno pero no deja de mirar a Maia, instintivamente escupí el agua en el vaso nuevamente recordando las palabras de mi mamá– nuevamente–

Pero tampoco me traiga un viejo rabo velde que te lleve casi 10 año, nama quisiera.

Automáticamente mi cara fue de horror.

— NOOO — Grité llamando la atención, la señora que venía con los platos me miró extrañada.

— ¿No quiere lo que ordenó señorita? — ignoré su pregunta y miré hacia la nada.

— Fátima, por Dios, estás creando un escándalo, tranquila, de acuerdo al plan ¿Sí? — me susurra Maia a lo que asiento.

Pero aún así, con tremendo papasote, no puedo ser capaz de pensar, digo, es un chico apuesto, pero si ir cada fin de semana al apartamento a convivir con ellos vendría siendo un problema, suspiré, estoy tan distraída que deje de entender el inglés.

— ahshsjsjsjhshhd hshdhdh — decía Rick — ajsjsjs bien?, — vale, lo acepto, de todo lo que dijo entendí ok.

— ¿Qué? — pregunté.

— Digo, estás muy callada, ¿Estás bien? — asentí para suspirar nuevamente — Bueno, decía, podemos ir hoy a la tarde a conocer el apartamento, Maia me dice que sólo irán los fines de semana, hoy es viernes, mañana pueden ir, sería genial — sonríe mientras hace una expresión extraña.

— Está bien — dije y al instante probé mi comida antes de que se enfriara.

Al terminar de comer Aaron pagó la cuenta y nos dirigimos al apartamento, tuvimos que tomar un taxi puesto que ninguno sabíamos donde quedaba.

Al llegar el lugar vi que era enorme, tenía tres habitaciones, un cuarto de servicio y dos baños, no me quejaría si viviera aquí.

Bien, volviendo a la realidad, en la cual dos chicos me aplastaban sobre el sillón aparece frente a mí, Maia sólo tomo una foto y pronunció mal la palabra queso.

Realmente no se me hacía tan malo, bueno, quizás sí, Pero por lo que veía, los chicos no se sobrepasaron.

Ya llevábamos dos semanas yendo, hoy sería sábado en la noche, habíamos decidido hacer empanadas de cena, ya que era algo típico en mí comerlas, ellos y su pizza me tenían harta, en gringolandia es lo único que se come.

Nos sentamos frente al televisor a ver una película compartida ya que en el único lugar en el que había una televisión era la sala de estar.

— Maia — dice Aaron haciendo que mis ojos vean la escena, vi como sus labios decían bésame mientras Maia con cara de repulsión le arroja una almohada en la cara.

Reí instintivamente, estos chicos eran a la antigua, definitivamente lo eran.

Miré la película nuevamente y vi que nadie había colocado el subtítulo en español, miré a Maia por ayuda y ésta asintió tomando el control.

— Hey, ¿Para qué los subtítulos? todos entendemos la película — Ríe Rick.

— Pues quiero practicar en español — sonríe Maia mirándome.

Le agradecí con la mirada y me acomode en el sofá.

Realmente, sabía inglés, era buena en el idioma, pero tan sólo tengo cinco años aquí y algunas cosas no la domino bien, como las películas, desde que llegue ese primer día en sexto grado, no entendía a nadie, pensé que nunca tendría amigas, entonces Maia se me acercó y me habló, tenía miedo, no sabía cómo responder a lo que me decía todo era tan confuso pero ella dedujo lo que pasaba y escribió en el google translate y puso la voz esa a hablar diciendo no hablas inglés automáticamente creció una amistad, al inicio solo hablábamos por escrito ya que para mí fue más fácil aprender a escribirlo luego ella me ayudaba con las pronunciaciones y aquí estoy, aún dependiendo de ella para algunas cosas.

No tuve más amigas después de ella, algunas paisanas iban y venían pero ninguna como Maia.

Ok, eso sonó muy lésbico.

Miré la película nuevamente pero sentí algo húmedo en mi oído, mire al lado y vi la lengua de Rick entrar en su boca con una sonrisa.

— ¡Eso, eso fue su lengua! — Grité asqueada — ¡Que asco, cerdo!

Me alejé de él y me senté más cerca de Mia quien compartía el sofá con Aaron quien no dejaba de reír, estos chicos son muy inmaduros para estar en esto.

— Parecen vírgenes — reí.

— ¿Quién dijo que no lo somos? — pregunta Aaron lanzándole una mirada coqueta a Maia quien reía al igual que yo.

— Claro, sí, y yo soy mexicana — dice Maia entre risas.

— No, realmente lo somos — Dice de lo más serio Rick.

Maia y yo dejamos de reír y nos miramos con el ceño fruncido.

— ¿Qué? — dijimos al mismo tiempo.

No entendía, si esos chicos son vírgenes, ¿De qué se trataba su trato?

— Lo único es que ... Si ganamos esa apuesta y se acuestan con nosotras, ganaremos ese dinero — se cruza de brazos un muy serio Aaron.

Ya no me interesaba ver Mohana, esto estaba más interesante que la película.


Holaaaa

Gracias por el apoyo que está reviviendo esta historia tan rápido, estamos muy agradecidas por ello, inviten a sus amigos a leer si les gusta

•Priisam•

¡Déjame con mi virginidad! ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora