🐾[18]🐺

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SeoJoon se quedó mirando hacia la cabaña, pues sabía que dentro estaba su hijo, así que cuando toda su manada se fue contra "el enemigo", él avanzó  sintiendo su sangre hervir.

Empujó la puerta abruptamente, pero en el momento en que ésta se abrió, un lobo blanco se abalanzó contra él, sorprendiéndolo y tirándolo contra el suelo.

—Jimin— murmuró desconcertado al ver como el Omega le mostraba sus colmillos de manera amenazante mientras que emitía furiosos gruñidos— ¡Soy tu padre, joder!

El lobo blanco ignoró las palabras de su progenitor y se giró para ir hacia su manada, la misma que lastimaba a su pareja.

SeoJoon trató de detenerlo, pero el pequeño corría muy rápido, tanto que se lanzó contra Vante sin que este al menos pudiera darse cuenta de su presencia, tirándolo de costado al suelo.

Intentó con todas sus fuerzas ayudar a Kuro, pero él no era tan fuerte.

Uno de los Alfas le dió un arañazo en el hocico al Omega, y este emitió un chillido que de inmediato enfureció a Kuro aún más.

El Alfa del Norte empezó a comportarse más agresivo, estaba lastimado pero eso no lo hacía rendirse, y mucho menos permitir que le hicieran daño a su Omega, así que se lanzó agresivamente contra aquel que se atrevió a rasguñarlo.

Quiso poner a Shiro detrás suyo para protegerlo, sin embargo, los lobos parecían no reconocer al Omega ya que estaban demasiado alterados y trataban de morderlo.

Los chillidos y gruñidos por parte de todos los cambiaformas era lo único que se escuchaba en todo el bosque.

Y SeoJoon, al ver a su hijo siendo lastimado, le importó poco si era su manada, se lanzó contra aquellos que lo habían herido y los mordió con brutalidad haciéndolo​s retorcerse del dolor.

De pronto una serie de aullidos provinieron del bosque, llamando la atención de los presentes.

El aroma se intensificaba, pues Jeon MinHo y todos los machos su manada se acercaban a gran velocidad. Sabían que Jungkook se hallaba ahí.

Y cuando los cambiaformas del Norte llegaron a la cabaña, miraron la escena para después sentir como la sangre les hervía, pues uno de sus miembros más preciados estaba gravemente herido.

El Alfa mayor tomó su forma humana y se acercó a SeoJoon, que hizo lo mismo.

—¿Qué mierda crees que haces? ¡Ese es mi hijo!

—¡Tú hijo secuestro al mío!

—Papá, eso no...— intervino Jimin tomando su forma humana, hincándose a un lado de Jungkook, quien sujetaba con fuerza su brazo sangrando.

—¡Cállate! — gritó su padre furioso. El Omega sólo agachó la cabeza y se encogió un poco — Si tu hijo sigue buscando a mi hijo... Lo asesinaré.

—Tal vez sea tu hijo el que lo busca...

—Mi Jimin no es así...

—Tienes razón... Es sólo un adorno del cual mi Jungkook se aburriría pronto... Tu hijo es débil y está fabricado para obedecer... En cambio el mío es un poderoso Alfa que podría tener a quien quisiera.

—¡No hables mal de mi pequeño!

—¡Mantenlo alejado de mi hijo!... Si no lo haces juro que lo mataré.

—Le tocas un sólo cabello y acabaré con toda tu manada.

—¡Basta!— todos giraron para ver a Jungkook, quien ahora estaba de pie siendo sujetado por Jimin, ambos mirándolos fijamente — No tienes derecho a decidir ésto padre. No puedes... Yo escogeré con quién me casaré. Amo a Jimin. Me enamoré de él desde el momento en que lo ví por primera vez — el Alfa miró al Omega quien estaba sonrojado y sonrieron levemente —. Yo quiero marcarlo y reclamarlo como mío...

—¡Jamás!— gritaron ambos padres al unísono.

Los lobos del Norte y los del Sur tomaron por la fuerza a la pareja, separándolos con dificultad.

Jimin y Jungkook se tomaron de las manos fuertemente mientras que el rubio lloraba y lo apretaba con todo lo que podía para no soltarlo, pero al final terminaron por separarlos.

—¡Jungkook!— gritó el Omega al ser cargado en el hombro de YoonGi. Desesperado estiraba su mano y pataleaba.

El Alfa iba a ir tras él pero fue detenido por su manada, la cual se colocó frente a él como si fuera una barrera.

—¡Déjenme ir! ¡Jimin!

—¡Cállate!—su padre lo golpeó bruscamente una vez, después otra y otra, hasta que cayó al piso, y aún así intentaba alcanzar al Omega quien cada vez se veía más lejos.

—Padre... Por...por favor— dijo mientras escupía algo de sangre.

—¡Cállate! ¡Me has decepcionado!... Tendremos que hablar con toda la manada, y si se decide que ésto es traición...Deberás morir...

Amor prohibido.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora