Alan.

CUATRO

Fernando:

Camina a su lado, sobre la vereda, alejándose poco a poco de aquel estresante Starbucks. La mira y no puede evitar enamorarse más de ella. De su forma de ser, de su cuerpo, su rostro, sus ojos, sus pestañasas, sus labios carnosos por los cual él, y solo él, daría cualquier cosa en este puto mundo por probarlos.

-¿Te salieron los ejercicios?- pregunta y le sonríe
-¡Claro! si hasta le tendré que enseñar al cerebrito de mi clase
-¿Cómo? ¿De qué hablas?- pregunta arqueando las cejas
-Eso, que le enseñare a Alan a mover el lapicero- y sonríe

¿Alan? ¿El chico que atendió hace unos minutos? Claro, debe ser el si no, ¿Quién más? Estaban hablando esos dos cuando termino su turno y fue a avisarle a Sofía.

-¿Alan?- pregunta sin mostrar mucho interés
-Sí- asiente Sofía con la cabeza- es el chico con el que estaba hablando allí- y señala el Starbucks

¡Ecole! Así que era él.

-Bueno maestra, ¿Qué le parece si me enseña a comer un cono de helado allí?- y señala el M'c donald que está al frente de nosotros.
-Bueno, bueno- y se agarra la barbilla- yo prefiero un sundae de manjar ¿Qué le parece, alumno mío?
-De acuerdo- y le sonríe

Entran a M'c donald, los atiende una señorita muy guapa.

-Buenas tardes. Bienvenidos a M'cdonalds ¿Cuál sería su pedido?
-2 sundae de manjar- dicen al mismo tiempo y sueltan una pequeña carcajada.

Hasta de su risa está enamorado. ¿Eso es normal? Dicen que es cosa de tontos enamorarse, tener sentimientos, amar hoy, solo es cosa de un juego, ya nadie se promete más allá del tiempo, ya nadie cree en lo eterno, lo suyo con Sofía será eterno, aunque solo sean amigos, el sabe que en algún momento ella le llegara a amar como él la ama.

Les entregan los helados y escogen una mesa. Se sientan junto a la mesa de una pareja de ancianos con sus nietos brincando por todos lados.
Eso es eterno, amar a la misma persona siempre, hasta que tus huesos se conviertan en cenizas y tu corazón deje de latir. Fernando observa a ese anciano que toma la mano de su amada y la besa. La anciana sonríe y posa sus labios sobre los de él.

-A que no sabes hacer esto- dice mientras se atraganta todo el helado de porrazo- ¡Mierda! Mi cerebro... inténtalo tú- dice y sonríe picara
-Está bien- digo no muy convencido

Cojo el vaso de sundae y en dos cucharadas me lo acabo, logrando congelar las pocas neuronas que me quedan

-¡Uff! Pensé que no lo harías- dice y da una carcajada al mirar mi rostro
-Eres...
-Increíble- dice interrumpiéndolo
-Ya- digo sobándome la cabeza
-¡Venga, Fer! No te vayas a resentir- le agarra los cachetes y se los besa
-Hacen una linda pareja- se escucha una voz que interrumpe el apapacho de Sofía
-¿perdón?- dicen al mismo tiempo, pero esta vez solo ríe Sofía
-Eso, que hacen una linda pareja- dice el anciano mientras sonríe con la poca dentadura que le queda
-No señor, vera...
-No seas modesto- dice interrumpiéndolo
-Solo somos amigos- añade ella
-Sí- asiente con la cabeza y trata de poner una sonrisa que no rebele el gran dolor que siente. "Solo somos amigos" es como una frase de alguna canción barata que no puede soportar. "solo somos amigos" esa frase que ronda la cabeza de Fernando. ¿Por qué solo son amigos? El quiere ser su amado y no solo su pañuelo de lágrimas de amores perdidos. Piensa en aquella canción que le hace recordar a Sofía "Yo quisiera ser tu llanto ese que viene de tus sentimientos, yo quisiera ser ese por quien tu despertaras ilusionada, yo quisiera que vivieras, de mí siempre enamorada" Sí, eso es lo que Fernando quería. Que Sofía lo ame con toda su alma, como él la ama a ella, la ama tanto, que hasta amarla le duele.

El friendzoneado en multimedia, nuse, se ve rico v: