306. El ascenso

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Puto conejo, ayúdame. Una y otra vez, tres palabras que no dejan de repetirse en mi cabeza. Puto conejo, ayúdame.

Llevo unos cinco minutos intentando desollar un conejo bajo la atenta mirada de Osha, quien se muestra abiertamente divertida con mis intentos fallidos de quitarle la piel al animal.

-Así no se desuella un conejo.

-Sé desollar un conejo -replico, totalmente concentrada en mi trabajo.

-No lo parece -dice la salvaje. Tiene un cuchillo en la mano que clava con precisión en el suelo; a continuación decide seguir molestándome cogiendo un conejo del montón. De una sola, pequeña, tajada le quita toda la piel al animal para después arrancarle la cabeza de cuajo.

-Quien se cria al Norte del Muro aprende a preparar bien la caza -dice como si nada mientras atraviesa al conejo con el palo que pondremos encima del fuego. Dioses, la quiero matar. Y sigo sin terminar de desollar a este bicho... puto conejo, ayúdame.

-No he visto caza hasta llegar aquí -digo con retintín.

-Con un arco, habría cazado una docena de conejos.

-Este arco -señalo mi arma con la cabeza- me lo hice yo-. Supongo que eso no lo aprendéis al Norte del Muro.

-Aprendemos a usar los puños -responde Osha desafiante.

-Oh, ¿matarás conejos a puñetazos? -no puedo evitar sonreír suficientemente. Por su mirada, sé que he llegado donde quería.

-Pensaba en otra cosa.

-Pues Otra Cosa está aquí mismo -digo dejando el conejo, por fin, pelado.

-Veo que se os da muy bien desollar conejos a las dos -irrumpe Bran con un tono enfadado. Enseguida Osha y yo cogemos otro conejo.

-A algunas se nos da mejor -suelta la salvaje mientras clava otro palo.

Esto me está empezando a fastidiar mucho, no puedo creer que Osha sea tan injusta conmigo. Sí, la amenacé con un cuchillo, pero no sabía qué relación tenía con el Stark.

-Algunas deberían decir "gracias" cuando alguien les caza el desayuno. ¿O no os enseñan a dar las gracias al Norte del Muro?

-Tienes una bocaza muy grande -suelta mientras empieza a levantarse- y demasiados dientes.

Me levanto instintivamente mientras el gigante Hodor se despierta y Bran nos grita que paremos de pelear; pero esto no es suficiente para la mujer.

-Aquí la damita es tan estirada que es para maravillarse que le lleguen los pies al suelo.

Antes de poder responder, para mi sorpresa, Bran Stark me defiende.

-Eres desagradable con ella a diario. Es normal que te responda.

-¿Yo? -pregunta Osha señalándose a si misma- ¿Es mi culpa? La primera vez que la vi me puso un cuchillo en el cuello.

-La primera vez que te vi me atacaste con un cuchillo -exclama el niño y la aludida suspira para comenzar a mirar al suelo-. Tenéis que dejar de pelearos o jamás llegaremos al Muro... Quiero que hagáis las paces -sentencia.

Evidentemente acabadas, ambas nos sentamos en el suelo otra vez. Yo suspiro, tengo que aceptar que ahora somos un equipo con un objetivo común. Si no podemos confiar entre nosotros significa que ya no podríamos confiar en nadie más.

-Pelas los conejos más deprisa que yo -susurro.

-Eso ya lo sabía -responde rápidamente la salvaje.

Bran la reprende por su falta de consideración. Creo que podría acostumbrarme a esto.

-Eres buena cazadora -dice Osha finalmente.

-Gracias. ¿Ves? No es tan difícil. "¡Gracias!"

Ella me mira por el rabillo del ojo y me advierte que no la pique. No me da tiempo a responder pues mi hermano empieza a hacer ruidos extraños y a tambalearse arriba y abajo. Me levanto lo más rápido que puedo y le pongo una correa en la boca para que no se muerda la lengua. Estoy aquí contigo, susurro. Rickon y Hodor se levantan, alarmados. A continuación lo hace Osha. Tanto ellos como Bran miran a Jojen con el rostro pálido.

-¿Qué demonios pasa? -pregunta el niño rubio.

-Las visiones le afectan -susurro, para mostrar un tono calmado, aunque en realidad estoy de los nervios. Me preocupa lo que pueda pasar en un futuro lejano... o cercano.

-¿Está teniendo una ahora? -pregunta el moreno. Le alzo la mirada y mi asentimiento es la única respuesta que recibe.

Poco a poco, Jojen deja de temblar y sus ojos parecen comenzar a enfocarse en algo que está en este mundo. Le quito la correa y noto cómo su respiración se va calmando. Mi hermano ergue el tronco como puede y mira a Bran.

-He visto a Jon Snow -dice preocupado.

A los Stark se les ilumina la cara.

-¿Lo has visto? -pregunta el moreno- ¿En el Castillo Negro?

-Estaba al otro lado de Muro -Jojen niega con la cabeza-, rodeado de enemigos.

El resto nos miramos entre nosotros, expectantes por escuchar el resto de su sueño.

HE WAS NEVER MINE TO LOSE | ·Meera Reed x Bran Stark·Donde viven las historias. Descúbrelo ahora