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Chapter III

Cada día que pasaba volvían a repetir el procedimiento. Boruto estaba cansado y adolorido. No funcionaba, ya que no aportaba la poca fuerza de Mitsuki, las estacas aún seguían en sus manos, y eso lo frustraba.

Prefirieron detenerse por ahora, había anochecido hace un rato.

Desde la primera noche habían acordado en turnarse las camas, y esta noche le tocaba a Boruto, precisamente en donde hacía más frío de lo normal, no era difícil saber cuando el cielo se habia oscurecido cuando uno lograba percibir las bajas temperaturas.

Lo más indicado que había pensado Boruto era que esta vez, solo por esta vez, ambos debían compartir la cama, si eso significaría no helarse en la fría noche.

Y así fue, ambos estaban recostados dándose la espalda sin decir ninguna palabra, la cama no era tan angosta pero aun así con leves movimientos sus espaldas chocaban, pero no importaba en realidad, ya que Boruto no podía dormir así que aprovechó para bajar su mirada cautelosamente para contemplar sus manos, no podía hacer más que eso. Su condición era desfavorable, ya que le ardía con el simple contacto, estaban magulladas y presentaba inflamaciones severas ¿Acaso podría empeorar? Se preguntó.

A veces se preguntaba si era buena idea todo esto, su mano estaba comenzando a perder color, se veía cada vez más pálida, temía que en algún momento su mano se infectara gravemente al punto de tener que amputarlas, no… eso sería demasiado extremo, sintió escalofrío ante ese pensamiento.

— ¿Boruto?

Boruto respingó al oír la voz de Mitsuki, no había sido su intención en despertarlo.

— ¿Sí, qué pasa…?— respondió lentamente, simulando estar somnoliento.

— Parece que no puedes dormir —

— ¡¿Q-qué?! — respondió contrariado por la deducción de Mitsuki, adquiriendo en su tono de voz una clara defensiva — ¡Claro estaba durmiendo, dattebasa! —

— Es extraño… normalmente cuando duermes haces ruido mientras respiras y a veces hablas —

Boruto se removió inquieto.

— ¿Hablar, a qué te refieres? — preguntó intrigado después de un rato de silencio.

— Dices algunas cosas incoherentes pero sobretodo mencionas a tu padre —

Hubo silencio a partir de ese momento, Boruto frunció el ceño mientras reflexionaba sobre eso, tener pensamientos sobre su padre le despertaba un montón de sentimientos contradictorios.

— Parece que lo querías mucho, cierto? —

— ¡Cállate! no es eso — Los ojos de Boruto presentaban un brillo que se adquiría cuando se trataba de una profunda tristeza, después de una pausa habló — Le dije cosas horribles…—

— Si te sientes mal, entonces podrías disculparte, él lo sabrá…

— No lo entenderías, mi relación con él es algo complicada — dijo con voz apretada.

— Entonces demuéstrale lo que sientes

Boruto apretó los dientes.

— ¡No se trata de eso! ¿Cómo podrías saberlo? ¡Si tú ni siquiera estás con tu padre! —

Hubo un silencio a partir de eso, Boruto se dio cuenta que había sonado demasiado rudo con él ¿lo había ofendido? se incomodó un poco por eso y luego soltó un aire pesado para proseguir.

— Quiero decir, en realidad sí tienes un papá pero nunca lo había visto, jamás te vi con él, solo recuerdo cuando dijiste que su nombre es… —