🐺[9]🐾

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Taehyung estaba parado a sólo unos metros de Jimin mirándolo fijamente.

-T-Tae...

-¿A dónde vas?- cuestionó levantando una ceja y acercándose rápidamente- ¿Por qué llevas una mochila? Y... ¿Por qué viniste aquí? Son los límites.

El Omega empezó a temblar, juraría que sus piernas parecían dos gelatinas en ese momento. Taehyung era su mejor amigo, pero estaba seguro de que no lo comprendería, pues al igual que toda su manada, le tenía mucho odio a los cambia formas del Norte.

-Y-Yo... Sólo...

Pero antes de acabar la frase, el Alfa lo sujetó de la muñeca y lo jaló hacia atrás, colocándolo a sus espaldas. Posteriormente empezó a olfatear mientras miraba hacia todas partes.

-No estamos solos Jimin. Hay otro Alfa muy cerca de aquí... Lo percibo.

El Omega supo de inmediato que se trataba de Jungkook, jamás podría confundir su aroma. Sin embargo, en lugar de tranquilizarse, sus nervios se incrementaron en ese momento, sabía que si el lobo del Norte intentaba algo, Taehyung no se quedaría de brazos cruzados.

-M-Mejor vámonos- habló Jimin intentando distraerlo, pero ya era muy tarde.

Taehyung cambió de forma repentinamente dejando salir a su lobo, el cual poseía un tono marrón oscuro con manchas negras, y finalmente empezó a mostrar los colmillos al mismo tiempo que su pelaje se erizaba y sus ojos tomaban un tono amarillo. Estaba listo para atacar.

De pronto, de entre los árboles se asomó otro enorme lobo, pero este era de color negro. Jimin sabía quién era y aquello hizo que su corazón se agitara, latiendo aún más fuerte cuando Kuro soltó un aullido y avanzó amenazante con la mirada fija en los dos cambiaformas de la manada contraria, pero sus ojos al final se clavaron en el chico rubio, pues el lobo percibía el olor del que ahora veía como su Omega, y no podía permitir que otro Alfa estuviese cerca de él y mucho menos cuando podía sentir el peligro.

Kuro empezó a correr en dirección al otro Alfa, quien estaba más que preparado para la batalla, sin embargo se detuvo poco antes de llegar a los límites, mostró sus colmillos y empezó a caminar de un lado a otro, retando a Vante, el lobo de Taehyung.

Los dos se miraban fijamente esperando el momento preciso para atacar.

Y Jimin solamente retrocedió unos pasos, los nervios mezclados con el miedo no lo dejaba pensar con claridad.

De pronto ambos Alfas aullaron a la luna llena y fue entonces que el tiempo se acabó, los dos corrieron hacia el otro empezando con el enfrentamiento.

Vante fue el primero en enterrar sus colmillos sobre el lomo al lobo contrario sacándole un chillido de dolor, pero éste no se quedó atrás, pues lo tomó de una pata y lo jaló logrando derribarlo.

Ambos tiraban mordidas y arañazos al otro. La furia los invadía y lo único que pasaba por sus cabezas era vencer y dominar a su oponente, incluso si debían matarlo, por lo que en el lugar sólo se escuchaban los chillidos de dolor y los gruñidos de los dos enormes lobos.

Aunque era una suerte que ambos fueran fuertes, estaba claro que Kuro lo era mucho más y en cualquier momento se aburriría de esa batalla y podría matar a Vante de una sola mordida, pero no quería hacerlo, no sin antes jugar un poco con él.

Jimin vió tal situación en donde su mejor amigo y el chico que le atraía estaban en peligro, así que sin pensarlo se transformó con la intensión de detener la pelea. Empezó a correr en dirección a los Alfas sin que éstos se percataran de su presencia, hasta que un chillido muy fuerte resonó por todo el bosque deteniendo el enfrentamiento.

El lobo blanco permanecía tirado sobre el pasto con la pata sangrando y revolcándose del dolor.

Sin querer, Vante lo había mordido y ya que Shiro era mucho más frágil, los colmillos le habían hecho más daño del que podía imaginar.

El Alfa del Norte dejó de poner atención a su contrincante para acercarse velozmente al pequeño Omega que ahora lo necesitaba.

Kuro lamió la pata del lobo blanco tratando de aminorar el dolor mientras que Vante intentaba acercarse, pero el lobo negro lo lanzó lejos logrando lastimarlo.

En ese instante todos volvieron a su transformación humana y Jungkook acarició la mejilla del Omega con ternura y preocupación.

—Jimin... Lo lamento— murmuró con la voz quebrada—. Ésto fue mi culpa.

—No es así— respondió el rubio aacariciándo su rostro mientras hacía muecas de dolor.

Y lo último que faltaba para concluir aquella maravillosa noche, fue el aullido de varios lobos que captaron la atención de los cambiaformas ahí presentes.

Todos los machos de la manada del Sur venían corriendo, y cuando vieron a Jimin y Taehyung lastimados, las cosas les habían parecido bastante claras: El Alfa del Norte era peligroso y los había atacado.

El padre del Omega, furioso se lanzó contra Jungkook, quien retrocedió con rapidez, evitando ser mordido y también evitando un nuevo enfrentamiento, ya no quería lastimar a nadie.

El hombre cambió de forma y se acercó a su hijo.

—Tú— señaló a Jungkook con rabia—No vuelvas a acercarte... ¡Maldito!

Los ojos de Jimin se cristalizaron al ver el rostro de Jungkook, tan afligido pero al mismo tiempo molesto y preocupado. Pero no pudo hacer ni decir nada. Y aquella mirada solamente empeoró cuando fue levantado por YoonGi del piso.

Jungkook sintió ganas de matarlo, pero eran unos veinte lobos contra él solo y no importaba que tan fuerte era, no podría contra tantos.

—Vámonos— ordenó el líder volviendo a su forma animal, y antes de entrar en el bosque, Jimin levantó su brazo y estiró la mano, como si quisiera alcanzarlo.

Jungkook hizo lo mismo, hasta que pronto no lo vió más. Su Omega desapareció entre los árboles con su manada y ese estúpido Alfa que lo quería marcar.

—No me daré por vencido— murmuró mirando de nuevo a la luna— No voy a dejarte...

Amor prohibido.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora