| 011 |

122 11 2
                                    

R:

—Rossy ¿Qué haces por aquí tan tarde?—Me pregunta Stefany rodeándome el cuello con sus brazos, acercándome a ella.

Bostezo.
Y me sobo los ojos.

—Mhm...¿Tienes sueño?—Ladeo la cabeza.—Yo se que hay algo que puedo hacer para que te entretengas.—Pasa sus manos por mis abdominales.—Yo te puedo dar lo que necesitas.—Acerca sus labios hacia mi cuello. Ella gime.—Será mejor que vallamos a un lugar privado.

Toma mi mano y me guía hacia una habitación no muy lejos de aquí.

Me lanza a la cama.
Desabotona su blusa y se sienta sobre mí.

—Hace mucho que no te tenía así para mí.—Besa mi cuello.—Te estaba empezando a extrañar.

✦✦✦

Abro los ojos costosamente.

Mierda.
¿Dónde demonios estoy?
¿Qué pasó?

Giro mi cabeza hacia la derecha.
Ay no.

No otra vez.
Paso mis manos por mi rostro.

—Maldición...—Murmuro con frustración.

—Rossy, bebé. Por fin despiertas, son las 11:50 am; al parecer disfrutaste mucho lo que pasó ayer.—Sonríe con picardía. Frunzo el ceño confundido ¿De qué habla?—No me digas que no te acuerdas lo que hicimos.

Niego con la cabeza.

—No lo recuerdo.—Digo.

Stefany ríe con ironía

—¿Quieres que te lo haga recordar?—Pregunta acercándose a mí.

La tomo de las muñecas y la alejo de mí.

—¿Qué te pasa, Ross?—Pregunta Stefany.

Bufo y busco mis jeans.

—Ayer no estabas así.—Agrega volviéndose a acercar a mí.

—Lo único que recuerdo es que estaba ebrio.—Paso las manos por mi cabello.—Cerré los ojos, los abrí y de pronto aparecí aquí.

Stefany niega con la cabeza.

—Ross, ayer...

—No me digas nada, no quiero saber lo qué pasó ayer, has como si no hubiese ocurrido nada.—La interrumpo colocándome mi camiseta.

—Pero Ross...

—No tengo tiempo para escucharte, adiós.—Digo y salgo de esa habitación.

Camino rápidamente para salir de esta Discoteca.

Unos minutos después salgo de la Discoteca, busco mi auto y lo enciendo lo más rápido posible.

Enciendo mi móvil y llamo a Ryland.
Después de tres timbradas contesta.

—¿Hola?

—Ryland, necesito que hagas algo por mí. Ve a mi habitación y saca mi maleta que esta en mi armario; llegaré en unos minutos.—Digo.

—De acuerdo, pero no es recomendable que vengas ahora; papá y mamá están discutiendo en la sala principal, llevan 30 minutos haciéndolo.—Me dice Ryland.

—No importa; llego en unos minutos, me das mi maleta y me voy.—Digo.

Escucho un suspiro por parte de él.

—Bien, espero que no hagas ninguna tontería.

—Gracias.—Digo y finalizo la llamada.

✦✦✦

—No creo que debas subir.—Me dice Ryland dándome mi maleta.

Frunzo el ceño.

—Rydel trajo a _____, están en la habitación de Rydel.

Mi corazón se agita.
_____...

Debo pedirle perdón.
No debí gritarle por motivos personales.

_____ no tiene la culpa de que mamá y papá se quieran divorciar.

—Has lo correcto, Ross.—Me anima Ryland.

Asiento y subo las escaleras.
Camino sin hacer ruido.

Coloco mi mano derecha en la manija de la puerta de la habitación de Rydel para abrirla, pero no lo hago al escuchar unos sollozos por parte de _____.

Escucharla llorar me rompe el corazón.

¿Cómo pude ser capaz de gritarle?
¿Qué me pasó? Yo jamás le había gritado a alguien.
¿Por qué tuve que beber un poco antes de gritarle a _____?

Me siento sobre el suelo; volviéndome a sentir culpable por todo lo que está pasado.

Que puedo decir; no estoy pasando por el mejor momento de mi vida; mis padres se divorciarán y probablemente _____ no quiera perdonarme.

Coloco mi oído en la puerta para poder escuchar lo que hablan.

—Tienes que estar tranquila; esto no te hace bien.—Dice Rydel.

_____ vuelve a sollozar.

—¿Crees que si se lo diga se enoje?—Pregunta _____.

—_____, estoy segura que él te apoyará, él te sigue queriendo. Debes decírselo, es lo correcto. No se lo puedes ocultar.—Dice Rydel.

—No puedo hacerme cargo de esto...

—Ambos lo harán, tú tranquila; yo hablaré con él y haré que se disculpe.—Dice Rydel.

Y con esas palabras se que esta hablando de mí.

—Gracias, Rydel.

—¿Hace cuánto te enteraste de eso?—Pregunta Rydel.

—Ayer.—Responde _____.

Me levanto del suelo dispuesto a abrir la puerta.

Vuelvo a colocar mi mano sobre la manija de la puerta y la giro.
Abro la puerta y veo a _____ con Rydel en su cama.

—Ross, no es buen momento.—Me dice Rydel.

—_____, perdóname, por favor, preciosa. No sé que me pasó; estuvo muy mal haberte gritado de esa manera, por favor perdóname.—Digo con lágrimas en los ojos.

Su mirada se conecta con la mía.

—Los dejaré solos, vengo en unos minutos.—Mira a _____.—Deberías decírselo.—_____ asiente.—No hagas nada estúpido, Ross.—Dice Rydel.

One Last Time ➸ Ross Lynch Donde viven las historias. Descúbrelo ahora