Ambos estudiamos en un colegio que se especializa en la materia química y hay muchas personas que se preguntan qué hacemos aquí si tanto amor le tenemos a la música. Yo realmente no lo sé, pero como me gusta terminar lo que empiezo no dejaré de estudiar ahí hasta que me gradúe, cueste lo que cueste. Cabe mencionar también que no tengo tanta experiencia con el baile y no sé si tendría el éxito que yo esperaría. En cambio tú tienes un talento que se huele hasta Corea, pero supongo que también tendrás tus razones.
Un día de otoño mi profesora de una de las diversas químicas que tenemos este año vino contenta pero muy atareada, con muchos papeles y demás. Pero resulta que no eran exámenes, eran folletos para un taller de música, cosa que era una gran novedad ya que nunca se había hecho algo así.
Al principio no quería ir, me cuesta mucho integrarme y no sentía que pudiera llegar a pertenecer a ese grupo. Pero cuando ya estaban cerrando las audiciones para entrar una amiga me convenció. No recuerdo con claridad cómo fue que lo hizo, pero lo logró.
Toda la vida voy a estar agradecida con ella, me abrió tantos caminos que ni imaginaba que existían.
El día de la audición estaba muy nerviosa, ya que no había personas para la audición de baile, era la única. Todos audicionaban para cantar mientras yo quería salir corriendo ya que todos tenían un gran talento y me sentía muy fuera de lugar.
Había un chico que no dejaba de tocar la guitarra sentado en la mesa de un pupitre, y tengo que admitir que me sorprendí mucho porque no había escuchado una melodía como esa en mucho tiempo. Ese eras tú con tu guitarra tocando en una realidad que yo no conocía pero que algún día me hubiese gustado visitar.
Apenas te escuché hablar sentí que eras uno de esos chicos egocéntricos que solo buscan la fama. No debería haberte prejuzgado así pero fue lo primero que se me ocurrió al verte.
Pasaban los días y cada vez me sentía más en casa, me sentía como un perro de la calle, el cual había pasado tantas cosas y tenía miedo de dar siquiera un paso, al que rescataban, adoptaban y curaban. Sentía que todas mis heridas estaban sanando más rápidamente.
Nos anunciaron que la primera vez que nos mostraríamos en público frente a todos los alumnos y profesores de la escuela sería en el acto que se haría pasadas dos semanas desde ese entonces. Luego de eso el tiempo se pasó muy rápido, los nervios crecían y mi odio por tí florecía. No tengo una razón para tanta negatividad, simplemente sentía que no eras una persona de fiar.
Faltaban unos tres días para el evento y casi no habíamos practicado la coreografía ni la canción, así que tú y yo nos juntamos con el grupo de baile en la escuela donde todo comenzó y repasamos todo. No sé si tú recordarás aquella noche luego de tanto tiempo, pero te aseguro que fue una de las mejores para mí.
Esa noche fue cuando tu música me daba la felicidad que necesitaba para bailar, tu voz marcaba mis pasos y sentía que eras mi momento de silencio en este mundo que hace demasiado ruido.
Yo creo que ese fue el momento exacto en el que cada célula de mí dejó de odiarte para quererte, quererte de una manera tan extraña que ni siquiera la ciencia que nos aprisiona podría comprender.
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Musical Chemistry
Short StoryNo sé cómo terminé aquí, sentada en el balcón mirando hacia las estrellas mientras pienso en ti. Eres mi inspiración, cada canción que tocas, cada gesto que haces, cada mirada, cada palabra que sale de tu boca se me incrusta a la mente y no pue...