5. Princesas, bloqueos mentales y propiedades.

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Lee la nota del final. Please.

Capítulo cinco: Princesas, bloqueos mentales y propiedades.

Sabía que él estaba bromeando.

Pero no iba a dejar que ganase si se lo proponía. Ahora me preguntaba, ¿era así con todas las chicas? Tal vez no, ya que es bastante raro rechazar a un tipo como él. ¿También tendría que decirle a dónde iba cuando saliera de casa? Ni siquiera sé cómo sabe trabajar de "niñero", a mis padres nunca les importó.

También me sentí aliviada de que yo no fuera del tipo de hacer fiestas de pijamas en casa.

Cuando traté de dormir esa noche, tuve un bloqueo mental. No respondí a los mensajes de nadie, ni siquiera los mensajes de Dakota. Simplemente, mi mente se centraba en lo que había pasado la noche anterior. Liam y el contacto cercano de su cuerpo al mío, sus bromas, y el haberse enterado de mi "enamoramiento". Era como si tuviera una cierta competencia, ¿no? Bueno, en realidad no, ya que Nathaniel no sabe de mi existencia.

- ¿Por qué no contestaste a mis mensajes? - Eso fue lo primero que me preguntó Dakota cuando me vio caminando hacia mi casillero. No es de extrañar tampoco, siempre contesto a sus mensajes. Ella sabía que si no lo hacía, había una buena razón detrás. - ¿Qué pasó anoche? - Su voz sonaba preocupaba, con un ligero toque de sospecha.

Suspiré mientras cerraba los ojos, mirando ligeramente hacia el suelo. - Muchas cosas. - Comencé, reacia a continuar. Maldito Liam Clark. Él era la persona menos adecuada para que se enterara de algo como eso. - ¿Recuerdas cuando ayer estábamos hablando sobre ya sabes quién? - Le pregunté, y ella asintió con la cabeza ligeramente. Por el aspecto de su expresión facial, tenía una ligera idea de a dónde iba con todo esto. - Bueno, él lo leyó.

Los ojos de Dakota se agrandaron, y jadeó ligeramente. - ¿En serio? - Exclamó. - ¿Lo descubrió?

- Si. - Le respondí en un tono aburrido. - ¿Tengo que volver a explicarte lo que pasó? - A veces cuando estaba de mal humor, usaba mi tono sarcástico, y mis respuestas no era tan bonitas y educadas como las habituales. Pero con toda sinceridad, nunca maldije a nadie. Era difícil, aunque si alguna vez lo hice, entonces es porque esa persona era realmente molesta.

- ¿Y qué hiciste?

- Hice un trato con él. - Le respondí mientras metía dentro del armario la mochila. - Si le ayudo con inglés, entonces no se lo dirá a nadie, pero tengo mis dudas respecto a eso.

- Si necesitas ayuda dímelo, ¿de acuerdo?

Asentí, contenta de poder depender de Dakota cuando necesitase orientación a mis problemas. Habría estado bien si no fuera por culpa de mis padres, era su culpa haber decidido, ridículamente, contratarlo a él como mi nuevo niñero, ¡y más aún teniendo 17 años! En serio, era madura para mi edad, entonces, ¿por qué no era lo suficientemente madura para cuidar de mí misma?

De cualquier manera, tenía la sensación de que algo nuevo iba a pasar hoy.

*  *  *

La campana sonó, avisándonos de que nuestro periodo de dos clases había terminado y de que era hora del almuerzo.

Cuando salí de clase, fui bombardeada por una gran cantidad de estudiantes caminando estrepitosamente por los estrechos pasillos; me molestaba seriamente que la escuela no tuviera pasillos decentes para tanta gente. Y cuando divisé mi casillero; ví a Liam esperándome.

- No trabajaremos en inglés en el almuerzo. - Le dije una vez que estuve frente a él. No mencioné nada de la noche anterior, yo, literalmente, quería olvidar todo lo que había pasado. Así que sacar el tema no ayudaría en nada. - Sólo trabajaremos después de la escuela, además, vamos a vernos todos los días, ¿no? - Me había olvidado de la sensación que se sentía mirar a Liam, se veía tan... guapo desde cualquier ángulo.

Sus labios formaron una sonrisa, y luego se rió. ¿Qué era tan gracioso? - Bueno, sólo quería que me acompañases hoy en el almuerzo. - Dijo, su voz era profunda y notable, y muy atractiva. - Vamos, Johnson, ¿por qué no te sientas conmigo hoy?

- No. - Me negué. No quería involucrarme con él ni con su grupo. Para nada.

- ¿Por favor? - Me susurró al oído inclinándose de manera que su cabeza alcanzaba mi corta estatura; enviando escalofríos por mi columba vertebral. En serio, ¿por qué le gustaba susurrar tanto en mi oído? - ¿Por mí?

Me quedé pensando en ello, vacilante. - Uf, está bien. Sólo por esta vez.

Todo lo que hizo fue sonreír y envolver uno de sus brazos alrededor de mi cuello cuando empezamos a caminar hacia la cafetería. 

- Ahora eres mí Ariel. 

- ¿Mi? - Repetí lo que dijo, arqueando una de las cejas y sonriendo, divertida. - ¿Desde cuándo soy tuya? - Pregunté, aunque era más como una afirmación que una pregunta. - No recuerdo que me hubieras comprado. - Agarré un poco la mano de su brazo que estaba envuelto alrededor de mi cuello, y lo aparté de mí. No me sentía cómoda con él haciendo eso y mucho menos delante de la gente. Podrían sospechar que era otra en la lista de Liam o algo así.

Su sonrisa atractiva e infame apareció de nuevo. - No necesariamente tengo que comprarte para que seas mía. - Respondió, mirando hacia delante; luego me miró. - Simplemente eres mía porque tú eres mi princesa Ariel.

* * *

¡Al fin! Me he tardado mucho, lo siento, prometo que ahora subiré mucho más seguido, ¿vale? Siento mucho haber abandonado la historia por tanto tiempo, bueno, abandonar no, ¿dejar de lado? Sí, suena mucho mejor. Bueno, ya de paso queria decir, DEJAD LOS INSULTOS A UN LADO. Hago lo que puedo. ¿Que creen? ¿Que yo disfruto dejando esto abandonado o algo? No. Pero si me desaparezco es porque no tengo tiempo, ando ocupada, y entended que tengo una vida fuera de todo esto. Odio haceros esperad, soy la primera que se maldice a sí misma. Entiendo que estén cansados de tanto esperar, lo comprendo, pero no hace falta insultar y mucho menos faltar el respeto. De todas formas, no volveré a desaparecer, he conseguido encontrar mi parte "ZEN" y ahora tengo los horarios organizados, por lo tanto no os preocupéis más. 

En fin, ¿qué opináis del capítulo?

Será más interesante dentro de poco, siento que este capítulo haya sido una mierda.

¡DISFRUTAD MUCHO!

El Playboy es mi Niñero, [SP#1] | ✓ editandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora