El secreto de los merodeadores

Remus

Suspiró de felicidad cuando atravesó la entrada al comedor del castillo.

Haberlo visto desierto durante dos  días hacia crecer sus nervios, pues sabía que un río de estudiantes entraría pronto para la selección de casas, (en la que el también iba a  participar) y la bienvenida al nuevo año escolar.

Estaba  esperando en el corredor junto a la mesa de profesores que ya estaba llena.

El joven guarda bosques, al que Remus ya conocía, trajo a los de primer año en una fila cuando el resto de la escuela ya estaba en sus mesas, según la casa correspondiente y le hizo una seña a Remus para que se acercara hasta la linea de estudiantes nuevos.

- Bien Remus, empieza tu - indicó señalando la silla junto al sombrero seleccionador.

Temblando de pies a cabeza Remus fue hasta aquella silla y se sentó, una profesora  dijo su nombre completo en voz alta, luego ella tomó el sombrero y antes de siquiera tocar la cabeza de Remus este gritó :

- GRYFFINDOOR!!

Toda la mesa de gryffindor estalló en aplausos y el fue a sentarse con ellos, jamás se había sentido tan  acogido y felíz como en ese momento, cuando todos lo miraban sonrrientes aplaudiendo y palmeando afectuosamente sus hombros.

Luego del banquete las clases empezaron de forma natural.

Remus no habló con nadie  en su dormitorio, ni siquiera con aquellos que se sientan junto a el o son sus compañeros en clases, salvo lo más necesario, y sin mirar a la cara a nadie.

La segunda semana de clases empezaba y hoy daban sus clases favoritas: defensa contra las artes oscuras, transfiguración  y pociones.

Esta poniendo mucha mas atención en esa ultima esperando a encontrar algo que pueda ayudarlo con su "problema"

Debido a su "condición", sabía que debía esforzarse más que un alumno promedio y eso lo convirtió en el "Nerd" del curso desde el primer día.

Tenía muchas cosas en la cabeza, vivía en la biblioteca, ya que tenía que Adelantartar las tareas para los días en los que debía faltar y siempre subía a la torre de astronomía para corregir su calendario lunar, hacerlo más preciso.

Siempre debía tener en cuenta las fechas y mantenerse lejos de todos...

Claro que esto lo estresaba y le ponía triste, por que en el fondo, quería hacer amigos y despreocuparse de las tareas.

Pero el sabía que era un peligro para el resto de las personas y solía escribir las razones por las cuales no debía cambiar eso en su agenda 

Su sueño era llegar a convertirse en Auror, o en profesor y para alcanzarlo debía acabar sus estudios en Hogwarts, sin importar lo solo que se sentía.