Epílogo

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-Por favor, chicas, no griten tanto.- me quejé tapándome los ojos con la almohada. Se me partía la cabeza en dos de tanto haber tomado anoche.

-No señorita, usted tiene que levantarse, bañarse y vestirse- la voz de Leigh apareció.

-Sí, apresúrate ya son las once de la mañana- Jade habló.

-¡¿Qué?!- me levanté de golpe. Cayendo de bruces al suelo.

Todas largaron unas carcajadas.

Las miré con enojo.

Busqué mi celular y apenas eran las ocho de la mañana.

-Que mentirosas...- les gruñí.

-Si no te apresuras llegaremos tarde a la fiesta civil.

-¿No puedo quedarme un poco más?

-¡No!-gritaron al unísono.

-Bueno,esta bien.

-Está bien nada.- Jesy me sacudió – hoy es tu boda- suspiré divagando en mis recuerdos más profundos.

Hoy iba a casarme con Zayn, luego de cuatro años de una relación estable y feliz, por fín iba a casarme...

Sonreí.

Anoche había sido mi despedida de soltera, recordé la fiesta que me habían hecho las chicas y recordé también a los strippers...

Me sentí avergonzada por lo que viví anoche. Pero bueno, no fue nada del otro mundo.

Toda aquella fiesta había terminado a las dos y media de la mañana ya que hoy a las nueve tenía turno al civil... ¡Civil!

Debía apurarme y bañarme.

-Voy a bañarme- les dije a las chicas. Todas asintieron. Ellas ya estaban vestidas con un vestido colores pasteles, suaves y lindos, que hacían resaltar sus curvas.

Claro... ellas eran mis damas de honor.

Jesy llevaba un color rosa pálido, Jade verde pastel y Leigh violeta claro, casi blanco.

Fueron diseñados exclusivamente para ellas.

El vestido era corto, ya que estábamos en verano y eran las vacaciones de dicha época. Mi cumpleaños había pasado hace una semana, había cumplido veintiséis años. Estaba tan feliz en estos momentos.

Una vez que me bañé, salí hacia afuera del cuarto, miré la habitación ya estaba acomodada.

Sobre la cama se encontraba un vestido blanco de seda, era largo.

Tenía tirantes y tenía unos cuantos detalles con pequeñas flores blancas en todo el busto, corte corazón.

-Las chicas estaban acomodando todo. Sacaron una caja grande, en donde había unas sandalias plateadas y bajas para la ocasión. Con taco fino.

Sacaron varias cajitas, en donde estaban algunas joyas pequeñas para ponerme.

-No saquen tanto chicas, es sólo el civil.

-Lo sabemos, pero ya hemos dicho que es lo que irá con ese vestido en el civil.- Leigh habló y abrió la cajita. –Es bellísimo.

Me ayudaron a colocarme el vestido, junto con los tacones, los aretes y el collar.

-Estás espléndida Pezz- me dijo Doniya entrando al lugar.

-Gracias mi amor- le dije con dulzura.

-Ahora sólo falta el maquillaje y el peinado.- dijo Jesy.- Mandy está fuera, esperando que terminemos de vestirte.

Sólo asentí.

-Debes sentarte allí- me dirigí a la silla que se encontraba en frente del gran escritorio con el espejo.

Cuando menos me descuidé estaba en el civil.

Una vez que fue todo legal, nos fuimos todos, íbamos a pasar la boda por iglesia como me gustaba.

Una boda al aire libre en casa de Zayn, con muchos invitados familiares y amigos, con flores y un arco para ir a su lado.

Estaba entrando de la mano de mi padre. Quien me decía unas cuántas cosas y barbaridades haciéndome reir nerviosa.

Mi vestido era de tamaño mediano, con vuelos y corte corazón, era blanco y con detalles de perlas y algunas flores, tenía mi cabello recogido y una tiara.

Zayn tenía puesto un traje espléndido. Estaba impresionante.

Sonreí.

Zayn me miraba con ternura y yo a él.

-¿Acepta a Perrie Louise Edwards para amarla y respetarla hasta que la muerte los separe?-Era el sacerdote haciendo los votos matrimoniales.

-Acepto.

-¿Acepta a Zayn Javad Malik para amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe?.

-Acepto.

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Te Arrepentirás, MalikDonde viven las historias. Descúbrelo ahora