Sin Voz. || V.B || ✔

17.🖤

Listo llegamos. Diablos, ¿¡Yo!? ¡Vegeta Ouji! ¿¡Nervioso por qué estoy solo con ella en este lago!?
Ya pues, me calmo. Suspiró y me estacionó a unos metros del lago de agua cristalina. Veo como ella esta emocionada observando cada rincón del lago, con una sonrisa me bajó del auto, dirigiéndome a abrir la puerta de su lado. Puedo ver que su rostro esta brillando de emoción. Tal vez nunca a venido aún lugar así, pero, solo es un bosque negro con un lago tenebroso en mi opinión, admito que se ve... ¿Tierna? Sí...

—Oye niña, bájate, no solo vinimos a observar —Comentó con burla a lo que ella sonríe para luego sacarme la lengua, y después asiente. Se baja del auto, y me hace una seña, la cual se que significa, "¿Qué vamos a hacer?"

—Te traje para que nademos, nos divirtamos, relajemos, y hablaremos sobre algo muy importante, niña —Mierda, no quiero decir nada vergonzoso.

Ella asiente, y me señala sumamente emocionada para que nos dirijamos al lago. Comencé a caminar con ella a mí lado, desde hace tiempo he pensado esto, ella es diferente, ha tenido problemas, ha sufrido mucho, y la verdad no entiendo como esos insectos la humillaron así, solo por ser inteligente, hermosa... ¡JODER! ¿¡Como fue capaz ese estupido de violarla!? Ni yo mismo me explico eso, es un condenado hijo de perra, OJALÁ ESTE MUERTO.

Cuando volví al mundo normal, a mi gran realidad por así decirlo, la vi observando el lago con ilusión. Suelto una risa leve y me acercó a ella, posandome a su lado. El viento sopla entre nosotros.

Doy unos pasos hacia atrás, posandome atrás suyo. La tomó lentamente de la cintura, al momento que veo como su piel se eriza mientras ella tiembla a mí tacto. Siento rápidamente su olor golpear mis fosas nazales, aspiro su alma. Su cabello se mueve ante la brisa. Joder, ella es hermosa, y creó que... Me gusta, me encanta, quiero besarla, quiero que sea mía, completamente mía. No puedo evitar esto y la giró con fuerza haciéndola chocar con mí pecho al momento que sus hermosos ojos se clavan con los mios.

—Cuando te conocí, hiciste algo, algo que me atrajo a ti, no sé que es madre es, pero, me tienes embrujado, completamente idiotizado— Tomé su cuello con mí mano, juntandonos, sintiéndola- Tenía que protegerte, día a día moviste algo de mi que me hizo cambiar. Yo soy un hijo de puta, pero contigo es tan... Argh... Difícil serlo —Mis manos bajaron a su cintura nuevamente, atrayendola lentamente hacía mí. Sus manos se posaron en mi pecho, solo me veía a los ojos, ansiosa —Me tienes loco, tú y tu jodida pero hermosa sonrisa, tú y tus ojos que son jodidamente brillantes, tú y tu actitud tan tierna y agresiva cuando quieres ¿Creés qué me importa un carajo qué no tengas voz? Me vale una mierda, porqué sé que la recuperarás, yo lo sé, porqué no te dejaré sola, sabes bien que no soy como esas sabandijas. Todo lo que te digo, es completamente verdad — Sus ojos estaban llenos de lágrimas, podía ver emoción en ellos. He aguantado mucho, demasiado, ya no lo puedo controlar, sin previó aviso por fin, la besó.

Diablos, ésto sí que se siente bien, lo mejor de todo es que me correspondió cómo tanto lo deseaba. La acerqué más a mí sintiendo su cuerpo. Sus manos rodearon mi cuello, jalando levemente mí cabello. Después de unos minutos, ella se despegó sumamente sonrojada para luego, en un acto romántico junto nuestras frentes.

—Te amo, Vegeta, por favor, no me abandones — Mis ojos se abrieron de par en par. Dios, no lo soñé, esto es real, esto acaba de pasar, ella acaba hablar. Joder, que voz tan hermosa tiene. Es suave, tierna... Me encanta.

Continuará...