Cartas de Corrientes psicológicas

Inicios

Walther, Grecia siglo XVI a. C.

Para mi hermosa Abuela Martha.

Hola Abuela, han pasado tres semanas desde tu muerte. Me afecto demasiado, tú eras la única que me escuchaba y me entendía, eras la única que me consolaba. En estos momentos estoy intentando salir adelante, no me mal interpretes, claro que te extraño, claro que el dolor sigue, pero debo continuar con mi vida.

Debo contarte que parte de continuar con mi vida, estoy en búsqueda de mi destino, en búsqueda de lo que haré conmigo.

Me rechazaron para ir a defender a Grecia de la guerra, me rechazaron como soldado porque mi cuerpo es pequeño ¿Lo recuerdas? Recuerdas cuando me decías "Mi niño de hilo". Gracias a eso, tuve que darme la tarea de descubrir que hacer en este mundo. En Grecia hay mucho por hacer, pero nada me llena Abuela. A veces creía que tú me conocías mejor de lo que yo mismo, como me gustaría que estuvieras aquí para guiarme.

Mi madre al ver mi estado de pereza, como ella lo interpreta, me quiere mandar a ser alumno de Aristóteles. Un gran filósofo de Grecia. Por primera vez en mucho tiempo abuela, coincidí en algo con mi madre, me llama mucho la atención eso de la filosofía. Me gusta que la filosofía estudie los actos humanos, la mente, el alma, esa esencia de saber más y más me atrae...

Siéndote sincero abuela, me gusta la filosofía, me encanta que para explicar los actos humanos utilicen la orientación naturalista, la biológica, matemática y ecléctica. Me gusta, pero ¿Crees que en un futuro la filosofía ayude de algo? Entiendo que los seres humanos tenemos la necesidad de saber el porqué de las cosas, pero algún día ¿Esto podría ayudar a las personas? Mi pregunta es en el sentido emocional, estudiar el alma ¿Podrá ayudar a evitar tristezas? Los descubrimientos tardan años de investigación, espero en un futuro abuela la filosofía, el estudio de la mente y el alma, pueda ayudar a que las personas no se sientan tan mal consigo mismos.

Quisiera que alguien me ayudara a mí a controlar este vacío que tú me dejaste Abuela. Te prometo que daré lo mejor de mi en mis estudios. Te prometo darle un cambio al mundo Abuela, por ti y para ti.

Te amo, aunque no te pueda ver, pero te puedo sentir. Sé que desde el cielo me cuidas.

Con todo su amor. Tu nieto, Walther.