Cajitas de Cristal

O C T A V O

Las apariencias y las personas siempre son como agua y aceite... O al menos casi siempre, whatever.

Debo de estar loca si estoy considerando seguir a ese desestabilizado mental y una chica con problemas para detectar los niveles de riesgo.

Es lo que pienso antes de poner un pie dentro de la sucia propiedad, llena de maleza en los pasillos de paredes mohosas, con pocas ventanas de vidrios sucios que dejan dar un vistazo difuminado a la calle solitaria. Maven hala del codo para evitar que Ava escape y ella me agarra a mí para que yo también huya.

Encantador.

Empujamos una puerta de madera roída por los años, permitiéndonos vislumbrar el siguiente pasillo que se extiende a nuestra izquierda cual camino embrujado, un lugar oscuro iluminado solo por la tímida luz de luna nos da una bienvenida tenebrosa al final del sendero de mármol. Todo está sucio lleno de polvo y desperdicios, además de ser el escenario perfecto para un asesinato, creo que también sería la clase de espacio que atraería como un imán a las peligrosas bandas delictivas.

O por lo menos desde mi punto de vista, porque Maven está con una sonrisa inquebrantable y Ava mira a los lados impasible pero pálida, lamento si no puedo ser una loca irresponsable como ellos, pero yo estoy crisis. El corazón se me va a salir de un patatús, cautela es algo que he adquirido al paso de los años y no puedo estar tan tutti fruttis ante esta situación.

No cuando esto parece la escenografía del exorcista.

Nos adentramos a la edificación sin mucho preámbulo, Ava avanza a paso decidido con un porte confiado que indica valentía aunque el hecho de que no esté parloteando como siempre ya la delata. Yo por otro lado voy casi colgando de su espalda, sintiendo mis articulaciones temblar mientras miles de pensamientos negativos sobre los diferentes futuros que podrían desarrollarse a continuación se desplazan por mi cabeza con frenesí.

Maven solo se limita a vernos divertido, es un idiota.

Pasando por el pasillo incluso pude ver dentro de una habitación que tenía hileras de camas de madera desgarbadas, en un estado deplorable por los años pero me percato que aún así, ni en sus mejores días pudieron haber sido catres cómodos. Eso me hace caer en cuenta de qué era ese acabado lugar: Un antiguo campo de concentración.

¿Por qué nos traería Maven a un antiguo campo de concentración?

Corrección: ¿Qué clase de peligro se esconden aquí? ¡Oh dios mío!, ¡podría haber un fantasma metido en cualquier lado! ¿y si toma posesión de mi cuerpo?, ¡¿y si toma posesión del cuerpo de Ava o Maven?!

¡Oh no! Entonces tendría que correr para poder escapar de ellos, me encontraría con una tribu de gente que vive aquí sobreviviendo escondidos del fantasma, después me uniría a ellos para vivir como fugitiva por un tiempo hasta que finalmente descubra el secreto de cómo derrotar a Ava por casualidad, y luego entienda que no hay otra opción que pueda salvar la vida de Ava mas que matarla, y que sólo podré derrotarla encajándole un tampón en el trasero para que no pueda ir al baño más nunca y muera asfixiada en su excremento.

¡Auxilio!

Cruzamos una esquina encontrando otra puerta de madera que se encontraba en empeores condiciones que la de afuera, de hecho no puedo creer que el chico haya osado a tocarla con lo mohosa que está. Pero ese es el menor de mis problemas cuando estoy al borde una crisis de nervios por mis temores fantasmagóricos, así que la verdad, no presto ni la más mínima atención.

Pero quedo atónita en cuanto las puertas se desplazan me dejan ver y escuchar lo que aguarda ansioso detrás de ella.

Son tantas personas en un salón tan grande como un gimnasio, que tiene ventanales en lo alto de sus paredes permitiendo a la luz lunar llenar cada espacio de su estructura junto a las velas encendidas en cada rincón, es impresionante como tantas personas se reúnen para crear música, puedo ver los grupos desperdigados por todo el lugar que entonan diferentes temas, hay grupos que bailan al mismo tiempo en que cantan. Otros solo cantan letras que jamás en mi vida había escuchado, y algunos eran conformados por músicos con todo tipo de instrumentos. Nadie se está callado en este lugar.