Capítulo 13

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El menor gemía más al tiempo que era estimulado y temblaba  entero palpando con detenimiento lo que el otro le indicaba que tenía que tocar; su cara se encendía a un nivel casi imposible y lleno de nervios sus dedos comenzaban a delinear la virilidad del mayor aun dentro del bóxer y recién activándose, tragaba saliva notando el tamaño y el calor, eso era muy malo para su corazón que se disparaba.

Seok Jin suspiraba sintiendo los pequeños y tímidos dedos pasarse por la tela, ya que eso representaba perfectamente cuanto podía corromper al menor. Emocionado por el tacto aceleraba la velocidad de vibración de la vara, pero manteniendo el ritmo de su mano, entonces lo que hacía era dejar la mano pequeña acariciándole para llevar la suya más grande a acariciar los discretos labios rosado, para después meter sus dedos en la boca pequeña, e imaginar cosas que lo hacían excitarse aún más rápido.

Con el aumento de vibración también aumentaba la excitación del más joven y sus gemidos, aunque estos eran cubiertos en parte por los dedos que hurgaban su boca; Jungkook los recibía de buena manera, acariciándolos con su caliente lengua y empapándolos solo por hacerles algo. Su mano derecha seguía palpando aquel bulto en la entrepierna ajena que crecía de provocativa manera, y su mano libre apretaba la tela del cubrecama entre sus dedos. Habiendo manoseado, y apretado, a gusto por encima de la ropa interior, armándose de coraje metía su mano dentro de  la prenda para liberar el miembro que iba en proceso de convertirse en una firme erección; ajustaba su palma y sus dedos tomándolo con seguridad, mordisqueaba los dedos ajenos y su garganta seguía produciendo sonidos pornográficos. Eran tantas sensaciones juntas que se acrecentaban al no poder ver hasta el punto de hacerlo estremecer, su erección ya estaba humedecida, y él ya tenía demasiado calor.

El rubio aceleraba un poco más la masturbación, al notar que las pequeñas convulsiones de placer en el otro cuerpo iban aumentando, era una vista realmente perversa la que tenía desde su posición; el chico vestido como una chica atrevida pero inocente, invalido de la vista y con un vibrador entre sus piernas que tocaba su miembro cada vez con menos pena, mientras jugaba con sus labios, sonrojado hasta la obscenidad. Incluso las palabras no le salían por el golpe de calor que le obstruía la garganta. Este apretaba las piernas removiendo un poco el objeto en su interior que lo hacía quejarse continuamente, gracias a los dedos en su boca la saliva escurría por su barbilla sin poder evitarlo dándole un aspecto más provocativo aun. Su mano seguía tocando el miembro ajeno que ya era una bien formada erección como la propia que estaba a punto de culminar.

La mano pequeña acariciando su miembro ya le era insuficiente y en un nuevo arranque de lujuria sus dedos abandonaban la cavidad, acariciaba su mejilla, acercándose un poco más, y jalando al otro también del brazo lo atraía hacia sí, hasta que el pequeño y fino rostro quedaba justo frente a su erección, y acercaba sus labios rosados a esta, le comían las ganas de que el menor le devolviera el favor que una vez él le había hecho, con su pequeña lengua caliente.

-Solo abre tu boca... -ordeno el adulto, sentía su respiración soberanamente caliente.

Sin poder ver y sintiéndose mucho más cerca del rubio obedecía su indicación abriendo su boca, su excitación seguía a tope y por la vibración seguía quejándose; de inmediato sentía frotándose contra sus labios y la punta de su lengua, lo que reconocía como el hinchado glande ajeno, casi le daba un infarto y se alejaba un poco sumamente nervioso, su rostro se ponía más rojo que nunca y decía dudoso:

-Lo siento, nunca he hecho eso antes...- se sentía inseguro, pero con ansias de intentarlo, pero tener los ojos cubiertos no ayudaba - Seok Jin...- se quitaba el antifaz para mirar avergonzado pero seguro al rubio mientras se acomodaba entre las piernas de este queriéndose concentrar en "aquello" -enséñame a hacerlo.

Delicado Amante (Jinkook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora